Los Hermanos Musulmanes se perfilan como fuerza dominante en las legislativas
El Cairo, EP
Los Hermanos Musulmanes se preparan para conseguir mayoría absoluta en el Parlamento tras el fin de la tercera fase de las elecciones legislativas, que acaba este miércoles, aunque varios de sus miembros han vuelto a repetir que contarán con todas las fuerzas políticas a la hora de redactar la Constitución.
Se trata de los primeros comicios que se celebran en el país tras la caída del régimen de Hosni Mubarak el pasado 11 de febrero. Unos 40 millones de egipcios están llamados a las urnas en nueve regiones del país -incluidas zonas rurales del sur, donde se concentra la población cristiana, y del Delta del Nilo-, para adjudicar 150 escaños de la Cámara Baja.
El partido que parte como favorito en esta última fase electoral es el Partido Libertad y Justicia (FJP), vinculado a Hermanos Musulmanes. En las dos anteriores fases se alzó con la victoria gracias a un mensaje de moderación y estabilidad que ha calado en la población, después de un año de violentos enfrentamientos en la calle.
Sin embargo, los enfrentamientos entre los demás partidos y contra los Hermanos han ido en aumento en la última semana. Los liberales acusaron a al FJP y a los salafistas de Al Nour de quebrantar las normas a la hora de utilizar mensajes religiosos.
Sin embargo, los peores enfrentamientos se han producido entre los salafistas y el FJP. El partido de los Hermanos Musulmanes anunció que apoyarían al candidato copto en vez de al salafista en la gobernación de Qaliubiya.
Por ello, Al Nour ha convocado manifestaciones frente a las sedes del FJP, en las que se han cantado eslóganes contra el partido y contra Hermanos Musulmanes, según ha informado el diario egipcio 'Al Masry al Youm'.
APOYO SOCIAL DE LOS HERMANOS
La mayor parte de los egipcios han votado a los Hermanos Musulmanes debido a las labores sociales que realizaron en muchos barrios durante la dictadura de Mubarak. En el barrio de Shubra al Jaima, a las afueras de El Cairo, los ciudadanos hacían cola este miércoles para votar.
"Con el anterior régimen, mi papeleta ya estaba marcada", aseguró Sherif, un mecánico de 42 años. "He venido hoy aquí sabiendo que mi voto contará", señaló. Por su parte, el pensionista Fawzi Mohamed indicó que votará por los Hermanos Musulmanes. "Tienen experiencia en política y estoy convencido de que comenzarán aplicando importantes reformas", añadió.
UNA CONSTITUCIÓN CON TODAS LAS FUERZAS
Los parlamentarios que salgan de estas elecciones deberán elegir una asamblea de 100 miembros para redactar la Constitución. Mohamed Mursi, líder del FJP, señaló: "Que el partido alcance la victoria por mayoría en el nuevo Parlamento no significa que vayamos a redactar solos la Constitución sin considerar los derechos de otros egipcios o ignorar las fuerzas políticas que no consiguieron la mayoría".
"Todas las fuerzas políticas y los intelectuales en Egipto, sin importar sus afinidades políticas o religiosas, participarán en la redacción de la Constitución", señaló Mursi, según publicó el martes la página web de los Hermanos Musulmanes.
Las elecciones parlamentarias para la Cámara Baja acabarán el próximo 10 y 11 de enero con la segunda vuelta y el resultado final podría conocerse el 13 de enero. Los comicios para la Cámara Alta se realizarán este enero y en febrero.
En un clima de tensión contra el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, el Gobierno militar que se hizo con el poder tras la caída de Mubarak, cuatro activistas fueron detenidos el martes por colocar carteles en los que se criticaba al Ejército.
La semana pasada, las fuerzas de seguridad inspeccionaron las oficinas de 17 ONG defensoras de los Derechos Humanos y de reformas democráticas por recibir fondos de extranjeros, lo que provocó una condena del Gobierno de Estados Unidos y de asociaciones egipcias.
Los Hermanos Musulmanes se preparan para conseguir mayoría absoluta en el Parlamento tras el fin de la tercera fase de las elecciones legislativas, que acaba este miércoles, aunque varios de sus miembros han vuelto a repetir que contarán con todas las fuerzas políticas a la hora de redactar la Constitución.
Se trata de los primeros comicios que se celebran en el país tras la caída del régimen de Hosni Mubarak el pasado 11 de febrero. Unos 40 millones de egipcios están llamados a las urnas en nueve regiones del país -incluidas zonas rurales del sur, donde se concentra la población cristiana, y del Delta del Nilo-, para adjudicar 150 escaños de la Cámara Baja.
El partido que parte como favorito en esta última fase electoral es el Partido Libertad y Justicia (FJP), vinculado a Hermanos Musulmanes. En las dos anteriores fases se alzó con la victoria gracias a un mensaje de moderación y estabilidad que ha calado en la población, después de un año de violentos enfrentamientos en la calle.
Sin embargo, los enfrentamientos entre los demás partidos y contra los Hermanos han ido en aumento en la última semana. Los liberales acusaron a al FJP y a los salafistas de Al Nour de quebrantar las normas a la hora de utilizar mensajes religiosos.
Sin embargo, los peores enfrentamientos se han producido entre los salafistas y el FJP. El partido de los Hermanos Musulmanes anunció que apoyarían al candidato copto en vez de al salafista en la gobernación de Qaliubiya.
Por ello, Al Nour ha convocado manifestaciones frente a las sedes del FJP, en las que se han cantado eslóganes contra el partido y contra Hermanos Musulmanes, según ha informado el diario egipcio 'Al Masry al Youm'.
APOYO SOCIAL DE LOS HERMANOS
La mayor parte de los egipcios han votado a los Hermanos Musulmanes debido a las labores sociales que realizaron en muchos barrios durante la dictadura de Mubarak. En el barrio de Shubra al Jaima, a las afueras de El Cairo, los ciudadanos hacían cola este miércoles para votar.
"Con el anterior régimen, mi papeleta ya estaba marcada", aseguró Sherif, un mecánico de 42 años. "He venido hoy aquí sabiendo que mi voto contará", señaló. Por su parte, el pensionista Fawzi Mohamed indicó que votará por los Hermanos Musulmanes. "Tienen experiencia en política y estoy convencido de que comenzarán aplicando importantes reformas", añadió.
UNA CONSTITUCIÓN CON TODAS LAS FUERZAS
Los parlamentarios que salgan de estas elecciones deberán elegir una asamblea de 100 miembros para redactar la Constitución. Mohamed Mursi, líder del FJP, señaló: "Que el partido alcance la victoria por mayoría en el nuevo Parlamento no significa que vayamos a redactar solos la Constitución sin considerar los derechos de otros egipcios o ignorar las fuerzas políticas que no consiguieron la mayoría".
"Todas las fuerzas políticas y los intelectuales en Egipto, sin importar sus afinidades políticas o religiosas, participarán en la redacción de la Constitución", señaló Mursi, según publicó el martes la página web de los Hermanos Musulmanes.
Las elecciones parlamentarias para la Cámara Baja acabarán el próximo 10 y 11 de enero con la segunda vuelta y el resultado final podría conocerse el 13 de enero. Los comicios para la Cámara Alta se realizarán este enero y en febrero.
En un clima de tensión contra el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, el Gobierno militar que se hizo con el poder tras la caída de Mubarak, cuatro activistas fueron detenidos el martes por colocar carteles en los que se criticaba al Ejército.
La semana pasada, las fuerzas de seguridad inspeccionaron las oficinas de 17 ONG defensoras de los Derechos Humanos y de reformas democráticas por recibir fondos de extranjeros, lo que provocó una condena del Gobierno de Estados Unidos y de asociaciones egipcias.