Incautados en Tailandia seis fetos quemados y envueltos en oro para magia negra
Londres, EP
La Policía tailandesa ha detenido a un ciudadano británico de origen hongkonés que pretendía viajar hacia taiwán con seis fetos de bebé quemados, tatuados y envueltos en oro laminado para venderlos para realizar rituales de magia negra, según ha informado la Policía de Bangkok.
El sospechoso es Chow Hok Kuen, de 28 años de edad, fue detenido en una habitación de hotel del barrio chino de la capital tailandesa tras descubrirse que ocultaba los cuerpos entre su equipaje.
Los bebés, de entre dos y ocho meses, fueron adquiridos por 200.000 bath (unos 5.000 euros) y Kuen los había puesto a la venta en una página de internet taiwanesa por un precio unas seis veces mayor, informa la Policía taiwanesa, según recoge el diario 'The Bangkok Post'.
Las leyes tailandesas prevén penas de hasta un año de cárcel y 2.000 bath de multa (unos 50 euros) por posesión ilegal de cuerpos de niños.
"Ha explicado que su intención era vender los cuerpos a clientes que creen que les traerían suerte y riqueza", ha declarado un portavoz policial, el coronel Wiwat Kamchamnan, informa 'The Bangkok Post'. Algunas comunidades chinas creen en los rituales de magia negra tailandeses que consideran que los cuerpos de bebé traen buena suerte a su propietario y se suelen conservar en pequeños altares en viviendas o negocios.
La Policía tailandesa ha detenido a un ciudadano británico de origen hongkonés que pretendía viajar hacia taiwán con seis fetos de bebé quemados, tatuados y envueltos en oro laminado para venderlos para realizar rituales de magia negra, según ha informado la Policía de Bangkok.
El sospechoso es Chow Hok Kuen, de 28 años de edad, fue detenido en una habitación de hotel del barrio chino de la capital tailandesa tras descubrirse que ocultaba los cuerpos entre su equipaje.
Los bebés, de entre dos y ocho meses, fueron adquiridos por 200.000 bath (unos 5.000 euros) y Kuen los había puesto a la venta en una página de internet taiwanesa por un precio unas seis veces mayor, informa la Policía taiwanesa, según recoge el diario 'The Bangkok Post'.
Las leyes tailandesas prevén penas de hasta un año de cárcel y 2.000 bath de multa (unos 50 euros) por posesión ilegal de cuerpos de niños.
"Ha explicado que su intención era vender los cuerpos a clientes que creen que les traerían suerte y riqueza", ha declarado un portavoz policial, el coronel Wiwat Kamchamnan, informa 'The Bangkok Post'. Algunas comunidades chinas creen en los rituales de magia negra tailandeses que consideran que los cuerpos de bebé traen buena suerte a su propietario y se suelen conservar en pequeños altares en viviendas o negocios.