El Ejército egipcio levanta un muro de hormigón para separar a manifestantes y policías
Madrid, EP
El Ejército egipcio ha instalado este mediodía un muro de hormigón para separar a los manifestantes que desde el pasado viernes protestan contra la lentitud con la que según ellos el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que gobierna el país, está llevando a cabo la transición, y la Policía, informa el diario 'Al Ahram' en su edición electrónica.
El muro ha sido instalado en la mitad de la calle Mohamed Mahmud, próxima a la plaza Tahrir, uno de los principales focos de disturbios en los últimos días, y aunque la tensión se mantiene, parece que ha conseguido su objetivo de evitar nuevos altercados entre manifestantes y fuerzas del orden.
Según el diario, decenas de manifestantes se han encaramado a lo alto del muro, vigilado por soldados e inmediatamente varios médicos, con sus batas blancas, procedentes de un hospital de campaña cercano, se han apresurado a pedirles que se bajaran, para rebajar la tensión.
"Los manifestantes siguen estando enfadados", afirma Ahmed Nour, un activista socialista, ya que "las declaraciones emitidas por el Ejército sólo están empeorando las cosas". Según ha explicado al diario, lo que más preocupa ahora a los manifestantes es mantener la sentada en Tahrir y prepararse para la protesta de mañana. "Nuestra demandas están claras y nos iremos hasta que se cumplan", ha agregado.
El Ejército egipcio ha instalado este mediodía un muro de hormigón para separar a los manifestantes que desde el pasado viernes protestan contra la lentitud con la que según ellos el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que gobierna el país, está llevando a cabo la transición, y la Policía, informa el diario 'Al Ahram' en su edición electrónica.
El muro ha sido instalado en la mitad de la calle Mohamed Mahmud, próxima a la plaza Tahrir, uno de los principales focos de disturbios en los últimos días, y aunque la tensión se mantiene, parece que ha conseguido su objetivo de evitar nuevos altercados entre manifestantes y fuerzas del orden.
Según el diario, decenas de manifestantes se han encaramado a lo alto del muro, vigilado por soldados e inmediatamente varios médicos, con sus batas blancas, procedentes de un hospital de campaña cercano, se han apresurado a pedirles que se bajaran, para rebajar la tensión.
"Los manifestantes siguen estando enfadados", afirma Ahmed Nour, un activista socialista, ya que "las declaraciones emitidas por el Ejército sólo están empeorando las cosas". Según ha explicado al diario, lo que más preocupa ahora a los manifestantes es mantener la sentada en Tahrir y prepararse para la protesta de mañana. "Nuestra demandas están claras y nos iremos hasta que se cumplan", ha agregado.