Los talibán advierten a EEUU de que sufrirá la misma derrota que los soviéticos
Kabul, EP
Los talibán han advertido a Estados Unidos este miércoles de que sufrirá la misma derrota en Afganistán que las tropas soviéticas, que se retiraron del país asiático hace exactamente 23 años.
"Los americanos egoístas deben aprender una lección (...) de la derrota rusa y abandonar su lucha sin sentido contra los fervientes afganos y retirar a sus fuerzas invasoras lo antes posible", han dicho los talibán afganos en un comunicado enviado a los medios de comunicación.
Las fuerzas de la Unión Soviética se marcharon de Afganistán en 1989, después de ceder el control de la seguridad a un débil gobierno que rápidamente entró en guerra con los muyahidines, muchos de los cuales recibieron inicialmente la ayuda de Estados Unidos y Pakistán.
Ahora, Estados Unidos y la OTAN están entrenando a unos 350.000 policías y militares afganos, que se encargarán de mantener la seguridad en el país centroasiático a partir de 2014, aunque muchos dudan de que este objetivo se pueda cumplir.
"Los americanos ocupantes y sus aliados de la coalición se van a enfrentar al mismo futuro que los invasores rusos afrontaron en el pasado", han asegurado los talibán en el comunicado.
Mir Ahmad Joenda, que fue diputado del Parlamento afgano en la época comunista y ahora trabaja para el Foro de la Sociedad Civil, ha indicado que "cuando las tropas soviéticas se marcharon, fue una retirada militar y económica".
"Una vez que los americanos se hayan ido, todo lo demás se irá con ellos", ha añadido Joenda, que ha alertado de que es posible que "se repita lo que ocurrió en 1989 y después".
PARALELISMO
Los afganos sienten un gran orgullo por haber expulsado a los soviéticos después de una guerra que duró una década. La televisión pública afgana ha mostrado las imágenes de los soldados del Ejército Rojo en lo alto de vehículos blindados cruzando un puente en la antigua frontera septentrional soviética el 15 de febrero de 1989. Estas imágenes simbolizan el fin de una guerra en la que 15.000 militares soviéticos murieron mientras luchaban contra los muyahidines.
Tras la retirada, el gobierno comunista afgano se vino abajo y entonces comenzaron los enfrentamientos entre los señores de la guerra y una guerra civil que allanó el camino para la llegada de los talibán al poder, en 1996.
Washington se ha comprometido a seguir proporcionando a Kabul apoyo militar y ayuda para el desarrollo cuando las fuerzas internacionales se hayan retirado, aunque no destinará a ese fin miles de millones de dólares, como hace ahora.
Los soviéticos continuaron apoyando al gobierno comunista de Mohamad Najibulá después de 1989, pero esa ayuda desapareció con la caída de la Unión Soviética, dos años después. En el conflicto armado posterior, dos tercios de la superficie de Kabul quedó arrasada y murieron unos 50.000 civiles.
La diferencia es que ahora las autoridades afganas y estadounidenses están intentando iniciar unas negociaciones de paz con los talibán para garantizar una cierta estabilidad cuando las tropas de combate extranjeras se marchen.
Los talibán han advertido a Estados Unidos este miércoles de que sufrirá la misma derrota en Afganistán que las tropas soviéticas, que se retiraron del país asiático hace exactamente 23 años.
"Los americanos egoístas deben aprender una lección (...) de la derrota rusa y abandonar su lucha sin sentido contra los fervientes afganos y retirar a sus fuerzas invasoras lo antes posible", han dicho los talibán afganos en un comunicado enviado a los medios de comunicación.
Las fuerzas de la Unión Soviética se marcharon de Afganistán en 1989, después de ceder el control de la seguridad a un débil gobierno que rápidamente entró en guerra con los muyahidines, muchos de los cuales recibieron inicialmente la ayuda de Estados Unidos y Pakistán.
Ahora, Estados Unidos y la OTAN están entrenando a unos 350.000 policías y militares afganos, que se encargarán de mantener la seguridad en el país centroasiático a partir de 2014, aunque muchos dudan de que este objetivo se pueda cumplir.
"Los americanos ocupantes y sus aliados de la coalición se van a enfrentar al mismo futuro que los invasores rusos afrontaron en el pasado", han asegurado los talibán en el comunicado.
Mir Ahmad Joenda, que fue diputado del Parlamento afgano en la época comunista y ahora trabaja para el Foro de la Sociedad Civil, ha indicado que "cuando las tropas soviéticas se marcharon, fue una retirada militar y económica".
"Una vez que los americanos se hayan ido, todo lo demás se irá con ellos", ha añadido Joenda, que ha alertado de que es posible que "se repita lo que ocurrió en 1989 y después".
PARALELISMO
Los afganos sienten un gran orgullo por haber expulsado a los soviéticos después de una guerra que duró una década. La televisión pública afgana ha mostrado las imágenes de los soldados del Ejército Rojo en lo alto de vehículos blindados cruzando un puente en la antigua frontera septentrional soviética el 15 de febrero de 1989. Estas imágenes simbolizan el fin de una guerra en la que 15.000 militares soviéticos murieron mientras luchaban contra los muyahidines.
Tras la retirada, el gobierno comunista afgano se vino abajo y entonces comenzaron los enfrentamientos entre los señores de la guerra y una guerra civil que allanó el camino para la llegada de los talibán al poder, en 1996.
Washington se ha comprometido a seguir proporcionando a Kabul apoyo militar y ayuda para el desarrollo cuando las fuerzas internacionales se hayan retirado, aunque no destinará a ese fin miles de millones de dólares, como hace ahora.
Los soviéticos continuaron apoyando al gobierno comunista de Mohamad Najibulá después de 1989, pero esa ayuda desapareció con la caída de la Unión Soviética, dos años después. En el conflicto armado posterior, dos tercios de la superficie de Kabul quedó arrasada y murieron unos 50.000 civiles.
La diferencia es que ahora las autoridades afganas y estadounidenses están intentando iniciar unas negociaciones de paz con los talibán para garantizar una cierta estabilidad cuando las tropas de combate extranjeras se marchen.