Carter critica a EE.UU y a otros países por no reconocer la victoria de Hamás en 2006
Bruselas, EP
El expresidente estadounidense Jimmy Carter ha criticado sin citarlos a los países que como Estados Unidos y la gran mayoría de la UE rechazaron reconocer la victoria electoral de Hamás en 2006 y ha reclamado "garantías de los países poderosos para aceptar sus resultados".
En el marco de un seminario de alto nivel sobre la observación electoral, organizado en el Parlamento Europeo, Carter ha insistido en la importancia de que los resultados de los procesos electorales "sean aceptados por el mundo y de forma pacífica" y ha pedido "garantías de los países poderosos para aceptar sus resultados".
Al evocar las revueltas de la 'Primavera árabe', Carter ha advertido de la posibilidad de que incluso cuando las revoluciones tienen "éxito" quienes han luchado por su libertad sientan "desilusión y un elemento de desesperación" aunque ha insistido en que "la recuperación de la esperanza" viene con la llegada de nuevas elecciones.
Carter, que ha reconocido experiencias difíciles que ha vivido en procesos electorales en Panamá y Perú tras declarar "fraudulentos" los comicios, ha destacado que la observación electoral a lo largo de los años "ha llegado muy lejos", pero ha subrayado la necesidad de garantizar "una coordinación mucho mayor" entre los distintos organismos internacionales y sobre todo "ser más fuertes en nuestras demandas de que los resultados electorales sean honrados".
El Centro Carter espera desplegar observadores electorales a las elecciones que habrá en 2011 en Túnez, República Democrática del Congo y "quizá" en Egipto, si las nuevas autoridades egipcias lo autorizan.
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha subrayado la importancia de apoyar los procesos electorales para avanzar en la democratización y ha recalcado que "la observación electoral es una historia de éxito para la UE" tras recordar que, desde 2000, ha contribuido a supervisar 100 procesos electorales en 54 países con más de 800 observadores de todos los Estados miembros.
Ashton ha recordado que la UE ha contribuido a supervisar los comicios este año en Zambia y también desplegará observadores para los procesos en Túnez, donde parte de la misión de observación se encuentra ya sobre el terreno desde mediados de septiembre para ofrecer "asistencia técnica" a las autoridades tunecinas, así como en Nicaragua y República Democrática del Congo.
Asimismo, ha destacado que los europeos están apoyando ya "la formación y consolidación de las capacidades" de las autoridades egipcias para que ellos mismos puedan supervisar las elecciones previstas el 28 de noviembre tras el rechazo de El Cairo a recibir observadores internacionales, así como para apoyar a la sociedad civil del país "como multiplicador de democracia".
La jefa de la diplomacia europea ha dejado claro que "apoyar la estabilidad, prosperidad y democracia de los países está en nuestro interés también", pero ha subrayado que "igual de importante que las elecciones es qué ocurre después", motivo por el cual ha reclamado la necesidad de consolidar el seguimiento de las recomendaciones que emiten los observadores a las autoridades del país de acogida.
"Las recomendaciones son clave para empujar la reforma electoral y legislativa. El ejemplo obvio es Nigeria, que respondió a nuestras críticas y dio seguimiento", ha precisado. "Igual en México y República Democrática del Congo y, más recientemente, en Mozambique", ha apostillado.
"Las elecciones no son por sí solas suficientes. Son paso vital dentro de los esfuerzos mayores para promover la democracia y Derechos Humanos. Y construir lo que he llamado democracia profunda", ha concluido Ashton, insistiendo en la importancia de "maximizar el impacto de nuestras recomendaciones".
El director de la Oficina para la Democracia y los Derechos Humanos de la OSCE, el embajador Janez Lenarcic, y el ex primer ministro canadiense y responsable del Instituto Democrático Nacional Joe Clark también han participado en el seminario de alto nivel, entre otras muchas personalidades.
El expresidente estadounidense Jimmy Carter ha criticado sin citarlos a los países que como Estados Unidos y la gran mayoría de la UE rechazaron reconocer la victoria electoral de Hamás en 2006 y ha reclamado "garantías de los países poderosos para aceptar sus resultados".
En el marco de un seminario de alto nivel sobre la observación electoral, organizado en el Parlamento Europeo, Carter ha insistido en la importancia de que los resultados de los procesos electorales "sean aceptados por el mundo y de forma pacífica" y ha pedido "garantías de los países poderosos para aceptar sus resultados".
Al evocar las revueltas de la 'Primavera árabe', Carter ha advertido de la posibilidad de que incluso cuando las revoluciones tienen "éxito" quienes han luchado por su libertad sientan "desilusión y un elemento de desesperación" aunque ha insistido en que "la recuperación de la esperanza" viene con la llegada de nuevas elecciones.
Carter, que ha reconocido experiencias difíciles que ha vivido en procesos electorales en Panamá y Perú tras declarar "fraudulentos" los comicios, ha destacado que la observación electoral a lo largo de los años "ha llegado muy lejos", pero ha subrayado la necesidad de garantizar "una coordinación mucho mayor" entre los distintos organismos internacionales y sobre todo "ser más fuertes en nuestras demandas de que los resultados electorales sean honrados".
El Centro Carter espera desplegar observadores electorales a las elecciones que habrá en 2011 en Túnez, República Democrática del Congo y "quizá" en Egipto, si las nuevas autoridades egipcias lo autorizan.
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha subrayado la importancia de apoyar los procesos electorales para avanzar en la democratización y ha recalcado que "la observación electoral es una historia de éxito para la UE" tras recordar que, desde 2000, ha contribuido a supervisar 100 procesos electorales en 54 países con más de 800 observadores de todos los Estados miembros.
Ashton ha recordado que la UE ha contribuido a supervisar los comicios este año en Zambia y también desplegará observadores para los procesos en Túnez, donde parte de la misión de observación se encuentra ya sobre el terreno desde mediados de septiembre para ofrecer "asistencia técnica" a las autoridades tunecinas, así como en Nicaragua y República Democrática del Congo.
Asimismo, ha destacado que los europeos están apoyando ya "la formación y consolidación de las capacidades" de las autoridades egipcias para que ellos mismos puedan supervisar las elecciones previstas el 28 de noviembre tras el rechazo de El Cairo a recibir observadores internacionales, así como para apoyar a la sociedad civil del país "como multiplicador de democracia".
La jefa de la diplomacia europea ha dejado claro que "apoyar la estabilidad, prosperidad y democracia de los países está en nuestro interés también", pero ha subrayado que "igual de importante que las elecciones es qué ocurre después", motivo por el cual ha reclamado la necesidad de consolidar el seguimiento de las recomendaciones que emiten los observadores a las autoridades del país de acogida.
"Las recomendaciones son clave para empujar la reforma electoral y legislativa. El ejemplo obvio es Nigeria, que respondió a nuestras críticas y dio seguimiento", ha precisado. "Igual en México y República Democrática del Congo y, más recientemente, en Mozambique", ha apostillado.
"Las elecciones no son por sí solas suficientes. Son paso vital dentro de los esfuerzos mayores para promover la democracia y Derechos Humanos. Y construir lo que he llamado democracia profunda", ha concluido Ashton, insistiendo en la importancia de "maximizar el impacto de nuestras recomendaciones".
El director de la Oficina para la Democracia y los Derechos Humanos de la OSCE, el embajador Janez Lenarcic, y el ex primer ministro canadiense y responsable del Instituto Democrático Nacional Joe Clark también han participado en el seminario de alto nivel, entre otras muchas personalidades.