Hallan las cabezas de 10 personas en un pueblo al sur México
México, AFP"Se encontraron los restos humanos cercenados de 10 personas, tres mujeres y siete hombres", dijo Arturo Martínez Núñez, vocero del operativo Guerrero Seguro. El agente de guardia del Ministerio Público (Fiscalía) de Teloloapan, municipio donde se registro el hallazgo, dijo de su lado que las cabezas fueron abandonadas a un costado del matadero municipal.
Dos mensajes dirigidos contra el cártel La Familia se encontraron con las cabezas, cuyos cuerpos no han sido localizados, añadió el agente. "Secuestradores de mierda ya no sigan viviendo del pueblo" decía el mensaje dirigido a La Familia, una organización criminal que opera en el vecino estado de Michoacán, según el agente del Ministerio Público.
Teloloapan es un pueblo de unos 21.500 habitantes ubicado en una zona de difícil acceso de la sierra de Guerrero (sur), muy cerca del estado de Michoacán, donde operan los cárteles La Familia y Los Caballeros Templarios, que mantienen una sangrienta disputa entre ellos, así como con otras organizaciones en Guerrero.
La matanza ocurre un día después de que el cártel Los Caballeros Templarios desplegara varios anuncios en el estado de Guanajuato, ubicado en el centro del país y también vecino de Michoacán, en los que presuntamente se deslinda de las "acciones bélicas" que puedan suscitarse durante la visita a México del papa Benedicto XVI, del 23 al 26 de marzo.
Estas organizaciones criminales están identificadas por especialistas como cárteles locales que mantienen cierta independencia para controlar las actividades delictivas en sus territorios.
Pero en el contexto de la guerra del narcotráfico que se libra en el país, están aliados a alguna de las dos grandes organizaciones del crimen organizado.
Estos poderosos cárteles son el de Sinaloa, dirigido por Joaquín 'Chapo' Guzmán, el capo más buscado por México y Estados Unidos, y Los Zetas, una organización formada en la década de 1990 por exmilitares de elite desertores que se unieron al narcotráfico.
Más de 50.000 personas han muerto en México por la lucha entre los cárteles del narcotráfico y la ofensiva militar desplegada por el gobierno desde diciembre de 2006, incluido un número indeterminado de víctimas ajenas a las organizaciones criminales.
