Matan en Indonesia a cinco miembros de un grupo vinculado a Al Qaeda
Yakarta, EP
La Policía de Indonesia ha informado de que los cinco hombres que han muerto en el marco de dos redadas que se han llevado a cabo este domingo en Bali y que supuestamente planeaban atentar contra varios objetivos en la isla pertenecían a una escisión de Jemaah Islamiah, grupo terrorista vinculado a Al Qaeda.
El portavoz de la Policía Nacional Saud Usman Nasution ha explicado que los cinco fallecidos pertenecían a una escisión de Jemaah Islamiah instalada en uno de los campos de entrenamiento del grupo terrorista en Aceh.
Los sospechosos han muerto en el marco de las redadas llevadas a cabo por la Unidad Antiterrorismo 88 en Denpasar --capital de la provincia de Bali-- y en un hotel de Sanur. "Murieron porque desafiaron a los agentes disparando contra ellos", ha explicado el portavoz policial Boy Rafli Amar.
El jefe de la Agencia Antiterrorismo de Indonesia, Ansyaad Mbai, ha indicado que los cinco fallecidos planeaban atentar contra lo que ha definido como "típicos objetivos terroristas" que ya habían identificado y explorado.
La agencia de noticias australiana AAP ha citado a un policía que, bajo condición de anonimato, ha apuntado que el grupo planeaba atentar en Bali el próximo jueves, la víspera del Nyepi, el Día del Silencio que marca el inicio del Año Nuevo Hindú.
Tradicionalmente, en la víspera del Nyepi los balineses protagonizan numerosos desfiles que atraen hacia la isla a una gran cantidad de turistas, objetivo de los terroristas islámicos que operan en la región.
Los portavoces policiales han explicado que los cinco fallecidos pretendían atracar varias oficinas de cambio y tiendas de oro en Bali para financiar sus actividades terroristas. Al parecer, tenían nexos con un grupo responsable de varios robos en bancos de Medan, capital de la provincia de Sumatra Norte.
Bali fue el escenario de los atentados con bomba perpetrados en una discoteca frecuentada por turistas occidentales que en 2002 acabaron con la vida de unas 200 personas, la mayoría de ellas de nacionalidad australiana.
El mes pasado comenzó el juicio contra Umar Patek, uno de los supuestos autores de este atentado, que también está acusado de fabricar las 13 bombas que el 24 de diciembre del año 2000 explotaron en cinco iglesias de Yakarta matando a 15 personas.
Patek, supuesto miembro de Jemaah Islamiah, fue detenido en enero de 2011 en Abbottabad, la misma ciudad donde las fuerzas especiales estadounidenses abatieron el pasado 2 de mayo al entonces líder de Al Qaeda, Usama bin Laden.
La amenaza del terrorismo islámico en Indonesia se ha reducido en los últimos años gracias a la campaña lanzada por las fuerzas de seguridad contra Jemaah Islamiah y los grupos asociados, así como a la captura y condena de algunos de sus líderes.
Indonesia es un Estado secular cuya población es mayoritariamente musulmana, aunque también hay cristianos, hindúes y budistas. Los musulmanes indonesios pertenecen a la rama suní del Islam y algunos de ellos apoyan la acción violenta.