Miles de tunecinos reclaman la instauración de un Estado islámico
Túnez, EP
Miles de tunecinos se han manifestado frente al Parlamento para reclamar la instauración de un Estado islámico regido por las leyes religiosas.
Los manifestantes, que portaban banderas negras y blancas con versículos islámicos, reclamaban que la 'sharia', la ley islámica, sea la norma básica de la Constitución que se debate en el Parlamento desde la caída del expresidente Zine al Abidine Ben Alí, derrocado a causa de la movilizaciones populares de principios de 2011 después de 23 años en el poder.
"La 'sharia' debe ser la principal fuente legislativa en la Constitución. Rechazamos cualquier Constitución que no incluya al Islam como la religión del Estado", declaró Sandli Anwar, mientras portaba un cartel con el lema 'El Islam es nuestra religión, el Corán nuestra Constitución'. "Algunos quieren separar la religión del Estado en Túnez, pero nosotros nos oponemos", aseveró.
Los islamistas no jugaron ningún papel importante en las movilizaciones que pusieron fin al régimen de Ben Alí, pero las discrepancias sobre el papel de la religión en la política han dividido desde entonces a los políticos del país.
Miles de tunecinos se han manifestado frente al Parlamento para reclamar la instauración de un Estado islámico regido por las leyes religiosas.
Los manifestantes, que portaban banderas negras y blancas con versículos islámicos, reclamaban que la 'sharia', la ley islámica, sea la norma básica de la Constitución que se debate en el Parlamento desde la caída del expresidente Zine al Abidine Ben Alí, derrocado a causa de la movilizaciones populares de principios de 2011 después de 23 años en el poder.
"La 'sharia' debe ser la principal fuente legislativa en la Constitución. Rechazamos cualquier Constitución que no incluya al Islam como la religión del Estado", declaró Sandli Anwar, mientras portaba un cartel con el lema 'El Islam es nuestra religión, el Corán nuestra Constitución'. "Algunos quieren separar la religión del Estado en Túnez, pero nosotros nos oponemos", aseveró.
Los islamistas no jugaron ningún papel importante en las movilizaciones que pusieron fin al régimen de Ben Alí, pero las discrepancias sobre el papel de la religión en la política han dividido desde entonces a los políticos del país.