El primer ministro de Marruecos arremete contra el entorno del rey
Rabat, EP
El primer ministro de Marruecos, Abdelilá Benkirane, ha arremetido contra los asesores del rey Mohamed VI en una serie de comentarios y críticas muy poco comunes en el país, lo que muestra la tensión entre la realeza y el Gobierno islamista.
Ante el posible contagio de las revueltas de Oriente Próximo y otros países del norte de África, las autoridades marroquíes comenzaron una serie de reformas que llevaron al Partido Justicia y Desarrollo (PJD) de Benkirane al poder.
Benkirane aseguró el domingo a varios miembros de su partido que las revueltas en el país no se habían superado y que podrían volver. "En este país, incluso la monarquía necesita miembros que quieran realizar reformas (...). Los reyes no siempre están rodeados de la gente correcta, de hecho pueden estar rodeados por enemigos que se convierten en los primeros en abandonarles", aseguró, según medios locales.
Varios asesores del monarca han criticado los intentos del primer ministro de permitir que la televisión pública sea más abierta, así como diferentes leyes presentadas por el partido. Dos miembros del PJD han confirmado a Reuters que el primer ministro realizó las declaraciones.
Cualquier crítica al entorno del rey es muy inusual en Marruecos, sobre todo procedente de miembros del Gobierno. El PJD prometió en la campaña para las elecciones de noviembre que atacaría a la corrupción, especialmente a las personas que utilizan sus contactos en las altas esferas para conseguir dinero y negocios.
El Gobierno de Benkirane ha detallado algunos de los cambios que deberá realizar la televisión pública, como que no podrá emitir anuncios sobre lotería y tendrá que informar sobre los llamamientos a la oración. Los ejecutivos de la estatal RTM y de otras cadenas han asegurado que las normas atentan contra su independencia.
El primer ministro de Marruecos, Abdelilá Benkirane, ha arremetido contra los asesores del rey Mohamed VI en una serie de comentarios y críticas muy poco comunes en el país, lo que muestra la tensión entre la realeza y el Gobierno islamista.
Ante el posible contagio de las revueltas de Oriente Próximo y otros países del norte de África, las autoridades marroquíes comenzaron una serie de reformas que llevaron al Partido Justicia y Desarrollo (PJD) de Benkirane al poder.
Benkirane aseguró el domingo a varios miembros de su partido que las revueltas en el país no se habían superado y que podrían volver. "En este país, incluso la monarquía necesita miembros que quieran realizar reformas (...). Los reyes no siempre están rodeados de la gente correcta, de hecho pueden estar rodeados por enemigos que se convierten en los primeros en abandonarles", aseguró, según medios locales.
Varios asesores del monarca han criticado los intentos del primer ministro de permitir que la televisión pública sea más abierta, así como diferentes leyes presentadas por el partido. Dos miembros del PJD han confirmado a Reuters que el primer ministro realizó las declaraciones.
Cualquier crítica al entorno del rey es muy inusual en Marruecos, sobre todo procedente de miembros del Gobierno. El PJD prometió en la campaña para las elecciones de noviembre que atacaría a la corrupción, especialmente a las personas que utilizan sus contactos en las altas esferas para conseguir dinero y negocios.
El Gobierno de Benkirane ha detallado algunos de los cambios que deberá realizar la televisión pública, como que no podrá emitir anuncios sobre lotería y tendrá que informar sobre los llamamientos a la oración. Los ejecutivos de la estatal RTM y de otras cadenas han asegurado que las normas atentan contra su independencia.