Bolivia asegura que futura demanda internacional contra Chile no es una agresión
La Paz, Abi
El vicecanciller, Juan Carlos Alurralde, aseguró el domingo que la demanda marítima internacional, que alista Bolivia para presentar en tribunales internacionales contra Chile, no es una agresión sino un derecho legal y pacifico para concertar una solución, a la centenaria petición boliviana de un acceso soberano al océano Pacifico.
Bolivia perdió su costa marítima en una guerra territorial con Chile en 1879 y desde entonces reclama en diversos foros su retorno soberano al mar.
En una entrevista con el programa el Pueblo Es Noticia, que se difunde por los medios estatales, Alurralde dijo que el Gobierno boliviano considera inexplicable la reacción de Chile sobre la futura demanda internacional, en alusión a las declaraciones del canciller chileno, Alfredo Moreno, que advirtió que Bolivia "va a sufrir las consecuencias" de su decisión de acudir a tribunales internacionales.
Argumentó que la propia Organización de las Naciones Unidas reconoce que esos mecanismos "no deben ser considerados como una agresión", sino como un espacio de resolución de controversias que no son resueltas en un ámbito multilateral e internacional.
"Actuamos dentro de los mecanismos pacíficos de acudir a cualquier corte internacional, que es un espacio de derecho internacional. La demanda no significa una agresión", fundamentó.
En esa línea, calificó como "paradójica" la respuesta de Chile a la demanda internacional al acentuar que tiene "tono armamentista", lo que, a su juicio, no corresponde.
"Respecto a lo que nos dicen, que nos atengamos a las consecuencias yo creo que nos estamos ateniendo a las consecuencias hace más de 130 años, porque la política de Chile es cada vez achicar más los derechos de Bolivia sobre el acceso al Pacifico y eso tiene que tener un alto", contrastó.
Ratificó que Bolivia está abierta al diálogo sin dejar de acudir a procesos legales e instancias internacionales creadas para resolver los conflictos entre países de manera pacífica, como lo explicó en marzo pasado el presidente Evo Morales al tomar la decisión de acudir a tribunales internacionales, sin desechar el diálogo.
"Tenemos una política exterior seria, firme y planificada y en ese sentido estamos abiertos con los oídos y ojos abiertos esperando la propuesta concreta, factible y útil a la cual se han comprometido nuestros gobiernos dentro de una agenda común y compartida", remarcó el Vicecanciller boliviano.
Informó que el Ejecutivo no definió aún en que tribunal internacional instaurará la demanda, al asegurar que continuará recabando información sobre aspectos metodológicos y procedimentales que corresponden.
En marzo, el presidente Evo Morales anunció la decisión de Bolivia de demandar a Chile ante un tribunal internacional para que restituya al país su cualidad marítima, tras sostener con Santiago un diálogo sin resultados sobre este tema, en el marco de una agenda de 13 puntos acordada en 2006.
En la guerra del Pacifico, Bolivia perdió 120.000 km2 y 400 km de costa, extensión territorial que reclama a Chile desde el siglo XIX.
En 1904 ambos países firmaron un tratado que fijó la frontera y en 1978 Bolivia y Chile cortaron relaciones diplomáticas. A la fecha la relación se entabla mediante las vicecancillerías.
El vicecanciller, Juan Carlos Alurralde, aseguró el domingo que la demanda marítima internacional, que alista Bolivia para presentar en tribunales internacionales contra Chile, no es una agresión sino un derecho legal y pacifico para concertar una solución, a la centenaria petición boliviana de un acceso soberano al océano Pacifico.
Bolivia perdió su costa marítima en una guerra territorial con Chile en 1879 y desde entonces reclama en diversos foros su retorno soberano al mar.
En una entrevista con el programa el Pueblo Es Noticia, que se difunde por los medios estatales, Alurralde dijo que el Gobierno boliviano considera inexplicable la reacción de Chile sobre la futura demanda internacional, en alusión a las declaraciones del canciller chileno, Alfredo Moreno, que advirtió que Bolivia "va a sufrir las consecuencias" de su decisión de acudir a tribunales internacionales.
Argumentó que la propia Organización de las Naciones Unidas reconoce que esos mecanismos "no deben ser considerados como una agresión", sino como un espacio de resolución de controversias que no son resueltas en un ámbito multilateral e internacional.
"Actuamos dentro de los mecanismos pacíficos de acudir a cualquier corte internacional, que es un espacio de derecho internacional. La demanda no significa una agresión", fundamentó.
En esa línea, calificó como "paradójica" la respuesta de Chile a la demanda internacional al acentuar que tiene "tono armamentista", lo que, a su juicio, no corresponde.
"Respecto a lo que nos dicen, que nos atengamos a las consecuencias yo creo que nos estamos ateniendo a las consecuencias hace más de 130 años, porque la política de Chile es cada vez achicar más los derechos de Bolivia sobre el acceso al Pacifico y eso tiene que tener un alto", contrastó.
Ratificó que Bolivia está abierta al diálogo sin dejar de acudir a procesos legales e instancias internacionales creadas para resolver los conflictos entre países de manera pacífica, como lo explicó en marzo pasado el presidente Evo Morales al tomar la decisión de acudir a tribunales internacionales, sin desechar el diálogo.
"Tenemos una política exterior seria, firme y planificada y en ese sentido estamos abiertos con los oídos y ojos abiertos esperando la propuesta concreta, factible y útil a la cual se han comprometido nuestros gobiernos dentro de una agenda común y compartida", remarcó el Vicecanciller boliviano.
Informó que el Ejecutivo no definió aún en que tribunal internacional instaurará la demanda, al asegurar que continuará recabando información sobre aspectos metodológicos y procedimentales que corresponden.
En marzo, el presidente Evo Morales anunció la decisión de Bolivia de demandar a Chile ante un tribunal internacional para que restituya al país su cualidad marítima, tras sostener con Santiago un diálogo sin resultados sobre este tema, en el marco de una agenda de 13 puntos acordada en 2006.
En la guerra del Pacifico, Bolivia perdió 120.000 km2 y 400 km de costa, extensión territorial que reclama a Chile desde el siglo XIX.
En 1904 ambos países firmaron un tratado que fijó la frontera y en 1978 Bolivia y Chile cortaron relaciones diplomáticas. A la fecha la relación se entabla mediante las vicecancillerías.