Irán y Afganistán acuerdan un intercambio de presos
Kabul, EP
Las autoridades de Afganistán e Irán han acordado un intercambio de presos, según ha informado este jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores de Kabul.
Miles de presos afganos están en cárceles iraníes, algunos a la espera de ser ejecutados por el tráfico de estupefacientes.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Janan Musazai ha anunciado que el acuerdo "fue firmado el martes por el presidente iraní (Mahmud Ahmadineyad) y es efectivo de inmediato". Musazai ha añadido que en las cárceles de Irán hay alrededor de 3.000 afganos. Sin embargo no está claro cuántos presos iraníes están recluidos en las cárceles afganas.
Los dos países vecinos establecieron las reglas que definen las condiciones de estos intercambios por primera vez en 2006, lo que ha permitido que los presos o sus familiares puedan elegir si desean estar encarcelados en Irán o en Afganistán.
El Ministerio de Asuntos Exteriores elogió la medida por parte de Irán porque supone "el fortalecimiento de las relaciones bilaterales", pero ha aclarado que el acuerdo solo se aplica a los reclusos que aún tengan que permanecer al menos seis meses en la cárcel.
La OTAN y sus socios extranjeros se preparan para poner fin a sus operaciones de combate en Afganistán a finales de 2014, por lo que la atención se ha orientado hacia los países vecinos y qué papel podrían desempeñar para construir el futuro de Afganistán.
Aunque entre Afganistán e Irán han mejorado desde que los talibán fueron derrocados hace más de una década, la relación entre ambos países sigue siendo frágil.
Kabul dijo que estaba "sorprendido" por las noticias de que Irán había ejecutado a un gran número de presos afganos el año pasado, la mayoría de ellos condenados por tráfico de drogas.
Las dificultades económicas y la inseguridad han llevado a muchos afganos a cruzar la porosa frontera con Afganistán que tiene 1.000 kilómetros de largo, e Irán tiene más de un millón de refugiados afganos en la actualidad.
Sin embargo, algunos afganos han dicho que han sufrido prejuicios de parte de los iraníes y que los tratan como ciudadanos de segunda clase. Algunos también son excluidos del trabajo cualificado y muchos recurren al tráfico de drogas.
Usualmente, los traficantes son condenados a muerte en Irán, uno de los verdugos más importantes del mundo.
Las autoridades de Afganistán e Irán han acordado un intercambio de presos, según ha informado este jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores de Kabul.
Miles de presos afganos están en cárceles iraníes, algunos a la espera de ser ejecutados por el tráfico de estupefacientes.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Janan Musazai ha anunciado que el acuerdo "fue firmado el martes por el presidente iraní (Mahmud Ahmadineyad) y es efectivo de inmediato". Musazai ha añadido que en las cárceles de Irán hay alrededor de 3.000 afganos. Sin embargo no está claro cuántos presos iraníes están recluidos en las cárceles afganas.
Los dos países vecinos establecieron las reglas que definen las condiciones de estos intercambios por primera vez en 2006, lo que ha permitido que los presos o sus familiares puedan elegir si desean estar encarcelados en Irán o en Afganistán.
El Ministerio de Asuntos Exteriores elogió la medida por parte de Irán porque supone "el fortalecimiento de las relaciones bilaterales", pero ha aclarado que el acuerdo solo se aplica a los reclusos que aún tengan que permanecer al menos seis meses en la cárcel.
La OTAN y sus socios extranjeros se preparan para poner fin a sus operaciones de combate en Afganistán a finales de 2014, por lo que la atención se ha orientado hacia los países vecinos y qué papel podrían desempeñar para construir el futuro de Afganistán.
Aunque entre Afganistán e Irán han mejorado desde que los talibán fueron derrocados hace más de una década, la relación entre ambos países sigue siendo frágil.
Kabul dijo que estaba "sorprendido" por las noticias de que Irán había ejecutado a un gran número de presos afganos el año pasado, la mayoría de ellos condenados por tráfico de drogas.
Las dificultades económicas y la inseguridad han llevado a muchos afganos a cruzar la porosa frontera con Afganistán que tiene 1.000 kilómetros de largo, e Irán tiene más de un millón de refugiados afganos en la actualidad.
Sin embargo, algunos afganos han dicho que han sufrido prejuicios de parte de los iraníes y que los tratan como ciudadanos de segunda clase. Algunos también son excluidos del trabajo cualificado y muchos recurren al tráfico de drogas.
Usualmente, los traficantes son condenados a muerte en Irán, uno de los verdugos más importantes del mundo.