El best seller de Ibrahimovic
El sueco aseguró que sin el fútbol habría terminado como un delincuente
Nadie discute la capacidad técnica de Ibrahimovic, pero el jugador ha sido durante todo su carrera un hombre polémico que no se guarda lo que piensa y siente. Esto, en muchas ocasiones, le ha traído problemas con sus ex entrenadores y compañeros de equipo.
El jugador de ascendencia balcánica asegura en el libro que de no ser por el fútbol habría terminado como un delincuente. "Era un salvaje, un lunático, no podía controlar mi mal humor". Mal humor que muchas veces no controla completamente, como en algunos episodios que describió en su autobiografía.
Uno de estos momentos engorrosos que guarda el libro es la pelea que Ibra tuvo "a muerte" con el defensor estadounidense Oguchi Onyewu durante un entrenamiento en su actual club italiano. "No fue una pelea cualquiera, queríamos destruirnos, si no intervenían algunos compañeros la situación podría haber terminado mal", admitió el delantero que se fracturó una costilla en la disputa.
La reyerta inició cuando Ibra derribó a Onyewu en un entrenamiento. Al finalizar el problema ambos se dieron la mano, pero el estadounidense fue apartado del club al poco tiempo de la discusión.
También admitió que amenazó a Rafael van der Vaart, mientras los dos jugaban en el Ajax, de romperle ambas piernas, y le dio un golpe en la cara al francés Zebina en un entrenamiento con la Juventus.
Ibra, comenta en el libro, tuvo algunos inconvenientes en su infancia. Además de cometer delitos menores como robar bicicletas, sus padres se separaron cuando tenía sólo dos años y tuvo que lidiar con los problemas de drogas y alcohol de su familia.
Sin embargo, no solamente hay problemas entre las páginas redactadas a dos manos con el escritor David Lagercrantz, también hay elogios a técnicos respetados por el sueco como Fabio Capello, quien fue su seleccionador en la Juventus, y José Mourinho, que lo dirigió en el Inter de Milán.
Pero la autobiografía ha llamado la atención, sobre todo, por las sonadas diferencias con el catalán Josep Guardiola.
Ibrahimovic tuvo una pasantía de un año en el Barcelona y, a final del año, fue vendido por 24 millones de euros, la tercera parte que pagó el club español por sus servicios.
El escandinavo le reclamó a su ex entrenador que la posición de Messi dentro del campo le afectaba en su rendimiento, debido a que él tenía que jugar por la banda, algo que nunca hizo en su carrera.
Zlatan habló con Guardiola, pero nada cambió. Después de la conversación con el entrenador, según el sueco, este dejó de hablarle y hasta mirarlo. Por ese y otros motivos dijo en una reunión con su representante, Mino Raniola, y el presidente del club, Sandro Rosell, que si no era cedido al final del año, le daría un golpe a Pep delante de la prensa.
Raniola aconsejó a Rosell que vendiera a Ibra, ya que este era capaz de eso y más.
Pero no terminó ahí, sino que representante y jugador iniciaron una serie de rumores sobre que el Real Madrid, rival histórico del Barcelona, estaba interesado en sus servicios. Por este motivo los "culé" se apresuraron en vender al jugador por mucho menos de los 66 millones de dólares que pagaron un año antes.
Esta autobiografía no sólo vendió en Suecia todos los ejemplares en horas y hay pedidos de hasta 6 mil títulos, algo que, por ejemplo, no logró Harry Potter en ese país, sino que ya se está realizando una segunda edición con la misma cantidad de números.
El jefe de mercadotecnia de la editorial, Martin Ahlström, aseguró que: "nunca antes había visto que tantos libros se vendan en tan poco tiempo. Sabíamos que habría un gran interés, pero la semana pasada explotó por completo".
Ibra podría ganar más de 300 mil euros con las primeras dos ediciones del libro, suma que dividirá con su coautor.
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Italia, AFP
Con frases al director técnico del Barcelona, Josep Guardiola, como "no tienes pelotas" , escrita en su autobiografía Yo soy Zlatan Ibrahimovic, el delantero del AC Milán vendió en pocas horas 100 mil ejemplares de su libro en su natal Suecia.
Con frases al director técnico del Barcelona, Josep Guardiola, como "no tienes pelotas" , escrita en su autobiografía Yo soy Zlatan Ibrahimovic, el delantero del AC Milán vendió en pocas horas 100 mil ejemplares de su libro en su natal Suecia.
El jugador de ascendencia balcánica asegura en el libro que de no ser por el fútbol habría terminado como un delincuente. "Era un salvaje, un lunático, no podía controlar mi mal humor". Mal humor que muchas veces no controla completamente, como en algunos episodios que describió en su autobiografía.
Uno de estos momentos engorrosos que guarda el libro es la pelea que Ibra tuvo "a muerte" con el defensor estadounidense Oguchi Onyewu durante un entrenamiento en su actual club italiano. "No fue una pelea cualquiera, queríamos destruirnos, si no intervenían algunos compañeros la situación podría haber terminado mal", admitió el delantero que se fracturó una costilla en la disputa.
La reyerta inició cuando Ibra derribó a Onyewu en un entrenamiento. Al finalizar el problema ambos se dieron la mano, pero el estadounidense fue apartado del club al poco tiempo de la discusión.
También admitió que amenazó a Rafael van der Vaart, mientras los dos jugaban en el Ajax, de romperle ambas piernas, y le dio un golpe en la cara al francés Zebina en un entrenamiento con la Juventus.
Ibra, comenta en el libro, tuvo algunos inconvenientes en su infancia. Además de cometer delitos menores como robar bicicletas, sus padres se separaron cuando tenía sólo dos años y tuvo que lidiar con los problemas de drogas y alcohol de su familia.
Sin embargo, no solamente hay problemas entre las páginas redactadas a dos manos con el escritor David Lagercrantz, también hay elogios a técnicos respetados por el sueco como Fabio Capello, quien fue su seleccionador en la Juventus, y José Mourinho, que lo dirigió en el Inter de Milán.
Pero la autobiografía ha llamado la atención, sobre todo, por las sonadas diferencias con el catalán Josep Guardiola.
Ibrahimovic tuvo una pasantía de un año en el Barcelona y, a final del año, fue vendido por 24 millones de euros, la tercera parte que pagó el club español por sus servicios.
El escandinavo le reclamó a su ex entrenador que la posición de Messi dentro del campo le afectaba en su rendimiento, debido a que él tenía que jugar por la banda, algo que nunca hizo en su carrera.
Zlatan habló con Guardiola, pero nada cambió. Después de la conversación con el entrenador, según el sueco, este dejó de hablarle y hasta mirarlo. Por ese y otros motivos dijo en una reunión con su representante, Mino Raniola, y el presidente del club, Sandro Rosell, que si no era cedido al final del año, le daría un golpe a Pep delante de la prensa.
Raniola aconsejó a Rosell que vendiera a Ibra, ya que este era capaz de eso y más.
Pero no terminó ahí, sino que representante y jugador iniciaron una serie de rumores sobre que el Real Madrid, rival histórico del Barcelona, estaba interesado en sus servicios. Por este motivo los "culé" se apresuraron en vender al jugador por mucho menos de los 66 millones de dólares que pagaron un año antes.
Esta autobiografía no sólo vendió en Suecia todos los ejemplares en horas y hay pedidos de hasta 6 mil títulos, algo que, por ejemplo, no logró Harry Potter en ese país, sino que ya se está realizando una segunda edición con la misma cantidad de números.
El jefe de mercadotecnia de la editorial, Martin Ahlström, aseguró que: "nunca antes había visto que tantos libros se vendan en tan poco tiempo. Sabíamos que habría un gran interés, pero la semana pasada explotó por completo".
Ibra podría ganar más de 300 mil euros con las primeras dos ediciones del libro, suma que dividirá con su coautor.
