Tres muertos y 25 heridos por un coche bomba en Alepo, la segunda ciudad siria
Siria, AFP
Un día después de que dos furgonetas cargadas de explosivos dejaran 27 muertos y unos 140 heridos en Damasco, hoy ha sido la ciudad de Alepo la que ha sufrido la carga de otra explosión de un coche bomba, informa la televisión siria. Las primeras informaciones no oficiales hablan de tres muertos y 25 heridos, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que cuenta con una red de activistas en el país.
Fuentes de la oposición, citadas por Reuters, han informado que el ataque se ha producido, al igual que ayer en Damasco, cerca de sedes de organismos de seguridad.
La televisión estatal siria, como en la víspera, acusó a grupos terroristas por la explosión que se registró entre dos edificios residenciales en el distrito de Al Suleimaniya, un barrio de mayoría cristiana, detrás del edificio de correos. Testigos han contado al observatorio, con sede en Londres, que vieron cuerpos en la calle.
Es el segundo atentado que sufra Alepo, la segunda mayor ciudad siria, después de que el 10 de febrero pasado, dos explosiones redujeran a escombros las sedes de inteligencia y de la policía. En esa oportunidad, la cifra de víctimas mortales fue de 28 y los heridos superaron los 150.
Los atentados de ayer y hoy se han producido en vísperas de un nuevo intento mediador del enviado especial de la ONU, Kofi Annan.
Atentados en Siria
23 de diciembre de 2011. Al menos 44 muertos y 150 heridos por un doble atentado en el barrio de Kfar Suseh
6 de enero. Al menos 26 muertos y 46 heridos por una explosión en la plaza de Midan, en el centro histórico de la capital
10 de febrero. Al menos 28 muertos y más de 150 heridos en dos explosiones en Alepo
17 de marzo. Al menos 27 muertos y 140 heridos tras la explosión de dos furgonetas cargadas de explosivos en el centro de Damasco.
El régimen del presidente Bachar el Asad asegura desde el principio de la crisis que sus tropas combaten “terroristas patrocinados desde el extranjero”, con continuas menciones sobre la responsabilidad de Arabia Saudí y las demás monarquías petroleras del golfo Pérsico, y que la gran mayoría de la población respalda las operaciones represivas.
La posibilidad de que Al Qaeda se haya sumado a la lucha contra el régimen sirio, dictatorial y muy cruel pero de tono laico y hasta ahora tolerante con la diversidad religiosa, tomó fuerza el mes pasado con un mensaje del egipcio Ayman al Zawahiri, sucesor de Osama bin Laden. En un vídeo difundido por Internet, Al Zawahiri convocó a “todos los musulmanes” a prestar apoyo a los rebeldes sirios. En Washington, una de las capitales más críticas con el presidente El Asad, los servicios de espionaje consideran “muy probable” que miembros de Al Qaeda y de otros grupos islamistas violentos se hayan infiltrado en Siria desde el vecino Irak.
Un día después de que dos furgonetas cargadas de explosivos dejaran 27 muertos y unos 140 heridos en Damasco, hoy ha sido la ciudad de Alepo la que ha sufrido la carga de otra explosión de un coche bomba, informa la televisión siria. Las primeras informaciones no oficiales hablan de tres muertos y 25 heridos, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que cuenta con una red de activistas en el país.
Fuentes de la oposición, citadas por Reuters, han informado que el ataque se ha producido, al igual que ayer en Damasco, cerca de sedes de organismos de seguridad.
La televisión estatal siria, como en la víspera, acusó a grupos terroristas por la explosión que se registró entre dos edificios residenciales en el distrito de Al Suleimaniya, un barrio de mayoría cristiana, detrás del edificio de correos. Testigos han contado al observatorio, con sede en Londres, que vieron cuerpos en la calle.
Es el segundo atentado que sufra Alepo, la segunda mayor ciudad siria, después de que el 10 de febrero pasado, dos explosiones redujeran a escombros las sedes de inteligencia y de la policía. En esa oportunidad, la cifra de víctimas mortales fue de 28 y los heridos superaron los 150.
Los atentados de ayer y hoy se han producido en vísperas de un nuevo intento mediador del enviado especial de la ONU, Kofi Annan.
Atentados en Siria
23 de diciembre de 2011. Al menos 44 muertos y 150 heridos por un doble atentado en el barrio de Kfar Suseh
6 de enero. Al menos 26 muertos y 46 heridos por una explosión en la plaza de Midan, en el centro histórico de la capital
10 de febrero. Al menos 28 muertos y más de 150 heridos en dos explosiones en Alepo
17 de marzo. Al menos 27 muertos y 140 heridos tras la explosión de dos furgonetas cargadas de explosivos en el centro de Damasco.
El régimen del presidente Bachar el Asad asegura desde el principio de la crisis que sus tropas combaten “terroristas patrocinados desde el extranjero”, con continuas menciones sobre la responsabilidad de Arabia Saudí y las demás monarquías petroleras del golfo Pérsico, y que la gran mayoría de la población respalda las operaciones represivas.
La posibilidad de que Al Qaeda se haya sumado a la lucha contra el régimen sirio, dictatorial y muy cruel pero de tono laico y hasta ahora tolerante con la diversidad religiosa, tomó fuerza el mes pasado con un mensaje del egipcio Ayman al Zawahiri, sucesor de Osama bin Laden. En un vídeo difundido por Internet, Al Zawahiri convocó a “todos los musulmanes” a prestar apoyo a los rebeldes sirios. En Washington, una de las capitales más críticas con el presidente El Asad, los servicios de espionaje consideran “muy probable” que miembros de Al Qaeda y de otros grupos islamistas violentos se hayan infiltrado en Siria desde el vecino Irak.