Los talibán condenan la "inhumana" quema del Corán por soldados de la ISAF
Madrid, EP
Los talibán han condenado este martes la supuesta quema de ejemplares del Corán por parte de soldados de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán y han denunciado que esta es la tercera vez en lo que va de año que las tropas extranjeras llevan a cabo actos "inhumanos e inmorales" en contra de las creencias de los musulmanes.
En un comunicado, el Emirato Islámico de Afganistán, nombre con el que se autodenominan los talibán, ha denunciado que "los invasores americanos, en conformidad con sus características bárbaras, quemaron una vez más copias del libro sagrado de los musulmanes con el objetivo de profanarlo".
Según los talibán, desde la invasión de Afganistán en el octubre de 2001, esta sería la "décima ocasión" en que los "salvajes americanos" han llevado a cabo actos de este tipo y la "tercera vez" en lo que va de año que cometen "tales acciones inhumanas e inmorales que van en contra de las creencias, costumbres y cultura islámica de los musulmanes afganos".
El grupo islamista se refiere con ello a las controvertidas imágenes de soldados estadounidenses orinando sobre cadáveres de presuntos talibán y a la muerte de "niños inocentes" a los que han acusado de "dejar quemándose en medio de las llamas en sus bombardeos aéreos".
Así las cosas, el Emirato Islámico de Afganistán, además de condenar los hechos, ha reclamado a "todas las organizaciones de Derechos Humanos que impidan que se produzcan este tipo de actos bárbaros por parte de los estadounidenses en el marco de su obligación moral y ética y que persigan a los delincuentes que cometen tales delitos históricos".
Por otra parte, también han tenido palabras de crítica hacia el "régimen títere" del presidente afgano, Hamid Karzai, que "en lugar de respaldar las creencias de su pueblo y condenar o impedir tales acciones las respalda acosando, disparando y dispersando a los manifestantes musulmanes" que protestan por ellas.
MANIFESTACIÓN EN BAGRAM
Más de 2.000 afganos se han manifestado este martes frente a la base aérea militar estadounidense de Bagram en protesta por la supuesta profanación de ejemplares del Corán por parte de las tropas internacionales, según informaron fuentes oficiales afganas citadas por Reuters.
"Hay entre 2.000 y 3.000 manifestantes tirando piedras contra la base y gritando lemas contra los extranjeros", declaró un alto responsable policial de la provincia de Parwan (donde se encuentra Bagram), Rahman Sayedjili.
Según la portavoz del gobierno provincial, Roshna Jalid, varios trabajadores locales han informado de que los ejemplares del Corán habían sido quemados en el interior de la base de Bagram y depositados en los contenedores de basura. "Los trabajadores que suelen recoger la basura en el exterior de la base encontraron los restos de los libros del Corán", explicó.
El comandante de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN, el general John Allen, ha ofrecido sus "sinceras disculpas por las ofensas cometidas al presidente de Afganistán (Hamid Karzai), al Gobierno de la República Islámica de Afganistán y, lo que es más importante, al noble pueblo de Afganistán".
"Cuando tuvimos conocimiento de estas acciones intervinimos inmediatamente para pararlas. El material recuperado será entregado a las autoridades religiosas apropiadas", explicó. "No fue algo intencionado de ninguno de los modos", aseguró Allen, sin dar detalles sobre el incidente.
Los talibán han condenado este martes la supuesta quema de ejemplares del Corán por parte de soldados de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán y han denunciado que esta es la tercera vez en lo que va de año que las tropas extranjeras llevan a cabo actos "inhumanos e inmorales" en contra de las creencias de los musulmanes.
En un comunicado, el Emirato Islámico de Afganistán, nombre con el que se autodenominan los talibán, ha denunciado que "los invasores americanos, en conformidad con sus características bárbaras, quemaron una vez más copias del libro sagrado de los musulmanes con el objetivo de profanarlo".
Según los talibán, desde la invasión de Afganistán en el octubre de 2001, esta sería la "décima ocasión" en que los "salvajes americanos" han llevado a cabo actos de este tipo y la "tercera vez" en lo que va de año que cometen "tales acciones inhumanas e inmorales que van en contra de las creencias, costumbres y cultura islámica de los musulmanes afganos".
El grupo islamista se refiere con ello a las controvertidas imágenes de soldados estadounidenses orinando sobre cadáveres de presuntos talibán y a la muerte de "niños inocentes" a los que han acusado de "dejar quemándose en medio de las llamas en sus bombardeos aéreos".
Así las cosas, el Emirato Islámico de Afganistán, además de condenar los hechos, ha reclamado a "todas las organizaciones de Derechos Humanos que impidan que se produzcan este tipo de actos bárbaros por parte de los estadounidenses en el marco de su obligación moral y ética y que persigan a los delincuentes que cometen tales delitos históricos".
Por otra parte, también han tenido palabras de crítica hacia el "régimen títere" del presidente afgano, Hamid Karzai, que "en lugar de respaldar las creencias de su pueblo y condenar o impedir tales acciones las respalda acosando, disparando y dispersando a los manifestantes musulmanes" que protestan por ellas.
MANIFESTACIÓN EN BAGRAM
Más de 2.000 afganos se han manifestado este martes frente a la base aérea militar estadounidense de Bagram en protesta por la supuesta profanación de ejemplares del Corán por parte de las tropas internacionales, según informaron fuentes oficiales afganas citadas por Reuters.
"Hay entre 2.000 y 3.000 manifestantes tirando piedras contra la base y gritando lemas contra los extranjeros", declaró un alto responsable policial de la provincia de Parwan (donde se encuentra Bagram), Rahman Sayedjili.
Según la portavoz del gobierno provincial, Roshna Jalid, varios trabajadores locales han informado de que los ejemplares del Corán habían sido quemados en el interior de la base de Bagram y depositados en los contenedores de basura. "Los trabajadores que suelen recoger la basura en el exterior de la base encontraron los restos de los libros del Corán", explicó.
El comandante de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN, el general John Allen, ha ofrecido sus "sinceras disculpas por las ofensas cometidas al presidente de Afganistán (Hamid Karzai), al Gobierno de la República Islámica de Afganistán y, lo que es más importante, al noble pueblo de Afganistán".
"Cuando tuvimos conocimiento de estas acciones intervinimos inmediatamente para pararlas. El material recuperado será entregado a las autoridades religiosas apropiadas", explicó. "No fue algo intencionado de ninguno de los modos", aseguró Allen, sin dar detalles sobre el incidente.