Romney y Gringinch protagonizaron una ardua campaña por convencer a los “indecisos”
MIAMI, AFP
Para los votantes de origen cubanoamericano Gingrich y Romney compitieron por demostrar quién tendría más ‘mano dura’ para planificar una Cuba sin los hermanos Castro o alejar de América Latina “la amenaza” del presidente venezolano, Hugo Chávez.
Atraer a los mayores de 65 años, que tienen una gran participación electoral, resultaba más complicado si tocaban el sensible tema de reformar el seguro de salud y el sistema de pensiones, del cual dependen más del 60% de los jubilados de varios condados del sur de Florida.
Resultaba más complicado si tocaban el sensible tema de reformar el seguro de salud y el sistema de pensiones.
“Nunca vamos a meternos con el Medicare (seguro público para el adulto mayor y discapacitados) ni con el Seguro Social. Me aseguraré de protegerlos”, dijo Romney el lunes en la tarde en el centro de retirados The Villages, en el centro del estado.
Sus planes de reformar estos sistemas públicos quedaron al margen de los debates televisados y en los eventos masivos, de modo que se escuchó poco y nada del plan de Gingrich que propone que aseguradoras privadas compitan con el Medicare, o del de Romney, a quien le gustaría que los jóvenes ingresen al mercado privado de las aseguradoras.
En cuanto al Seguro Social, Gingrich es partidario de que se dé a la gente la opción de seguir con el sistema público o invertir en fondos de pensiones privados. Romney también propone la opción de los fondos de pensiones privados pero quiere aumentar la edad para calificar a los beneficios y que esos beneficios estén basados en los sueldos.
En su afán por cautivar a los ‘indecisos’ que definen la elección en este gran estado, Romney hizo una jugada ante la comunidad puertorriqueña, segundo bloque hispano en Florida después de los cubanoamericanos, prometiendo que si los boricuas decidían la anexión a Estados Unidos en un referéndum no vinculante este año, él, como eventual Presidente, haría que ese proceso se realizara en Washington.
Tras los comicios en Florida, la campaña por la primaria republicana se retomará el 4 de febrero en los caucus de Nevada y Maine. Mientras que los precandidatos no prevén volverse a ver las caras hasta el próximo 22 de febrero cuando está pautado otro debate.
Romney se perfila como el favorito en la recta final de las primarias en Florida
Todas las miradas están puestas este martes en Florida, donde el precandidato republicano Mitt Romney luce como ganador sobre su rival Newt Gingrich, en una primaria clave para ganar la nominación de su partido y pelear en noviembre por la presidencia con el mandatario Barack Obama.
Los centros de votación estarán abiertos a partir de las 07H00 locales (12H00 GMT), en este estado donde el Partido Republicano cuenta con unos 4 millones de afiliados, 13,1% de ellos de origen latino.
“¡Qué día! Con una participación así empiezo a sentir que mañana ganaremos”, dijo Romney el lunes en un evento de campaña en Dunedin, en la costa de Tampa (centro de Florida) al que asistieron unas 1.500 personas.
“Sé que el expresidente de la Cámara de Representantes no está muy contento; Gingrich no se está sintiendo muy emocionado estos días“, agregó riéndose el candidato la víspera de las primarias en este estado del sureste de Estados Unidos.
Una última encuesta de la Universidad de Suffolk y Wsvn-Miami otorgaba la victoria al moderado Romney con hasta 20 puntos de ventaja sobre el conservador Gingrich (47% contra 27%), quien había llegado a Florida la semana pasada ungido por el triunfo contundente en la elección primaria de Carolina del Sur.
Durante esta semana de debates Gingrich intentó reprochar la riqueza y el pasado de empresario “evasor de impuestos” del candidato mormón, al que también llamó “antiinmigrante”, sin esperarse las enérgicas réplicas de Romney que lograron sumarle más seguidores, según coinciden las encuestas.
El vencedor de este martes contará con 50 de los 1.144 delegados que se requieren para conseguir la candidatura presidencial republicana que se decidirá en una convención del partido en agosto en Tampa.
Hasta ahora el exsenador Rick Santorum -tercero en los sondeos- ganó en el caucus de Iowa, Romney en New Hampshire y Gingrich en Carolina de Sur. El representante de Texas, Ron Paul, se ha mantenido en cuarto puesto.
Santorum y Paul prácticamente no hicieron campaña en Florida.
Los aspirantes republicanos a la Casa Blanca tenían la tarea de conquistar en este estado a dos importantes grupos de electores, los latinos y los jubilados: 22,5% y 17,3% respectivamente de una población de más de 19 millones de habitantes.
Para los votantes de origen cubanoamericano Gingrich y Romney compitieron por demostrar quién tendría más ‘mano dura’ para planificar una Cuba sin los hermanos Castro o alejar de América Latina “la amenaza” del presidente venezolano, Hugo Chávez.
Atraer a los mayores de 65 años, que tienen una gran participación electoral, resultaba más complicado si tocaban el sensible tema de reformar el seguro de salud y el sistema de pensiones, del cual dependen más del 60% de los jubilados de varios condados del sur de Florida.
Resultaba más complicado si tocaban el sensible tema de reformar el seguro de salud y el sistema de pensiones.
“Nunca vamos a meternos con el Medicare (seguro público para el adulto mayor y discapacitados) ni con el Seguro Social. Me aseguraré de protegerlos”, dijo Romney el lunes en la tarde en el centro de retirados The Villages, en el centro del estado.
Sus planes de reformar estos sistemas públicos quedaron al margen de los debates televisados y en los eventos masivos, de modo que se escuchó poco y nada del plan de Gingrich que propone que aseguradoras privadas compitan con el Medicare, o del de Romney, a quien le gustaría que los jóvenes ingresen al mercado privado de las aseguradoras.
En cuanto al Seguro Social, Gingrich es partidario de que se dé a la gente la opción de seguir con el sistema público o invertir en fondos de pensiones privados. Romney también propone la opción de los fondos de pensiones privados pero quiere aumentar la edad para calificar a los beneficios y que esos beneficios estén basados en los sueldos.
En su afán por cautivar a los ‘indecisos’ que definen la elección en este gran estado, Romney hizo una jugada ante la comunidad puertorriqueña, segundo bloque hispano en Florida después de los cubanoamericanos, prometiendo que si los boricuas decidían la anexión a Estados Unidos en un referéndum no vinculante este año, él, como eventual Presidente, haría que ese proceso se realizara en Washington.
Tras los comicios en Florida, la campaña por la primaria republicana se retomará el 4 de febrero en los caucus de Nevada y Maine. Mientras que los precandidatos no prevén volverse a ver las caras hasta el próximo 22 de febrero cuando está pautado otro debate.
Romney se perfila como el favorito en la recta final de las primarias en Florida
Todas las miradas están puestas este martes en Florida, donde el precandidato republicano Mitt Romney luce como ganador sobre su rival Newt Gingrich, en una primaria clave para ganar la nominación de su partido y pelear en noviembre por la presidencia con el mandatario Barack Obama.
Los centros de votación estarán abiertos a partir de las 07H00 locales (12H00 GMT), en este estado donde el Partido Republicano cuenta con unos 4 millones de afiliados, 13,1% de ellos de origen latino.
“¡Qué día! Con una participación así empiezo a sentir que mañana ganaremos”, dijo Romney el lunes en un evento de campaña en Dunedin, en la costa de Tampa (centro de Florida) al que asistieron unas 1.500 personas.
“Sé que el expresidente de la Cámara de Representantes no está muy contento; Gingrich no se está sintiendo muy emocionado estos días“, agregó riéndose el candidato la víspera de las primarias en este estado del sureste de Estados Unidos.
Una última encuesta de la Universidad de Suffolk y Wsvn-Miami otorgaba la victoria al moderado Romney con hasta 20 puntos de ventaja sobre el conservador Gingrich (47% contra 27%), quien había llegado a Florida la semana pasada ungido por el triunfo contundente en la elección primaria de Carolina del Sur.
Durante esta semana de debates Gingrich intentó reprochar la riqueza y el pasado de empresario “evasor de impuestos” del candidato mormón, al que también llamó “antiinmigrante”, sin esperarse las enérgicas réplicas de Romney que lograron sumarle más seguidores, según coinciden las encuestas.
El vencedor de este martes contará con 50 de los 1.144 delegados que se requieren para conseguir la candidatura presidencial republicana que se decidirá en una convención del partido en agosto en Tampa.
Hasta ahora el exsenador Rick Santorum -tercero en los sondeos- ganó en el caucus de Iowa, Romney en New Hampshire y Gingrich en Carolina de Sur. El representante de Texas, Ron Paul, se ha mantenido en cuarto puesto.
Santorum y Paul prácticamente no hicieron campaña en Florida.
Los aspirantes republicanos a la Casa Blanca tenían la tarea de conquistar en este estado a dos importantes grupos de electores, los latinos y los jubilados: 22,5% y 17,3% respectivamente de una población de más de 19 millones de habitantes.