Martelly anuncia un plan para restaurar el Ejército haitiano tras su abolición
Puerto Príncipe, EP
El presidente haitiano, Michel Martelly, ha anunciado este viernes un plan para restaurar el Ejército del país 16 años después de su abolición, durante un mensaje pronunciado precisamente en el marco de las celebraciones del Día de las Fuerzas Armadas.
Haití carece de Ejército desde que lo abolió en 1995 el presidente de entonces, Jean Bertrand Aristide, que puso fin a unas Fuerzas Armadas implicadas en golpes de Estado y acusadas de abusos de los Derechos Humanos.
Martelly ha anunciado que una comisión civil elaborará una 'hoja de ruta' para recuperar el Ejército y presentará sus conclusiones el próximo 1 de enero, Día de la Independencia haitiana. El presidente, elegido en marzo para el puesto, cumple así con una de sus promesas electorales.
El mandatario haitiano defiende que Haití, con 10 millones de habitantes, necesita un ejército para proteger sus fronteras, aunque siempre ha subrayado que se tratará de algo gradual en la medida en que el Gobierno tiene que proveer infraestructura militar y suministros y armas.
Sin embargo, su iniciativa ya ha levantado suspicacias entre los donantes internacionales, que ven en ella una posible fuente de divisiones y una potencial distracción de fondos y esfuerzos, toda vez que el país aún no se ha recuperado de un devastador terremoto que causó el año pasado más de 300.000 víctimas mortales y de una epidemia de cólera.
Los principales donantes occidentales, que ya participan en la financiación de la fuerza de la ONU (MINUSTAH) y de las tareas de reconstrucción, temen ahora que tengan también que sufragar, entrenar y equipar un Ejército de nueva creación.
Haití necesita de otros países para mantener, a través de Naciones Unidas, unas tareas de formación de la renovada Policía Nacional, cuya magnitud ha crecido hasta los 10.000 efectivos y espera encargarse de la seguridad del país cuando la MINUSTAH se repliegue dentro de unos años.
El presidente haitiano, Michel Martelly, ha anunciado este viernes un plan para restaurar el Ejército del país 16 años después de su abolición, durante un mensaje pronunciado precisamente en el marco de las celebraciones del Día de las Fuerzas Armadas.
Haití carece de Ejército desde que lo abolió en 1995 el presidente de entonces, Jean Bertrand Aristide, que puso fin a unas Fuerzas Armadas implicadas en golpes de Estado y acusadas de abusos de los Derechos Humanos.
Martelly ha anunciado que una comisión civil elaborará una 'hoja de ruta' para recuperar el Ejército y presentará sus conclusiones el próximo 1 de enero, Día de la Independencia haitiana. El presidente, elegido en marzo para el puesto, cumple así con una de sus promesas electorales.
El mandatario haitiano defiende que Haití, con 10 millones de habitantes, necesita un ejército para proteger sus fronteras, aunque siempre ha subrayado que se tratará de algo gradual en la medida en que el Gobierno tiene que proveer infraestructura militar y suministros y armas.
Sin embargo, su iniciativa ya ha levantado suspicacias entre los donantes internacionales, que ven en ella una posible fuente de divisiones y una potencial distracción de fondos y esfuerzos, toda vez que el país aún no se ha recuperado de un devastador terremoto que causó el año pasado más de 300.000 víctimas mortales y de una epidemia de cólera.
Los principales donantes occidentales, que ya participan en la financiación de la fuerza de la ONU (MINUSTAH) y de las tareas de reconstrucción, temen ahora que tengan también que sufragar, entrenar y equipar un Ejército de nueva creación.
Haití necesita de otros países para mantener, a través de Naciones Unidas, unas tareas de formación de la renovada Policía Nacional, cuya magnitud ha crecido hasta los 10.000 efectivos y espera encargarse de la seguridad del país cuando la MINUSTAH se repliegue dentro de unos años.