Medvedev: el poder político del país no debe recaer en una sola persona
Moscú, EP
El presidente de Rusia, Dimitri Medvedev, ha dicho que el poder político en el país no debe recaer en manos de una sola persona antes de alabar su 'tándem' gubernamental con el primer ministro y futuro presidente, Vladimir Putin.
"Es bueno que el destino del país y sus procesos políticos dependan de más que del deseo de una sola persona que haga cualquier cosa que se le pase por la cabeza", ha apuntado Medvedev en una entrevista de dos horas de duración emitida simultáneamente por varios canales públicos.
Medvedev anunció en septiembre que no buscaría la reelección y que dejaría el camino libre a Putin, que ya fue presidente entre 2000 y 2008. Tras el nombramiento de Putin al frente de la Presidencia, se espera que sea Medvedev --quien ya ha sustituido a su mentor político al frente de Rusia Unida-- sea elegido como primer ministro.
"Es tiempo de que todos nos relajemos, porque esto es un trabajo a largo plazo", ha manifestado Medvedev, según ha recogido la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
Además, Medvedev ha subrayado que admira el compromiso y la pasión de los que se manifestaron tras las elecciones legislativas y presidenciales para denunciar irregularidades en los comicios. "No siempre estoy de acuerdo con lo que se dice, pero respeto a la gente que salió a las calles para expresar sus posiciones políticas", ha agregado.
En este sentido, se ha mostrado en desacuerdo con las afirmaciones de Putin en las que acusó a Estados Unidos de estar detrás de las protestas. "No tiene sentido hablar del poder de Estados Unidos sobre los procesos políticos a gran escala en el país. Somos un gran Estado soberano y nadie puede interferir en él", ha argumentado.
"Es posible influenciar a dos, tres, cinco, 25 o cien personas, pero es imposible inducir a más a protestar contra el Gobierno o a ir a las urnas a apoyar a las autoridades", ha dicho.
En otro orden de cosas, el presidente ruso ha vuelto a admitir que su campaña contra la corrupción únicamente ha conseguido unos resultados "modestos". "Sería una grandísima exageración decir que no se ha hecho nada, pero si hablamos de los resultados, son, por supuesto, modestos", ha señalado.
"Seamos francos. Los funcionarios son una corporación. No quieren que nadie interfiera en sus asuntos", ha apuntado. Así, ha dicho que ha despedido a casi la mitad de los gobernadores regionales por sospechas de corrupción desde que llegó al poder en 2008.
Respecto a los lazos entre Rusia y Estados Unidos, Medvedev ha dicho que la relación bilateral "es la mejor de la historia", aunque ha reconocido que "hay asuntos que discutir". Entre estos asuntos está el despliegue de un escudo antimisiles en Europa que Moscú ha respaldado siempre y cuando Washington presente garantías de que no será usado contra Rusia.
Sobre las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, ha dicho que sus simpatías caen de lado "de uno de los candidatos", en aparente referencia al actual mandatario, Barack Obama.
El presidente de Rusia, Dimitri Medvedev, ha dicho que el poder político en el país no debe recaer en manos de una sola persona antes de alabar su 'tándem' gubernamental con el primer ministro y futuro presidente, Vladimir Putin.
"Es bueno que el destino del país y sus procesos políticos dependan de más que del deseo de una sola persona que haga cualquier cosa que se le pase por la cabeza", ha apuntado Medvedev en una entrevista de dos horas de duración emitida simultáneamente por varios canales públicos.
Medvedev anunció en septiembre que no buscaría la reelección y que dejaría el camino libre a Putin, que ya fue presidente entre 2000 y 2008. Tras el nombramiento de Putin al frente de la Presidencia, se espera que sea Medvedev --quien ya ha sustituido a su mentor político al frente de Rusia Unida-- sea elegido como primer ministro.
"Es tiempo de que todos nos relajemos, porque esto es un trabajo a largo plazo", ha manifestado Medvedev, según ha recogido la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
Además, Medvedev ha subrayado que admira el compromiso y la pasión de los que se manifestaron tras las elecciones legislativas y presidenciales para denunciar irregularidades en los comicios. "No siempre estoy de acuerdo con lo que se dice, pero respeto a la gente que salió a las calles para expresar sus posiciones políticas", ha agregado.
En este sentido, se ha mostrado en desacuerdo con las afirmaciones de Putin en las que acusó a Estados Unidos de estar detrás de las protestas. "No tiene sentido hablar del poder de Estados Unidos sobre los procesos políticos a gran escala en el país. Somos un gran Estado soberano y nadie puede interferir en él", ha argumentado.
"Es posible influenciar a dos, tres, cinco, 25 o cien personas, pero es imposible inducir a más a protestar contra el Gobierno o a ir a las urnas a apoyar a las autoridades", ha dicho.
En otro orden de cosas, el presidente ruso ha vuelto a admitir que su campaña contra la corrupción únicamente ha conseguido unos resultados "modestos". "Sería una grandísima exageración decir que no se ha hecho nada, pero si hablamos de los resultados, son, por supuesto, modestos", ha señalado.
"Seamos francos. Los funcionarios son una corporación. No quieren que nadie interfiera en sus asuntos", ha apuntado. Así, ha dicho que ha despedido a casi la mitad de los gobernadores regionales por sospechas de corrupción desde que llegó al poder en 2008.
Respecto a los lazos entre Rusia y Estados Unidos, Medvedev ha dicho que la relación bilateral "es la mejor de la historia", aunque ha reconocido que "hay asuntos que discutir". Entre estos asuntos está el despliegue de un escudo antimisiles en Europa que Moscú ha respaldado siempre y cuando Washington presente garantías de que no será usado contra Rusia.
Sobre las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, ha dicho que sus simpatías caen de lado "de uno de los candidatos", en aparente referencia al actual mandatario, Barack Obama.