El rostro del desempleo en España
 Ángeles Lucas
                   Ángeles LucasLa última Encuesta de Población Activa ha puesto de relieve el retrato de la persona desempleada en España. Estas cifras tienen rostro, BBC Mundo ha hablado con algunos de los afectados.
"Si antes era difícil, ahora es imposible"
María Luisa García Fajardo cumple con las características más extremas del desempleado español. Es mujer, tiene 37 años, trabajaba en el sector de la construcción manejando una grúa, en una empresa privada, lleva dos años buscando empleo y reside en Andalucía.
María Luisa Fajardo.
"Ahora busco trabajo hasta de extra para  películas, de limpieza, de teleoperadora, de lo que sea, me da igual que  sea un trabajo muy duro", cuenta con angustia. Confiesa que echa a la  semana entre 70 y 80 currículums. "Pero no me llaman ni siquiera para  una entrevista", comenta.
Trabajó  seis años con la grúa, durante la época del boom inmobiliario, y se  compró una vivienda en la que ahora no puede residir. "Me he tenido que  volver a vivir a casa de mis padres para alquilar mi piso y con ese  dinero pagar la hipoteca que le debo al banco", cuenta.                      
"Esto supone pasar de tener una vida casi  solucionada a perder de nuevo toda mi independencia, y sino tuviera a  nadie de alquiler, el banco me quitaría la casa", detalla.
Antes  del boom inmobiliario, María Luisa se graduó como Técnico superior de  Nutrición. "Pero no encontraba empleo, tenía que montar mi propia  clínica privada como nutricionista, y no tenía dinero. Por eso me saqué  el carnet de gruista", explica.                      
Retrato del desempleado en España
                                        ¿Quiénes?
La  mujer registra la cifra más alta de desempleo, con un 23,32%, mientras  que el hombre queda en un 22, 46%. El mayor número de mujeres paradas se  concentra en el tramo de 25 a 54 años, con un 76%. Por otro lado, el  48,5% de los menores de 25 años están desempleados. 
                                        ¿Dónde?
Andalucía  es la región con más desempleo de España, con un 31,23%, seguida por  Canarias con un 30,93%. La mínima la tiene País Vasco, con un 12,61%.                                         
                                        ¿En qué sectores?
La ocupación baja fundamentalmente en la construcción, en el sector servicios y en la Industria                                         
                                        ¿En qué situación?
El  número de hogares con todos sus miembros activos en paro supera por  primera vez los 1,5 millones, y más de la mitad de los parados llevan  más de un año buscando empleo.
Ella se define como una mujer fuerte y valiente,  que es lo que hace falta para trabajar en la construcción, un sector  ocupado principalmente por hombres. "Hubo empresas que no me contrataban  por ser mujer, me llegaron a decir que yo lo que tenía que hacer era  fregar los platos, que no iba a quitarle un puesto a un hombre",  recuerda.
"Si antes era difícil, ahora es  imposible", dice. Porque aún con la dificultad, ella consiguió trabajar  los años de boom inmobiliario. "Demostraba a mis compañeros que hacía  bien mi trabajo, y me gané el respeto de todos ellos", cuenta. Esa  fuerza es la que le hace levantarse cada mañana para salir a buscar su  próximo empleo.
Desayuna y emprende un nuevo día  con los currículums en papel y en la mano, para entregarlos  personalmente. "Para ahorrar en gasolina, si puedo, voy andando a las  empresas, si no, utilizo el transporte público, y como última opción voy  en coche", detalla. 
Otra alternativa es pasar el día frente a la computadora, buscando ofertas por internet.                      
"Miro también todo lo que sale en Madrid, en Barcelona, en Galicia, por toda España, pero todavía no he visto nada", cuenta. En estos dos años sólo ha encontrado un empleo por dos meses y como monitora de nutrición.
"Mi día continúa buscando cursos de formación o  estudiando, para ampliar mi currículum. Ya tengo el título de Auxiliar  de clínica y el carnet para manejar carretillas elevadoras. Pero ni así  encuentro". 
María Luisa se considera de todas  formas una afortunada por haber contado con el cobijo de sus padres.  "Tengo compañeros en situaciones horribles, con toda la familia  desempleada. Dentro de lo que cabe, yo me siento una privilegiada",  concluye. 
"Toda mi familia está desempleada"
José Romero Moreno.
"Mi mujer y mi hijo dependen de un sueldo que ya no tengo", dice José Romero Moreno, andaluz de 52 años. Forma parte de una de las más de 1.500 familias españolas con todos sus miembros desempleados. Llevaba 25 años trabajando en la construcción, pero en marzo hará un año que está desempleado.
"De momento cobro la prestación por desempleo, y  espero encontrar algo antes de que se me acabe, sino, no sé cómo nos  vamos a mantener, será un problema enorme", detalla.
"Además,  para mí, tener 52 años es un problema añadido, las empresas no valoran  la experiencia, te ven como una persona mayor", considera. En este año  ha aprovechado para estudiar el carnet de transportista de mercancías  peligrosas.                      
"Lo hago también por sentirme ocupado, porque en el fondo sé que es difícil, esta situación empieza a tocar la moral, estás desmotivado, pierdes la autoestima, no ves el final del túnel, es todo negro. Pero soy una persona activa y espero encontrar algo", subraya.
"Vi una oferta de maquillador de difuntos"
"Hemos detectado que hay una bolsa de empleo en Canarias para ser maquillador de difuntos, y también hay algunas opciones en la agricultura", cuenta Jesús Saura, canario de 43 años.
Jesús Saura.
Él junto a otros 30 desempleados más de larga  duración han creado un colectivo para buscar salidas juntos. "Llevo seis  meses sin prestación por desempleo y nos mantenemos mi hija, mi nieta y  yo con el sueldo de mi mujer, que es auxiliar de clínica", cuenta  Saura. 
"Nosotros no vivimos, nosotros  sobrevivimos. No podemos con los gastos cotidianos, con la hipoteca, la  letra del coche...", lamenta Saura.                      
No es capaz de calcular la cantidad de currículums que ha presentado por internet y presencialmente. "Pero después de un año buscando trabajo, ya no echo más", dice. "Ahora tengo la esperanza de poder encontrar algo por medio del colectivo, unidos se nos pueden abrir más puertas".

