La ONU amplía por un año el mandato de su misión en Libia
Naciones Unidas, EFE
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy una resolución en la que amplía por un año el mandato de la Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL), que deberá asistir a las autoridades libias a dirigir el proceso de transición a la democracia y a restaurar el Estado de derecho.
La resolución fue adoptada por unanimidad por los quince miembros del Consejo, que hoy estuvo presidido por el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, y que contó con la presencia de la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, entre otros.
La ampliación del mandato por doce meses se revisará igualmente de aquí a medio año, según detalla un texto que pide a los responsables de la UNSMIL que ayuden al Gobierno libio en la organización de las elecciones y a restaurar la seguridad en todo el país, una de las mayores preocupaciones de ese órgano de la ONU.
El Consejo aplaude en el texto los "avances positivos" logrados hasta el momento en Libia y se muestra expectante ante las elecciones que se deben celebrar en junio, unos comicios que espera que sean "libres, justos y creíbles" para establecer una Asamblea Constituyente que conduzca al asentamiento de la democracia.
La resolución recoge sin embargo las preocupaciones del Consejo en materia de seguridad y exhorta a las autoridades a tomar "todas las medidas necesarias para evitar las violaciones de los derechos humanos", entre las que señala torturas, violaciones sexuales, detenciones arbitrarias y ejecuciones extrajudiciales.
Asimismo, insta a las autoridades a dejar en libertad "de forma inmediata" a los extranjeros que siguen detenidos ilegalmente en el país, y anima a Trípoli y a los vecinos a cooperar para prevenir que antiguos elementos del régimen de Gadafi desestabilicen el país, lo cual beneficiará a la región del Sahel.
Los quince miembros del Consejo anunciaron también su decisión de mantener vigente el embargo de armas y de pedir al comité de sanciones que revise la congelación de los activos de la Dirección General de Inversiones de Libia (LIA) y la Lybian Africa Investment Portfolio (LAIP).
"Libia es un Estado que necesita ayuda para curar las heridas y avanzar así hacia la democracia, el Estado de derecho y la prosperidad", dijo el embajador libio ante la ONU, Ibrahim Dabashi, quien añadió que el papel de la UNSMIL será muy necesario en la próxima etapa del país, cuando se celebren las primeras elecciones democráticas en el país desde los años 60 del siglo pasado.
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, afirmó que la extensión del mandato de UNSMIL refleja el compromiso de la comunidad internacional con Libia y su gobierno de transición, del que destacó los "tremendos progresos" que ha conseguido, y reconoció que "todavía no se ha concluido el trabajo".
Por ello, dijo Clinton, la comunidad internacional seguirá apoyando al gobierno de Trípoli en la protección de sus fronteras, y sus esfuerzos para reintegrar "a quienes se levantaron en armas en nombre del cambio" en el seno de un ejército "profesional" y una sociedad "pacífica".
Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, reiteró nuevamente que la OTAN debe dar cuentas al Consejo de Seguridad sobre su actuación, una organización que se ofreció como voluntaria para imponer una zona de exclusión aérea en Libia "pero que en realidad terminó lanzando ataques aéreos masivos" en Libia.
Moscú ha pedido varias veces en el Consejo de Seguridad que Naciones Unidas investigue la muerte de civiles en Libia a consecuencia de la operación militar llevada a cabo el año pasado por la OTAN en el país norteafricano bajo amparo del organismo internacional.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy una resolución en la que amplía por un año el mandato de la Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL), que deberá asistir a las autoridades libias a dirigir el proceso de transición a la democracia y a restaurar el Estado de derecho.
La resolución fue adoptada por unanimidad por los quince miembros del Consejo, que hoy estuvo presidido por el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, y que contó con la presencia de la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, entre otros.
La ampliación del mandato por doce meses se revisará igualmente de aquí a medio año, según detalla un texto que pide a los responsables de la UNSMIL que ayuden al Gobierno libio en la organización de las elecciones y a restaurar la seguridad en todo el país, una de las mayores preocupaciones de ese órgano de la ONU.
El Consejo aplaude en el texto los "avances positivos" logrados hasta el momento en Libia y se muestra expectante ante las elecciones que se deben celebrar en junio, unos comicios que espera que sean "libres, justos y creíbles" para establecer una Asamblea Constituyente que conduzca al asentamiento de la democracia.
La resolución recoge sin embargo las preocupaciones del Consejo en materia de seguridad y exhorta a las autoridades a tomar "todas las medidas necesarias para evitar las violaciones de los derechos humanos", entre las que señala torturas, violaciones sexuales, detenciones arbitrarias y ejecuciones extrajudiciales.
Asimismo, insta a las autoridades a dejar en libertad "de forma inmediata" a los extranjeros que siguen detenidos ilegalmente en el país, y anima a Trípoli y a los vecinos a cooperar para prevenir que antiguos elementos del régimen de Gadafi desestabilicen el país, lo cual beneficiará a la región del Sahel.
Los quince miembros del Consejo anunciaron también su decisión de mantener vigente el embargo de armas y de pedir al comité de sanciones que revise la congelación de los activos de la Dirección General de Inversiones de Libia (LIA) y la Lybian Africa Investment Portfolio (LAIP).
"Libia es un Estado que necesita ayuda para curar las heridas y avanzar así hacia la democracia, el Estado de derecho y la prosperidad", dijo el embajador libio ante la ONU, Ibrahim Dabashi, quien añadió que el papel de la UNSMIL será muy necesario en la próxima etapa del país, cuando se celebren las primeras elecciones democráticas en el país desde los años 60 del siglo pasado.
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, afirmó que la extensión del mandato de UNSMIL refleja el compromiso de la comunidad internacional con Libia y su gobierno de transición, del que destacó los "tremendos progresos" que ha conseguido, y reconoció que "todavía no se ha concluido el trabajo".
Por ello, dijo Clinton, la comunidad internacional seguirá apoyando al gobierno de Trípoli en la protección de sus fronteras, y sus esfuerzos para reintegrar "a quienes se levantaron en armas en nombre del cambio" en el seno de un ejército "profesional" y una sociedad "pacífica".
Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, reiteró nuevamente que la OTAN debe dar cuentas al Consejo de Seguridad sobre su actuación, una organización que se ofreció como voluntaria para imponer una zona de exclusión aérea en Libia "pero que en realidad terminó lanzando ataques aéreos masivos" en Libia.
Moscú ha pedido varias veces en el Consejo de Seguridad que Naciones Unidas investigue la muerte de civiles en Libia a consecuencia de la operación militar llevada a cabo el año pasado por la OTAN en el país norteafricano bajo amparo del organismo internacional.