La troika critica los titubeos de Grecia al aplicar recortes
La Comisión Europea, el FMI y el Banco Central Europeo critican al Gobierno de Papandreu antes de concluir su último informe.- El responsable de la delegación del FMI en el país, considera que Atenas debe poner en marcha ajustes mucho más severos
Bruselas, El País
Mientras la canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés Nicolas Sarkozy se reúnen hoy en Berlín para ultimar un plan común para la banca europea, los expertos de la troika (Comisión Europea, FMI y BCE) que examinan los ajustes de Grecia para seguir recibiendo asistencia financiera que debe evitar que el país se declare en bancarrota han criticado la falta de determinación de Atenas para aplicar los recortes, según avanza el periódico Welt am Sonntag. En un artículo que el rotativo alemán publicará hoy, los inspectores critican abiertamente al Gobierno griego, dirigido por Yorgos Papandreu, antes de concluir su último informe que será presentados a finales de mes.
El responsable de la delegación del Fondo Monetario Internacional en Grecia, el danés Poul Mathias Thomsen, considera que Atenas debe poner en marcha ajustes mucho más severos de los ejecutados, en el último de ellos el Ejecutivo griego aprobó un ERE temporal sobre 30.000 funcionarios. "Los griegos creen que basta con aprobar leyes. Pero la implementación tarda tiempo. Y muchas veces faltan estructuras, por ejemplo en la Agencia Tributaria", añade el alemán Matthias Mors, enviado de la Comisión. Se espera que la troika haga público su próximo informe el 24 de octubre.
Por su parte, el representante de Grecia ante el FMI, Panagiotis Roumeliotis, declaró que su país necesitará casi con toda probabilidad una ampliación del segundo plan de rescate -aprobado por los jefes de Estado o de Gobierno de la zona euro el pasado mes de julio en el que acordaron un segundo paquete de ayudas de 109.000 millones de euros- o bien iniciar un proceso de reestructuración de deuda para cubrir las necesidades de financiación, ya que la recesión ha resultado ser "peor de lo esperado". El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, admitió en una entrevista al dominical del Frankfurter Allgemeine que la rebaja en el volumen de la deuda griega decidida el pasado julio "puede ser" insuficiente.
Pero que Grecia no va a cumplir sus compromisos es ya un hecho. A principios de esta semana se conoció que el Gobierno envió al Parlamento un borrador de los Presupuestos en el que admitía que el déficit público de este año iba a llegar al 8,5% -en lugar del 7,6% al que se había comprometido- y que la recesión va a ser mucho más dura de lo previsto. Un dato al que se suma la afirmación del Ministerio de Finanzas de esta semana en la que aclaró que la deuda pública también se va a disparar, y que en 2012 alcanzará el 173% del producto interior bruto (PIB). Muy lejos del 162% que Atenas había pactado con Bruselas. Y aunque flota la duda sobre si los incumplimientos pueden acarrear una sanción que podría empujar al país a la bancarrota, las posiciones de los máximos dirigentes europeos hacen pensar que Atenas aún goza de una margen de confianza.
Bruselas, El País
Mientras la canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés Nicolas Sarkozy se reúnen hoy en Berlín para ultimar un plan común para la banca europea, los expertos de la troika (Comisión Europea, FMI y BCE) que examinan los ajustes de Grecia para seguir recibiendo asistencia financiera que debe evitar que el país se declare en bancarrota han criticado la falta de determinación de Atenas para aplicar los recortes, según avanza el periódico Welt am Sonntag. En un artículo que el rotativo alemán publicará hoy, los inspectores critican abiertamente al Gobierno griego, dirigido por Yorgos Papandreu, antes de concluir su último informe que será presentados a finales de mes.
El responsable de la delegación del Fondo Monetario Internacional en Grecia, el danés Poul Mathias Thomsen, considera que Atenas debe poner en marcha ajustes mucho más severos de los ejecutados, en el último de ellos el Ejecutivo griego aprobó un ERE temporal sobre 30.000 funcionarios. "Los griegos creen que basta con aprobar leyes. Pero la implementación tarda tiempo. Y muchas veces faltan estructuras, por ejemplo en la Agencia Tributaria", añade el alemán Matthias Mors, enviado de la Comisión. Se espera que la troika haga público su próximo informe el 24 de octubre.
Por su parte, el representante de Grecia ante el FMI, Panagiotis Roumeliotis, declaró que su país necesitará casi con toda probabilidad una ampliación del segundo plan de rescate -aprobado por los jefes de Estado o de Gobierno de la zona euro el pasado mes de julio en el que acordaron un segundo paquete de ayudas de 109.000 millones de euros- o bien iniciar un proceso de reestructuración de deuda para cubrir las necesidades de financiación, ya que la recesión ha resultado ser "peor de lo esperado". El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, admitió en una entrevista al dominical del Frankfurter Allgemeine que la rebaja en el volumen de la deuda griega decidida el pasado julio "puede ser" insuficiente.
Pero que Grecia no va a cumplir sus compromisos es ya un hecho. A principios de esta semana se conoció que el Gobierno envió al Parlamento un borrador de los Presupuestos en el que admitía que el déficit público de este año iba a llegar al 8,5% -en lugar del 7,6% al que se había comprometido- y que la recesión va a ser mucho más dura de lo previsto. Un dato al que se suma la afirmación del Ministerio de Finanzas de esta semana en la que aclaró que la deuda pública también se va a disparar, y que en 2012 alcanzará el 173% del producto interior bruto (PIB). Muy lejos del 162% que Atenas había pactado con Bruselas. Y aunque flota la duda sobre si los incumplimientos pueden acarrear una sanción que podría empujar al país a la bancarrota, las posiciones de los máximos dirigentes europeos hacen pensar que Atenas aún goza de una margen de confianza.