CUAUHTÉMOC CÁRDENAS: “Los partidos en México trabajan más por sus intereses que por la sociedad”
El fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) asegura que México está en peores condiciones que cuando él compitió por primera vez a la presidencia, en 1988
Verónica Calderón
Madrid, El País
Sentado en un jardín en Madrid, el político mexicano Cuauhtémoc Cárdenas (Ciudad de México, 1934) recuerda a su amigo, el recién fallecido escritor Carlos Fuentes, “un promotor y defensor de las principales causas del país. Ha sido una pérdida muy repentina para mí”. Cárdenas está en Madrid invitado por la Fundación Ortega y Gasset para participar en una charla sobre los movimientos de izquierda en México, que se celebra mañana jueves. Tres veces candidato a la presidencia, rechaza la etiqueta de “líder moral” del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que fundó en 1989 tras perder las elecciones en un proceso repleto de acusaciones de fraude. A dos meses de que se celebren otros comicios presidenciales, los del 1 de julio de este año, Cárdenas opina que los mexicanos deben votar para que se produzca “un cambio real de la situación actual, producto de un proyecto social y económico puesto en marcha en los años ochenta. Han sido 30 años de retroceso económico, de deterioro social, de aumento de la violencia, de pérdida de control de territorios cada vez más extensos...”
Pregunta. Usted se presentó por primera vez a la presidencia en 1988 ¿México está peor que entonces?
Respuesta. Sin duda. Hay un deterioro mayor.
P. Han pasado 12 años desde que el Partido Acción Nacional (PAN, conservador) llegó a la presidencia, ¿qué errores han cometido los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón?
R. El error es su proyecto en sí, que ha generado exclusión y ha concentrado los ingresos en grupos cada vez más reducidos. Ahora, de acuerdo con su proyecto, han cumplido sus metas. Si eso es lo que querían conseguir, pues estupendo.
P. ¿Un proyecto neoliberal?
R. Y subordinado. Somos los mejores contribuyentes de mano de obra barata a Estados Unidos.
P. Las encuestas indican una cómoda ventaja para Enrique Peña Nieto, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI). De ganar la presidencia, ¿volverá la hegemonía del histórico partido mexicano que gobernó al país durante 70 años?
R. No lo sé. Lo que sí creo es que continuaría el proyecto que el PRI y el PAN han instrumentado desde 1982. Cambia el partido en el Gobierno, pero el proyecto ha sido el mismo.
P. ¿Qué opinión tiene de Peña Nieto?
R. Que es el candidato del PRI. No lo he tratado, nunca me he sentado a platicar con él. Sólo hemos intercambiado saludos.
P. “Es el candidato del PRI”. Suena tajante.
R. [Sonríe]. Como si digo que Josefina Vázquez Mota es la candidata del PAN.
P. Hay polémica por la inclusión en las listas del senado del PRD de Manuel Bartlett, secretario de Gobernación —ministro de Interior— durante la polémica elección de 1988: Manuel Bartlett. Usted, como líder moral...
R. No tengo muy claro qué quiere decir eso. No intervengo en las decisiones que toma el partido y no opino a menos que se me consulte.
P. Aun así es Manuel Bartlett. ¿Por qué?
R. En primer lugar, él llega como candidato del Partido del Trabajo [que se presenta en coalición con el PRD]. Lo que falta es una amplia explicación suya sobre lo que sabe de [la elección presidencial\] de 1988.
P. ¿Falta memoria histórica en México?
R. Hay quien prefiere que no se recuerden muchos hechos.
P. ¿Las instituciones democráticas son más sólidas que entonces?
R. Sí. Tenemos mejores elecciones de las que teníamos antes. Yo quiero pensar que los votos se van a contar bien y que no habrá intromisiones indebidas, empezando por el presidente.
P. ¿A qué atribuye la aparición de movimientos como el de los indignados en España?
R. A la incapacidad de los partidos y los gobiernos de responder a lo que necesita la gente. Ocurrió en el 68.
P. ¿Y sirven de algo?
R. Sin duda. Contribuyen a las causas de la gente.
P. Una encuesta difundida en 2011 apunta que los partidos políticos son la institución peor valorada del país. Solo los superan los diputados...
R. Que son lo mismo... [risas].
P. ¿Por qué el desencuentro?
R. Porque los partidos están alejados de la gente, trabajan más por sus propios intereses que por la sociedad. Ojalá se distinguieran por estar haciendo propuestas y no por otras cosas.
P. En sus mitines en algunos pueblos mexicanos, la gente mostraba la imagen de su padre [el expresidente Lázaro Cárdenas del Río]. ¿Por qué se recuerda a un político tantos años después mientras los actuales son tan impopulares?
R. Estaban en contacto con la gente. Tenían tiempo e interés de escuchar. No eran solo visitas fugaces, como en esta campaña.
Verónica CalderónMadrid, El País
Sentado en un jardín en Madrid, el político mexicano Cuauhtémoc Cárdenas (Ciudad de México, 1934) recuerda a su amigo, el recién fallecido escritor Carlos Fuentes, “un promotor y defensor de las principales causas del país. Ha sido una pérdida muy repentina para mí”. Cárdenas está en Madrid invitado por la Fundación Ortega y Gasset para participar en una charla sobre los movimientos de izquierda en México, que se celebra mañana jueves. Tres veces candidato a la presidencia, rechaza la etiqueta de “líder moral” del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que fundó en 1989 tras perder las elecciones en un proceso repleto de acusaciones de fraude. A dos meses de que se celebren otros comicios presidenciales, los del 1 de julio de este año, Cárdenas opina que los mexicanos deben votar para que se produzca “un cambio real de la situación actual, producto de un proyecto social y económico puesto en marcha en los años ochenta. Han sido 30 años de retroceso económico, de deterioro social, de aumento de la violencia, de pérdida de control de territorios cada vez más extensos...”
Pregunta. Usted se presentó por primera vez a la presidencia en 1988 ¿México está peor que entonces?
Respuesta. Sin duda. Hay un deterioro mayor.
P. Han pasado 12 años desde que el Partido Acción Nacional (PAN, conservador) llegó a la presidencia, ¿qué errores han cometido los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón?
R. El error es su proyecto en sí, que ha generado exclusión y ha concentrado los ingresos en grupos cada vez más reducidos. Ahora, de acuerdo con su proyecto, han cumplido sus metas. Si eso es lo que querían conseguir, pues estupendo.
P. ¿Un proyecto neoliberal?
R. Y subordinado. Somos los mejores contribuyentes de mano de obra barata a Estados Unidos.
P. Las encuestas indican una cómoda ventaja para Enrique Peña Nieto, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI). De ganar la presidencia, ¿volverá la hegemonía del histórico partido mexicano que gobernó al país durante 70 años?
R. No lo sé. Lo que sí creo es que continuaría el proyecto que el PRI y el PAN han instrumentado desde 1982. Cambia el partido en el Gobierno, pero el proyecto ha sido el mismo.
P. ¿Qué opinión tiene de Peña Nieto?
R. Que es el candidato del PRI. No lo he tratado, nunca me he sentado a platicar con él. Sólo hemos intercambiado saludos.
P. “Es el candidato del PRI”. Suena tajante.
R. [Sonríe]. Como si digo que Josefina Vázquez Mota es la candidata del PAN.
P. Hay polémica por la inclusión en las listas del senado del PRD de Manuel Bartlett, secretario de Gobernación —ministro de Interior— durante la polémica elección de 1988: Manuel Bartlett. Usted, como líder moral...
R. No tengo muy claro qué quiere decir eso. No intervengo en las decisiones que toma el partido y no opino a menos que se me consulte.
P. Aun así es Manuel Bartlett. ¿Por qué?
R. En primer lugar, él llega como candidato del Partido del Trabajo [que se presenta en coalición con el PRD]. Lo que falta es una amplia explicación suya sobre lo que sabe de [la elección presidencial\] de 1988.
P. ¿Falta memoria histórica en México?
R. Hay quien prefiere que no se recuerden muchos hechos.
P. ¿Las instituciones democráticas son más sólidas que entonces?
R. Sí. Tenemos mejores elecciones de las que teníamos antes. Yo quiero pensar que los votos se van a contar bien y que no habrá intromisiones indebidas, empezando por el presidente.
P. ¿A qué atribuye la aparición de movimientos como el de los indignados en España?
R. A la incapacidad de los partidos y los gobiernos de responder a lo que necesita la gente. Ocurrió en el 68.
P. ¿Y sirven de algo?
R. Sin duda. Contribuyen a las causas de la gente.
P. Una encuesta difundida en 2011 apunta que los partidos políticos son la institución peor valorada del país. Solo los superan los diputados...
R. Que son lo mismo... [risas].
P. ¿Por qué el desencuentro?
R. Porque los partidos están alejados de la gente, trabajan más por sus propios intereses que por la sociedad. Ojalá se distinguieran por estar haciendo propuestas y no por otras cosas.
P. En sus mitines en algunos pueblos mexicanos, la gente mostraba la imagen de su padre [el expresidente Lázaro Cárdenas del Río]. ¿Por qué se recuerda a un político tantos años después mientras los actuales son tan impopulares?
R. Estaban en contacto con la gente. Tenían tiempo e interés de escuchar. No eran solo visitas fugaces, como en esta campaña.
