El nivel de radiación en el mar tras Fukushima triplican al estimado por Tepco
Tokio, EP
Los niveles de radiación registrados en el mar a causa del accidente de la central nuclear de Fukushima 1 (este de Japón) son más de tres veces superiores a los estimados por la empresa operadora de la planta, la Tokyo Electric Power Co, según han determinado las investigaciones de la Agencia de la Energía Atómica japonesa.
La compañía ha estimado que entre el 21 de marzo y el 30 de abril fueron liberados alrededor de 4.720 billones de becquereles de cesio-137 y yodo-131 a las aguas del océano Pacífico. No obstante, los investigadores de la Agencia de la Energía Atómica japonesa han elevado la cifra a 15.000 billones de becquereles, o terabecquereles.
Las normas del Gobierno prohíben la comercialización de productos alimenticios que contengan 500 becquereles por kilo de material radiactivo.
Takuya Kobayashi, un investigador de la agencia, declaró este viernes que la diferencia en las cifras podría deberse a que su equipo ha medido el material radiactivo que cayó en el océano a través del aire, además del material procedente del agua contaminada que se filtró de la planta.
En este sentido, el investigador cree que Tepco excluyó en sus medidas la radiación procedente del aire. El informe de la agencia no incluye el cesio-134 por carecer de los recursos necesarios para medirlo, lo cual implica que las cantidades de radiactividad pueden ser aún mayores de lo calculado.
El terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo arrasó los sistemas de refrigeración del reactor de la planta nuclear de Fukushima 1, a 240 kilómetros al norte de Tokio, provocando con ello la fusión del núcleo y pérdidas de radiación.
Los niveles de radiación registrados en el mar a causa del accidente de la central nuclear de Fukushima 1 (este de Japón) son más de tres veces superiores a los estimados por la empresa operadora de la planta, la Tokyo Electric Power Co, según han determinado las investigaciones de la Agencia de la Energía Atómica japonesa.
La compañía ha estimado que entre el 21 de marzo y el 30 de abril fueron liberados alrededor de 4.720 billones de becquereles de cesio-137 y yodo-131 a las aguas del océano Pacífico. No obstante, los investigadores de la Agencia de la Energía Atómica japonesa han elevado la cifra a 15.000 billones de becquereles, o terabecquereles.
Las normas del Gobierno prohíben la comercialización de productos alimenticios que contengan 500 becquereles por kilo de material radiactivo.
Takuya Kobayashi, un investigador de la agencia, declaró este viernes que la diferencia en las cifras podría deberse a que su equipo ha medido el material radiactivo que cayó en el océano a través del aire, además del material procedente del agua contaminada que se filtró de la planta.
En este sentido, el investigador cree que Tepco excluyó en sus medidas la radiación procedente del aire. El informe de la agencia no incluye el cesio-134 por carecer de los recursos necesarios para medirlo, lo cual implica que las cantidades de radiactividad pueden ser aún mayores de lo calculado.
El terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo arrasó los sistemas de refrigeración del reactor de la planta nuclear de Fukushima 1, a 240 kilómetros al norte de Tokio, provocando con ello la fusión del núcleo y pérdidas de radiación.