Newell's goleó a un tibio Colón en el Cementerio
Santa Fe, DyN
Newell's Old Boys se aprovechó el viernes de la tibieza del equipo de Colón y se dio el gusto de golealo 3 -0 en el Estadio Brigadier General Estanislao López para conseguir tres puntos muy importantes en su lucha por engrosar el promedio.
Pablo Pérez, un ex Unión, Martín Tonso y Maximiliano Urruti le dieron forma al muy buen triunfo rosarino que le permite al conjunto de Gerardo Martino llegar a los siete puntos en el Torneo Clausura 2012.
Lo de Colón, que sufrió las expulsiones del hispano argentino Iván Moreno y Fabianesi y del uruguayo Gerardo Alcoba, fue muy pobre y nunca tuvo poder de reacción ante un rival que manejó los tiempos del partido.
En el comienzo del cotejo, fue el equipo de Martino el que tomo el dominio del juego, administrando campo y pelota ante un muy tibio Colón. Con Leandro Torres y Víctor Figueroa generando fútbol por las bandas, los rosarinos controlaban el trámite desde lo psicológico. De esta forma, la Lepra tuvo su primera oportunidad pasados los 10 minutos, con un remate de Pérez que dio en el cuerpo de Ariel Garcé cuando se disponia a ingresar en el arco de Diego Pozo.
Los de Roberto Sensini se mostraban en desventaja física y no encontraban fútbol, abusando del pelotazo sin sentido. Promediando la primera etapa, la aparición de Federico Higuaín le dio una nueva imagen al Sabalero, que tuvo su primera ocasión de gol sobre los 22 minutos. Un centro del propio Higuaín encontró el cabezazo de Iván Moreno y Fabianesi y la espectacular reacción de Sebastián Peratta para mantener el 0.
La aparición de Colón en el encuentro emparejó la historia, y dio lugar a un partido muy trabado y disputado en el mediocampo. Sobre los 30, volvió a estar cerca el local, con un centro que Esteban Fuertes cabeceó obligando a otra enorme respuesta del portero leproso. En el final del primer tiempo, el juego decayó notablemente y no aportó mayores emociones. La única chance sobre el final fue para la visita, con una escapada que Figueroa no pudo definir desde la izquierda. Sobre los 46, cuando parecia que la historia se cerraba en 0, la aparición en el área y, tras un córner, Pérez abrió el marcador con un remate al lado del poste derecho de Pozo.
En el principio del segundo período, la imagen del partido encontró a un Colón más adelantado, con la obligación de empatar. De todas maneras, los de Sensini eran más voluntad que ideas, y por eso chocaban una y otra vez contra la defensa rosarino.
Con Newell's replegado, el Sabalero sólo intentó llevar peligro mediante remates lejanos de Adrián Bastía y Gabriel Graciani, todos ellos sin destino de red. La más clara para empatar la tuvo el local a los 15, con una gran jugada colectiva que Fuertes no logró rematar desde inmejorable posición. Para colmo de males, el rojinegro santafesino se quedó con uno menos a los 24, cuando Moreno y Fabianesi se hizo expulsar tontamente por una exagerada protesta al árbitro Mauro Vigliano.
Así y todo, el local siguió yendo contra la valla de Peratta, aunque nunca encontró las ideas necesarias para generar real peligro. Con 4 delanteros, Colón se arriesgaba a una contra de un Newell's inteligente que supo esperar su oportunidad para liquidar la historia.
A los 38, el local se quedo con 9 por la expulsión del debutante Alcoba y, a los 42, el ingresado Tonso puso el 2-0 desatando el delirio de los hinchas rosarinos y la bronca contenida por los simpatizantes locales. Para el epílogo, sobre los 49, Urruti estableció el tercero y las cifras definitivas de la goleada visitante.
El final del partido entregó un resultado justo, que se explica a partir de la inteligencia y la eficacia de un equipo leproso que supo ser práctico y aprovecharse de un pobrísimo Colón que mostró su peor imagen en su propio estadio.
