La UE y el FMI piden un esfuerzo extra a Portugal de 1.000 millones
Bruselas y el Fondo calculan que el país necesita un recorte adicional para garantizar sus objetivos de déficit en 2012. -El país ya tiene autorización para recibir el segundo tramo de la ayuda
Lisboa, EL País
La Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacionales (FMI) quieren que el Gobierno de Portugal, al que han prestado 78.000 millones de euros a cambio de un duro plan de ajuste, aplique nuevas medidas de austeridad en 2012, para asegurar que a finales de ese año habrá reducido el déficit a un 4,5% del PIB. En un documento divulgado hoy por el Ministerio de Finanzas portugués, la UE, el FMI y el Banco Central Europeo (BCE) explican que es necesario ahorrar cerca del 0,6 % del PIB (unos 1.000 millones de euros) el próximo año para corregir el desvío en las cuentas públicas lusas procedente del ejercicio de 2011.
El desfase previsto para este ejercicio, equivalente al 1,3% del PIB, ya obligó al Gobierno conservador luso a adoptar medidas adicionales tras llegar al poder en junio para cumplir con el tope comprometido previamente por Lisboa ante Bruselas. En concreto, el programa de estabilidad luso recogía un tope de déficit para 2011 del 5,9%, pero ante la certeza de que iban a superarlo en ese otro 1,3% el nuevo Ejecutivo optó por imponer un impuesto extraordinario en la paga de navidad y anticipar el aumento del IVA en la electricidad y en la luz.
Sin embargo, estas iniciativas, la mayoría de carácter extraordinario, ya no tendrán efecto en 2012, cuando el país debe reducir el déficit a un 4,5%. De ahí la petición que han hecho los organismos internacionales, que no detallan las posibles iniciativas. Para analizarlas, una misión de técnicos de la UE y el FMI llegarán este jueves al país y, durante cinco días, las estudiarán con el Ejecutivo portugués, que gobierna en mayoría absoluta. El objetivo es cerrar una decisión antes de que se aprueben los presupuestos generales de 2012 en Consejo de Ministros.
Además, el texto divulgado hoy por el departamento de Finanzas y que se considera como una actualización de las metas que debe cumplir Lisboa para seguir recibiendo asistencia financiera, mantiene los objetivos de déficit ya anunciados para los próximos años: el 5,9% este año, el 4,5% en 2012 y el 3% en 2013. En 2010 fue del 9,1%.
En el otro lado de la moneda de los ajustes, la economía lusa ha vuelto a entrar en recesión por culpa de las medidas de austeridad, que han paralizado la inversión pública y ha reducido la renta disponible de las familias. Según Eurostat, el PIB de Portugal se mantuvo sin variación en el segundo trimestre frente al arranque del año, cuando cayó un 0,6%, cifra que coincide con el dato del cierre de 2010. En tasa interanual, la economía portuguesa cayó un 0,9% entre abril y junio, tres décimas más que en el primer trimestre.
Segundo tramo de la ayuda
Antes de conocerse la nueva petición de ambos organismos internacionales, el FMI había anunciado el desbloqueo del segundo tramo del préstamo de 3.980 millones de euros a Portugal, como parte del paquete de ayuda financiera internacional acordado en mayo. Con este préstamo, el FMI ya ha desembolsado desde mayo 10.430 millones de euros, del total de una línea crediticia de tres años por valor de 27.700 millones de euros para Portugal para respaldar el programa de ajuste y crecimiento en ese país.
En los mercados, la decisión se ha recibido con un leve descenso en la prima de riesgo lusa, el mejor indicador para analizar la evolución de la confianza en las finanzas de un determinado país. La misión del Fondo aprobó a mediados de agosto los resultados de los tres primeros meses del préstamo a Portugal, con lo que daba el visto bueno a la liberación del segundo tramo del préstamo concretado hoy por el Consejo Ejecutivo. En una nota de prensa firmada por Nemat Shafik, subdirectora gerente del FMI, se destacó el "fuerte compromiso" del Gobierno luso con el programa de ajuste económico e indicó que habían progresado en la aplicación de las políticas.
Shafik señaló que, pese a que "el contexto externo, con presiones de mercado sobre algunos países de la zona euro y la ralentización de la demanda de las exportaciones, sigue siendo complejo, las recientes acciones del Consejo Europeo para fortalecer la crisis del euro han aumentado las posibilidades de éxito". Como recomendación para conseguir "una sostenibilidad fiscal a medio plazo", el Fondo apuntó hacia "la necesidad de avanzar las reformas estructurales y una racionalización del funcionamiento racional del sector público".
La subdirectora del FMI valoró también el progreso de los bancos portugueses "en la mejora de las posiciones de capital a través de soluciones de mercado y el reciente aumento del volumen de capital y liquidez como elementos claves para reducir el endeudamiento y restaurar la confianza".
Lisboa, EL País
La Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacionales (FMI) quieren que el Gobierno de Portugal, al que han prestado 78.000 millones de euros a cambio de un duro plan de ajuste, aplique nuevas medidas de austeridad en 2012, para asegurar que a finales de ese año habrá reducido el déficit a un 4,5% del PIB. En un documento divulgado hoy por el Ministerio de Finanzas portugués, la UE, el FMI y el Banco Central Europeo (BCE) explican que es necesario ahorrar cerca del 0,6 % del PIB (unos 1.000 millones de euros) el próximo año para corregir el desvío en las cuentas públicas lusas procedente del ejercicio de 2011.
El desfase previsto para este ejercicio, equivalente al 1,3% del PIB, ya obligó al Gobierno conservador luso a adoptar medidas adicionales tras llegar al poder en junio para cumplir con el tope comprometido previamente por Lisboa ante Bruselas. En concreto, el programa de estabilidad luso recogía un tope de déficit para 2011 del 5,9%, pero ante la certeza de que iban a superarlo en ese otro 1,3% el nuevo Ejecutivo optó por imponer un impuesto extraordinario en la paga de navidad y anticipar el aumento del IVA en la electricidad y en la luz.
Sin embargo, estas iniciativas, la mayoría de carácter extraordinario, ya no tendrán efecto en 2012, cuando el país debe reducir el déficit a un 4,5%. De ahí la petición que han hecho los organismos internacionales, que no detallan las posibles iniciativas. Para analizarlas, una misión de técnicos de la UE y el FMI llegarán este jueves al país y, durante cinco días, las estudiarán con el Ejecutivo portugués, que gobierna en mayoría absoluta. El objetivo es cerrar una decisión antes de que se aprueben los presupuestos generales de 2012 en Consejo de Ministros.
Además, el texto divulgado hoy por el departamento de Finanzas y que se considera como una actualización de las metas que debe cumplir Lisboa para seguir recibiendo asistencia financiera, mantiene los objetivos de déficit ya anunciados para los próximos años: el 5,9% este año, el 4,5% en 2012 y el 3% en 2013. En 2010 fue del 9,1%.
En el otro lado de la moneda de los ajustes, la economía lusa ha vuelto a entrar en recesión por culpa de las medidas de austeridad, que han paralizado la inversión pública y ha reducido la renta disponible de las familias. Según Eurostat, el PIB de Portugal se mantuvo sin variación en el segundo trimestre frente al arranque del año, cuando cayó un 0,6%, cifra que coincide con el dato del cierre de 2010. En tasa interanual, la economía portuguesa cayó un 0,9% entre abril y junio, tres décimas más que en el primer trimestre.
Segundo tramo de la ayuda
Antes de conocerse la nueva petición de ambos organismos internacionales, el FMI había anunciado el desbloqueo del segundo tramo del préstamo de 3.980 millones de euros a Portugal, como parte del paquete de ayuda financiera internacional acordado en mayo. Con este préstamo, el FMI ya ha desembolsado desde mayo 10.430 millones de euros, del total de una línea crediticia de tres años por valor de 27.700 millones de euros para Portugal para respaldar el programa de ajuste y crecimiento en ese país.
En los mercados, la decisión se ha recibido con un leve descenso en la prima de riesgo lusa, el mejor indicador para analizar la evolución de la confianza en las finanzas de un determinado país. La misión del Fondo aprobó a mediados de agosto los resultados de los tres primeros meses del préstamo a Portugal, con lo que daba el visto bueno a la liberación del segundo tramo del préstamo concretado hoy por el Consejo Ejecutivo. En una nota de prensa firmada por Nemat Shafik, subdirectora gerente del FMI, se destacó el "fuerte compromiso" del Gobierno luso con el programa de ajuste económico e indicó que habían progresado en la aplicación de las políticas.
Shafik señaló que, pese a que "el contexto externo, con presiones de mercado sobre algunos países de la zona euro y la ralentización de la demanda de las exportaciones, sigue siendo complejo, las recientes acciones del Consejo Europeo para fortalecer la crisis del euro han aumentado las posibilidades de éxito". Como recomendación para conseguir "una sostenibilidad fiscal a medio plazo", el Fondo apuntó hacia "la necesidad de avanzar las reformas estructurales y una racionalización del funcionamiento racional del sector público".
La subdirectora del FMI valoró también el progreso de los bancos portugueses "en la mejora de las posiciones de capital a través de soluciones de mercado y el reciente aumento del volumen de capital y liquidez como elementos claves para reducir el endeudamiento y restaurar la confianza".