31 periodistas muertos en 2012, un 50 por ciento más que en el primer trimestre de 2011
Ginebra, EFE
31 periodistas han muerto en actos de violencia en los primeros tres meses de 2012, lo que representa un incremento del 50 % con respecto al mismo periodo de 2011, informó hoy la Campaña Emblema de Prensa (PEC).
Nueve de esos 31 periodistas, cinco extranjeros y cuatro nacionales, encontraron la muerte en Siria entre enero y marzo, según la PEC, que consideró en un comunicado que estos datos reflejan "una tendencia alarmante", y constatan que "la seguridad de los periodistas se ha deteriorado desde el inicio del año".
"El duro peaje pagado en Siria sitúa al país en la primera línea de los lugares más peligrosos para los periodistas", manifestó Blaise Lempen, presidente de esta organización con sede en Ginebra.
En total, 11 periodistas han muerto en Siria desde el inicio del conflicto en marzo de 2011, a lo que hay que sumar la situación de Adem Ozkose y Hamit Coskun, los dos periodistas turcos desaparecidos en territorio sirio hace dos semanas.
La PEC expresó su preocupación por la práctica del Gobierno sirio de detener de manera sistemática a periodistas nacionales en todo el país, y especialmente por la situación de Ali Mahmoud Othman y Marzen Darwish, que "podrían estar siendo sometidos a tortura".
Esta organización subrayó que las restricciones a la cobertura informativa de la situación en Siria prolonga el sufrimiento de los ciudadanos de ese país.
"Si los eventos de matanzas de civiles se mostraran diariamente en las pantallas de televisión, la presión en los Gobiernos podría haber conducido hacia el final del conflicto en lugar de hacia la vergonzosa continuación del mismo", indicó la PEC en su nota.
Lempen señaló que "si no se detiene la violencia, entonces es posible que se repita a largo plazo un escenario como el de Irak".
Tras Siria, el segundo país más peligroso para los periodistas en el primer trimestre de 2012 fue Brasil, con cinco periodistas muertos, seguido de Somalia, con tres, y de la India, Bolivia y Nigeria, con dos informadores fallecidos de manera violenta.
La PEC registró una muerte en cada uno de estos países: Afganistán, Colombia, Haití, Honduras, México, Pakistán, Filipinas y Tailandia.
31 periodistas han muerto en actos de violencia en los primeros tres meses de 2012, lo que representa un incremento del 50 % con respecto al mismo periodo de 2011, informó hoy la Campaña Emblema de Prensa (PEC).
Nueve de esos 31 periodistas, cinco extranjeros y cuatro nacionales, encontraron la muerte en Siria entre enero y marzo, según la PEC, que consideró en un comunicado que estos datos reflejan "una tendencia alarmante", y constatan que "la seguridad de los periodistas se ha deteriorado desde el inicio del año".
"El duro peaje pagado en Siria sitúa al país en la primera línea de los lugares más peligrosos para los periodistas", manifestó Blaise Lempen, presidente de esta organización con sede en Ginebra.
En total, 11 periodistas han muerto en Siria desde el inicio del conflicto en marzo de 2011, a lo que hay que sumar la situación de Adem Ozkose y Hamit Coskun, los dos periodistas turcos desaparecidos en territorio sirio hace dos semanas.
La PEC expresó su preocupación por la práctica del Gobierno sirio de detener de manera sistemática a periodistas nacionales en todo el país, y especialmente por la situación de Ali Mahmoud Othman y Marzen Darwish, que "podrían estar siendo sometidos a tortura".
Esta organización subrayó que las restricciones a la cobertura informativa de la situación en Siria prolonga el sufrimiento de los ciudadanos de ese país.
"Si los eventos de matanzas de civiles se mostraran diariamente en las pantallas de televisión, la presión en los Gobiernos podría haber conducido hacia el final del conflicto en lugar de hacia la vergonzosa continuación del mismo", indicó la PEC en su nota.
Lempen señaló que "si no se detiene la violencia, entonces es posible que se repita a largo plazo un escenario como el de Irak".
Tras Siria, el segundo país más peligroso para los periodistas en el primer trimestre de 2012 fue Brasil, con cinco periodistas muertos, seguido de Somalia, con tres, y de la India, Bolivia y Nigeria, con dos informadores fallecidos de manera violenta.
La PEC registró una muerte en cada uno de estos países: Afganistán, Colombia, Haití, Honduras, México, Pakistán, Filipinas y Tailandia.