Ben Alí sigue teniendo acceso a cuentas en el extranjero
Túnez, EP
El ministro de Justicia de Túnez, Nourredine Bouheiri, ha asegurado este martes que el Gobierno sospecha que el expresidente Zine al Abidine Ben Alí, exiliado en Arabia Saudí, sigue teniendo acceso a fondos en el extranjero 16 meses después del fin de su régimen.
Ben Alí, que huyó a Arabia Saudí tras abandonar el poder el 14 de enero de 2011, ha sido condenado 'in absentia' a varias décadas de prisión por cargos que van desde corrupción a tortura. Durante sus 23 años en el poder, el dirigente y su familia acumularon amplias fortunas y se cuidaron de mantener gran parte de sus riquezas en cuentas extranjeras.
Bouheiri ha indicado, en una entrevista a Reuters, que Ben Alí "aún depende de una red de tráfico de dinero" y ha citado como prueba que se han detectado "movimientos" en varias de las cuentas, aunque no ha detallado a cuánto dinero tendría acceso ni cómo puede disponer de él.
El ministro ha apuntado que su Gobierno espera recuperar en primer lugar los activos de Ben Alí y de su mujer, Leila Trabelsi, en Líbano y Suiza. También confía en lograr la devolución de los yates propiedad de Trabelsi en Italia y España.
El Gobierno tunecino calcula en "45 millones de dólares" (35,3 millones de euros) el dinero en Líbano. "Los recibiremos muy pronto", ha dicho Bouheiri, que también ha informado de que las autoridades suizas han permitido que abogados de Túnez accedan a "documentos secretos de los balances de Ben Alí y su familia".
Suiza informó hace un año de la congelación de 60 millones de francos (50 millones de euros) vinculados al antiguo presidente del país norteafricano.
En octubre de 2011, el Gobierno suizo aceptó formalmente la petición de Túnez para prestarle asistencia judicial en la recuperación del dinero de Ben Alí y ha enviado expertos financieros y legales a otros países para tratar de avanzar en este proceso.
EXTRADICIÓN
El Gobierno de Túnez ha recibido críticas por su incapacidad para lograr que Arabia Saudí entregue a Ben Alí y a su mujer, que siguen sin rendir cuentas en su país. El ministro de Justicia tunecino ha advertido a Riad de que no debería confiar en un hombre que ha traicionado a su propio pueblo.
"No hemos dudado ni un momento de que las autoridades saudíes y el rey respetan la revolución y a la población tunecina", ha apuntado Bouheiri, quien ha advertido de que la presencia de Arabia Saudí representa un "peligro" para el compromiso de este país con la democracia en Túnez.
Otra extradición reclamada por el Gobierno de Túnez es la de Belhassen Trabelsi, cuñado de Ben Alí que ha solicitado asilo en Canadá. "Nuestros esfuerzos han comenzado a dar sus frutos y la primera muestra es el rechazo de Canadá a concederle la residencia", ha declarado Bouheiri.
Túnez busca a Belhassen Trabelsi por supuestos delitos de corrupción. Bouheiri ha aclarado que no quieren "venganza", sino simplemente "aplicar la ley".
El ministro de Justicia de Túnez, Nourredine Bouheiri, ha asegurado este martes que el Gobierno sospecha que el expresidente Zine al Abidine Ben Alí, exiliado en Arabia Saudí, sigue teniendo acceso a fondos en el extranjero 16 meses después del fin de su régimen.
Ben Alí, que huyó a Arabia Saudí tras abandonar el poder el 14 de enero de 2011, ha sido condenado 'in absentia' a varias décadas de prisión por cargos que van desde corrupción a tortura. Durante sus 23 años en el poder, el dirigente y su familia acumularon amplias fortunas y se cuidaron de mantener gran parte de sus riquezas en cuentas extranjeras.
Bouheiri ha indicado, en una entrevista a Reuters, que Ben Alí "aún depende de una red de tráfico de dinero" y ha citado como prueba que se han detectado "movimientos" en varias de las cuentas, aunque no ha detallado a cuánto dinero tendría acceso ni cómo puede disponer de él.
El ministro ha apuntado que su Gobierno espera recuperar en primer lugar los activos de Ben Alí y de su mujer, Leila Trabelsi, en Líbano y Suiza. También confía en lograr la devolución de los yates propiedad de Trabelsi en Italia y España.
El Gobierno tunecino calcula en "45 millones de dólares" (35,3 millones de euros) el dinero en Líbano. "Los recibiremos muy pronto", ha dicho Bouheiri, que también ha informado de que las autoridades suizas han permitido que abogados de Túnez accedan a "documentos secretos de los balances de Ben Alí y su familia".
Suiza informó hace un año de la congelación de 60 millones de francos (50 millones de euros) vinculados al antiguo presidente del país norteafricano.
En octubre de 2011, el Gobierno suizo aceptó formalmente la petición de Túnez para prestarle asistencia judicial en la recuperación del dinero de Ben Alí y ha enviado expertos financieros y legales a otros países para tratar de avanzar en este proceso.
EXTRADICIÓN
El Gobierno de Túnez ha recibido críticas por su incapacidad para lograr que Arabia Saudí entregue a Ben Alí y a su mujer, que siguen sin rendir cuentas en su país. El ministro de Justicia tunecino ha advertido a Riad de que no debería confiar en un hombre que ha traicionado a su propio pueblo.
"No hemos dudado ni un momento de que las autoridades saudíes y el rey respetan la revolución y a la población tunecina", ha apuntado Bouheiri, quien ha advertido de que la presencia de Arabia Saudí representa un "peligro" para el compromiso de este país con la democracia en Túnez.
Otra extradición reclamada por el Gobierno de Túnez es la de Belhassen Trabelsi, cuñado de Ben Alí que ha solicitado asilo en Canadá. "Nuestros esfuerzos han comenzado a dar sus frutos y la primera muestra es el rechazo de Canadá a concederle la residencia", ha declarado Bouheiri.
Túnez busca a Belhassen Trabelsi por supuestos delitos de corrupción. Bouheiri ha aclarado que no quieren "venganza", sino simplemente "aplicar la ley".