Régimen sirio envía naves de guerra contra Latakia, 26 muertos
Damasco, AFP
Naves de guerra participaron el domingo por primera vez en la represión del movimiento de protesta contra el régimen en Siria, en la ciudad costera de Latakia, causando al menos 26 muertos, anunciaron activistas pro derechos humanos.
"Al menos 26 mártires han caído en Latakia en el bombardeo de barcos de guerra contra civiles desarmados, y en las operaciones de los servicios de seguridad y del ejército", indicó Ammar Qurabi, jefe de la Organización Nacional de Derechos Humanos, que publicó una lista nominativa de las víctimas.
Rami Abdel Rahman, jefe de otra ONG, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), confirmó el bombardeo de los barrios de al Raml y Qniniss desde el mar.
El OSDH añadió que en la ofensiva contra esos barrios, escenario en los últimos días de manifestaciones masivas que reclaman la caída del régimen, participaron barcos de guerra equipados con ametralladoras pesadas y tanques.
Entre las víctimas de Latakia, el OSDH dio parte de sirios y también de palestinos. Uno de los barrios atacados alberga un campo de refugiados palestinos.
La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) manifestó el domingo su "profunda preocupación" ante esas informaciones, y confirmó que hubo un número indeterminado de "muertos y heridos". Además exigió un "acceso sin restricciones" a los campos palestinos.
El sábado, unos veinte tanques se reagruparon en al Raml y los habitantes, temiendo la ofensiva, huyeron en masa, según las ONG. Muchos vecinos huyeron también de Qniniss, indicó el OSDH, con sede en Gran Bretaña, que da sus informaciones a partir de testimonios de militantes sobre el terreno.
En otros incidentes, cuatro personas murieron por disparos de las fuerzas de seguridad cuando éstas intervinieron en las ciudades de Homs (centro), Hama (norte) e Idleb (noroeste), precisaron los activistas pro derechos humanos.
Reiterando la versión dada por el poder desde que comenzó el movimiento contra el régimen el 15 de marzo, la agencia oficial SANA dijo que las fuerzas intervinieron en Latakia "por pedido de los habitantes, para expulsar a los grupos armados", e hizo un balance de dos policías muertos y 41 heridos. La agencia desmintió además que se hubiera producido una operación marítima.
Por otra parte, el ejército y las fuerzas de seguridad sirias ingresaron en la noche del sábado en dos suburbios de Damasco y arrestaron a muchas personas, dijo el OSDH.
Las comunicaciones telefónicas y por internet de la capital como de Latakia sufren continuos cortes, añadió el OSDH.
En un comunicado publicado el domingo, seis ONG de defensa de los derechos humanos exigieron la liberación "inmediata" de Abdel Karim Rihaui, presidente de la Liga Siria de Derechos Humanos, detenido el jueves, que se ha convertido en una importante fuente de información para la prensa extranjera y cuyos movimientos en todo el país están limitados.
En el ámbito diplomático, el presidente estadounidense, Barack Obama, volvió a manifestar el sábado su preocupación por la situación en Siria durante una conversación telefónica con dos de sus aliados: el rey Abdalá de Arabia Saudí y el primer ministro británico, David Cameron.
Los tres dirigentes exigieron el fin "inmediato" de la violencia.
El Consejo de Seguridad de la ONU, por su lado, tiene prevista una reunión especial el próximo jueves para tratar la situación de los derechos humanos y la urgencia humanitaria en Siria.
Desde que comenzó el movimiento de protesta el 15 de marzo, murieron casi 1.800 civiles y más de 400 miembros de las fuerzas del orden, según un registro del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Naves de guerra participaron el domingo por primera vez en la represión del movimiento de protesta contra el régimen en Siria, en la ciudad costera de Latakia, causando al menos 26 muertos, anunciaron activistas pro derechos humanos.
"Al menos 26 mártires han caído en Latakia en el bombardeo de barcos de guerra contra civiles desarmados, y en las operaciones de los servicios de seguridad y del ejército", indicó Ammar Qurabi, jefe de la Organización Nacional de Derechos Humanos, que publicó una lista nominativa de las víctimas.
Rami Abdel Rahman, jefe de otra ONG, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), confirmó el bombardeo de los barrios de al Raml y Qniniss desde el mar.
El OSDH añadió que en la ofensiva contra esos barrios, escenario en los últimos días de manifestaciones masivas que reclaman la caída del régimen, participaron barcos de guerra equipados con ametralladoras pesadas y tanques.
Entre las víctimas de Latakia, el OSDH dio parte de sirios y también de palestinos. Uno de los barrios atacados alberga un campo de refugiados palestinos.
La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) manifestó el domingo su "profunda preocupación" ante esas informaciones, y confirmó que hubo un número indeterminado de "muertos y heridos". Además exigió un "acceso sin restricciones" a los campos palestinos.
El sábado, unos veinte tanques se reagruparon en al Raml y los habitantes, temiendo la ofensiva, huyeron en masa, según las ONG. Muchos vecinos huyeron también de Qniniss, indicó el OSDH, con sede en Gran Bretaña, que da sus informaciones a partir de testimonios de militantes sobre el terreno.
En otros incidentes, cuatro personas murieron por disparos de las fuerzas de seguridad cuando éstas intervinieron en las ciudades de Homs (centro), Hama (norte) e Idleb (noroeste), precisaron los activistas pro derechos humanos.
Reiterando la versión dada por el poder desde que comenzó el movimiento contra el régimen el 15 de marzo, la agencia oficial SANA dijo que las fuerzas intervinieron en Latakia "por pedido de los habitantes, para expulsar a los grupos armados", e hizo un balance de dos policías muertos y 41 heridos. La agencia desmintió además que se hubiera producido una operación marítima.
Por otra parte, el ejército y las fuerzas de seguridad sirias ingresaron en la noche del sábado en dos suburbios de Damasco y arrestaron a muchas personas, dijo el OSDH.
Las comunicaciones telefónicas y por internet de la capital como de Latakia sufren continuos cortes, añadió el OSDH.
En un comunicado publicado el domingo, seis ONG de defensa de los derechos humanos exigieron la liberación "inmediata" de Abdel Karim Rihaui, presidente de la Liga Siria de Derechos Humanos, detenido el jueves, que se ha convertido en una importante fuente de información para la prensa extranjera y cuyos movimientos en todo el país están limitados.
En el ámbito diplomático, el presidente estadounidense, Barack Obama, volvió a manifestar el sábado su preocupación por la situación en Siria durante una conversación telefónica con dos de sus aliados: el rey Abdalá de Arabia Saudí y el primer ministro británico, David Cameron.
Los tres dirigentes exigieron el fin "inmediato" de la violencia.
El Consejo de Seguridad de la ONU, por su lado, tiene prevista una reunión especial el próximo jueves para tratar la situación de los derechos humanos y la urgencia humanitaria en Siria.
Desde que comenzó el movimiento de protesta el 15 de marzo, murieron casi 1.800 civiles y más de 400 miembros de las fuerzas del orden, según un registro del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.