La ONU acusa a Damasco de someter a los sirios a un "castigo colectivo"
Ginebra, EP
El Gobierno sirio ha sometido a civiles a un "castigo colectivo" y sus fuerzas han cometido ejecuciones y arrestos masivos en el distrito de Baba Amro, el más asediado de la ciudad de Homs, en el centro del país, según ha denunciado este lunes la Comisión de Investigación Internacional e Independiente para Siria de la ONU.
El presidente de la comisión, Paulo Pinheiro, ha pronunciado un discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en el que ha señalado que los que han cometido tales crímenes deben rendir cuentas ante la justicia, si bien no ha identificado a ningún sospechoso.
Un mes de "bombardeos sin descanso" por parte de las fuerzas sirias han dejado muerte y destrucción en Baba Amro, según Pinheiro. "Aquellos que huyeron de la zona informan de ejecuciones sumarias y campañas de arrestos arbitrarios masivos", ha agregado.
El panorama es cada vez más sombrío cada día en zonas como Homs, Idlib, Hama, la region de Damasco y Deraa, ha explicado Pinheiro. "Lo que está claro es que los civiles siguen soportando el grueso de la contienda violenta (...) la fuerza empleada por el Gobierno contra los grupos armados a menudo llevó a un castigo colectivo de los civiles", ha denunciado Pinheiro en su discurso.
Sin embargo, la comisión ya había informado con anterioridad de que ya ha esbozado una lista confidencial de los presuntos responsables de los crímenes contra la Humanidad que han podido documentar hasta el momento, incluidos asesinatos y torturas, con vistas a su posible procesamiento.
Durante la sesión del Consejo de Derechos Humanos, el embajador sirio, Faysal Jabbaz Hamoui, ha criticado el informe de la comisión, a la que ha acusado de estar "politizada". "Ha perdido su sello legal y ético", ha afirmado.
"La crisis no se debe a manifestantes pacíficos o a demandas de reforma. La crisis se debe a la guerra mediática contra Siria y a las sanciones económicas impuestas al pueblo sirio", ha argumentado. Las milicias rebeldes están apoyadas por "Al Qaeda, que ha entrado en el país desde 13 países distintos", ha asegurado.
"Ha estallado la guerra civil (...). Este es el preludio del desmembramiento de Siria. Esta es la voluntad de Israel y de quienes apoyan la empresa de la colonización a largo plazo de los territorios árabes", ha concluido.
Mientras, la embajadora de la UE ante el organismo, la italiana Maria Angela Zappia, se ha ceñido a las duras conclusiones del informe y ha insistido en la necesidad de que no haya impunidad para los responsables de crímenes de lesa humanidad. "Los responsables deben ser juzgados. Lo lógico sería trasladar la situación de Siria al Tribunal Penal Internacional", ha indicado.
Estados Unidos ha apoyado esta postura. "Los brutales asesinatos, la tortura y los bombardeos indiscriminados cometidos por el régimen de Al Assad ocurren día tras día en Siria. Desde hace meses forma parte de la vida cotidiana un infierno auténtico, un desastre humanitario, especialmente en Homs y Hama", ha indicado la diplomática estadounidense Casey L. Addis. "El régimen de Al Assad ha perdido hace mucho su legitimidad para continuar en el poder", ha apostillado.
El Gobierno sirio ha sometido a civiles a un "castigo colectivo" y sus fuerzas han cometido ejecuciones y arrestos masivos en el distrito de Baba Amro, el más asediado de la ciudad de Homs, en el centro del país, según ha denunciado este lunes la Comisión de Investigación Internacional e Independiente para Siria de la ONU.
El presidente de la comisión, Paulo Pinheiro, ha pronunciado un discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en el que ha señalado que los que han cometido tales crímenes deben rendir cuentas ante la justicia, si bien no ha identificado a ningún sospechoso.
Un mes de "bombardeos sin descanso" por parte de las fuerzas sirias han dejado muerte y destrucción en Baba Amro, según Pinheiro. "Aquellos que huyeron de la zona informan de ejecuciones sumarias y campañas de arrestos arbitrarios masivos", ha agregado.
El panorama es cada vez más sombrío cada día en zonas como Homs, Idlib, Hama, la region de Damasco y Deraa, ha explicado Pinheiro. "Lo que está claro es que los civiles siguen soportando el grueso de la contienda violenta (...) la fuerza empleada por el Gobierno contra los grupos armados a menudo llevó a un castigo colectivo de los civiles", ha denunciado Pinheiro en su discurso.
Sin embargo, la comisión ya había informado con anterioridad de que ya ha esbozado una lista confidencial de los presuntos responsables de los crímenes contra la Humanidad que han podido documentar hasta el momento, incluidos asesinatos y torturas, con vistas a su posible procesamiento.
Durante la sesión del Consejo de Derechos Humanos, el embajador sirio, Faysal Jabbaz Hamoui, ha criticado el informe de la comisión, a la que ha acusado de estar "politizada". "Ha perdido su sello legal y ético", ha afirmado.
"La crisis no se debe a manifestantes pacíficos o a demandas de reforma. La crisis se debe a la guerra mediática contra Siria y a las sanciones económicas impuestas al pueblo sirio", ha argumentado. Las milicias rebeldes están apoyadas por "Al Qaeda, que ha entrado en el país desde 13 países distintos", ha asegurado.
"Ha estallado la guerra civil (...). Este es el preludio del desmembramiento de Siria. Esta es la voluntad de Israel y de quienes apoyan la empresa de la colonización a largo plazo de los territorios árabes", ha concluido.
Mientras, la embajadora de la UE ante el organismo, la italiana Maria Angela Zappia, se ha ceñido a las duras conclusiones del informe y ha insistido en la necesidad de que no haya impunidad para los responsables de crímenes de lesa humanidad. "Los responsables deben ser juzgados. Lo lógico sería trasladar la situación de Siria al Tribunal Penal Internacional", ha indicado.
Estados Unidos ha apoyado esta postura. "Los brutales asesinatos, la tortura y los bombardeos indiscriminados cometidos por el régimen de Al Assad ocurren día tras día en Siria. Desde hace meses forma parte de la vida cotidiana un infierno auténtico, un desastre humanitario, especialmente en Homs y Hama", ha indicado la diplomática estadounidense Casey L. Addis. "El régimen de Al Assad ha perdido hace mucho su legitimidad para continuar en el poder", ha apostillado.