El Movimiento Al Sadr anuncia la liberación de un militar estadounidense
Bagdad, EP
El Movimiento al Sadr, liderado por el clérigo radical chií Muqtada al Sadr, ha anunciado este sábado que ha entregado a la misión de la ONU en Irak a un militar estadounidense que mantenía retenido. Sin embargo, oficialmente Estados Unidos no considera que haya ningún soldado suyo perdido en Irak.
El propio soldado ha explicado en declaraciones emitidas por la televisión iraquí Bagdadiya que estaba retenido en Bagdad desde junio, capturado por milicianos chiíes cuando se encontraba en el país como civil tras una etapa anterior destinado en Irak con el Ejército estadounidense.
"En junio de 2011 fui tomado como rehén por elementos de Yom al Maoud (Brigada del Día Prometido) bajo la dirección de sayed Muqtada al Sadr", ha relatado el hombre en inglés con un marcado acento estadounidense. "Fui llevado a Bagdad y mantenido allí en distintas ubicaciones de la ciudad por Al Maoud. Me han explicado que mi liberación es por motivos humanitarios y que no hay ningún intercambio detrás", ha continuado.
El hombre, Randy Michael o Michaels Hills, ha comparecido junto a dos diputados del Movimiento Al Sadr vestido con un uniforme del Ejército estadounidense sin ningún distintivo a la vista.
La Brigada del Día Prometido es una escisión del Ejército del Mahdi, el brazo armado del Movimiento Al Sadr. Fuentes del partido-milicia han confirmado desde Basora que el militar o exmilitar fue capturado en junio del año pasado.
"Muqtada al Sadr dio orden de liberarle como gesto de buena voluntad y ha afirmado que no tenemos disputa alguna con el pueblo americano", ha señalado un dirigente sadrista en declaraciones bajo condición de anonimato. "Ha ordenado entregarle a la ONU, no a la Embajada estadounidense", ha matizado.
El Pentágono había informado en febrero de que ya no había ningún militar estadounidense desaparecido ni cautivo en Irak tras recuperar los restos del último fallecido. Las tropas estadounidenses abandonaron Irak en diciembre tras nueve años en el país árabe tras el derrocamiento del presidente Sadam Husein.
El Movimiento al Sadr, liderado por el clérigo radical chií Muqtada al Sadr, ha anunciado este sábado que ha entregado a la misión de la ONU en Irak a un militar estadounidense que mantenía retenido. Sin embargo, oficialmente Estados Unidos no considera que haya ningún soldado suyo perdido en Irak.
El propio soldado ha explicado en declaraciones emitidas por la televisión iraquí Bagdadiya que estaba retenido en Bagdad desde junio, capturado por milicianos chiíes cuando se encontraba en el país como civil tras una etapa anterior destinado en Irak con el Ejército estadounidense.
"En junio de 2011 fui tomado como rehén por elementos de Yom al Maoud (Brigada del Día Prometido) bajo la dirección de sayed Muqtada al Sadr", ha relatado el hombre en inglés con un marcado acento estadounidense. "Fui llevado a Bagdad y mantenido allí en distintas ubicaciones de la ciudad por Al Maoud. Me han explicado que mi liberación es por motivos humanitarios y que no hay ningún intercambio detrás", ha continuado.
El hombre, Randy Michael o Michaels Hills, ha comparecido junto a dos diputados del Movimiento Al Sadr vestido con un uniforme del Ejército estadounidense sin ningún distintivo a la vista.
La Brigada del Día Prometido es una escisión del Ejército del Mahdi, el brazo armado del Movimiento Al Sadr. Fuentes del partido-milicia han confirmado desde Basora que el militar o exmilitar fue capturado en junio del año pasado.
"Muqtada al Sadr dio orden de liberarle como gesto de buena voluntad y ha afirmado que no tenemos disputa alguna con el pueblo americano", ha señalado un dirigente sadrista en declaraciones bajo condición de anonimato. "Ha ordenado entregarle a la ONU, no a la Embajada estadounidense", ha matizado.
El Pentágono había informado en febrero de que ya no había ningún militar estadounidense desaparecido ni cautivo en Irak tras recuperar los restos del último fallecido. Las tropas estadounidenses abandonaron Irak en diciembre tras nueve años en el país árabe tras el derrocamiento del presidente Sadam Husein.