Las fuerzas de Gadafi combatirán a los rebeldes aunque la OTAN cese sus ataques
Trípoli, Agencias
Saif al Islam, hijo mayor del líder libio, Muamar Gadafi, ha asegurado que las fuerzas del régimen continuarán combatiendo contra los rebeldes aunque la OTAN ponga fin a los bombardeos y ataques aéreos sobre sus objetivos.
"Nadie debería pensar que, después de todos los sacrificios que hemos hecho y del martirio de nuestro hijos, hermanos y amigos, dejaremos de luchar. Olvídenlo", ha afirmado Al Islam en un discurso ante familias desplazadas de la ciudad de Benghazi pronunciado el domingo y emitido por la televisión estatal el lunes por la noche.
"Independientemente de si la OTAN abandona o no, la lucha continuará hasta que toda Libia sea liberada", ha subrayado el hijo del mandatario libio, que no había comparecido en público desde hace varias semanas.
El régimen libio ha asegurado en varias ocasiones que sólo está dispuesto a entablar negociaciones para poner fin al conflicto si antes la misión de la OTAN detiene sus ataques contra objetivos gubernamentales. Las autoridades libias trasladaron este mismo mensaje al enviado especial de Naciones Unidas al país norteafricano, Abdel Elah al Jatib, en la reunión mantenida la semana pasada en Trípoli.
Al Jatib también se entrevistó con representantes del Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano administrativo de los sublevados, en Benghazi, y constató que las posiciones de los dos bandos están muy distanciadas.
Los rebeldes controlan la mayor parte de la zona oriental del país y han lanzado una ofensiva para ganar posiciones en la región de las Montañas Occidentales, el oeste, cerca de la frontera con Túnez.
Desde Misrata, la tercera ciudad más importante del país y situada a unos 210 kilómetros al este de Trípoli, los sublevados tienen el objetivo de continuar avanzando hacia el oeste para alcanzar la capital libia.
"El ayuno sólo ha aumentado nuestra determinación y resolución para derrotar a las brigadas del tirano (Gadafi) y liberar por completo Zlitan, Dios mediante, y avanzar hacia nuestra capital, Trípoli", ha explicado un comandante rebelde en el campo de batalla, Husam Husein.
Husein y sus hombres se preparaban a última hora del lunes para poner fin al ayuno del primer día del Ramadán tras haber conseguido consolidar las posiciones logradas en los días previos en la zona oriental de las afueras de Zlitan.
Saif al Islam, hijo mayor del líder libio, Muamar Gadafi, ha asegurado que las fuerzas del régimen continuarán combatiendo contra los rebeldes aunque la OTAN ponga fin a los bombardeos y ataques aéreos sobre sus objetivos.
"Nadie debería pensar que, después de todos los sacrificios que hemos hecho y del martirio de nuestro hijos, hermanos y amigos, dejaremos de luchar. Olvídenlo", ha afirmado Al Islam en un discurso ante familias desplazadas de la ciudad de Benghazi pronunciado el domingo y emitido por la televisión estatal el lunes por la noche.
"Independientemente de si la OTAN abandona o no, la lucha continuará hasta que toda Libia sea liberada", ha subrayado el hijo del mandatario libio, que no había comparecido en público desde hace varias semanas.
El régimen libio ha asegurado en varias ocasiones que sólo está dispuesto a entablar negociaciones para poner fin al conflicto si antes la misión de la OTAN detiene sus ataques contra objetivos gubernamentales. Las autoridades libias trasladaron este mismo mensaje al enviado especial de Naciones Unidas al país norteafricano, Abdel Elah al Jatib, en la reunión mantenida la semana pasada en Trípoli.
Al Jatib también se entrevistó con representantes del Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano administrativo de los sublevados, en Benghazi, y constató que las posiciones de los dos bandos están muy distanciadas.
Los rebeldes controlan la mayor parte de la zona oriental del país y han lanzado una ofensiva para ganar posiciones en la región de las Montañas Occidentales, el oeste, cerca de la frontera con Túnez.
Desde Misrata, la tercera ciudad más importante del país y situada a unos 210 kilómetros al este de Trípoli, los sublevados tienen el objetivo de continuar avanzando hacia el oeste para alcanzar la capital libia.
"El ayuno sólo ha aumentado nuestra determinación y resolución para derrotar a las brigadas del tirano (Gadafi) y liberar por completo Zlitan, Dios mediante, y avanzar hacia nuestra capital, Trípoli", ha explicado un comandante rebelde en el campo de batalla, Husam Husein.
Husein y sus hombres se preparaban a última hora del lunes para poner fin al ayuno del primer día del Ramadán tras haber conseguido consolidar las posiciones logradas en los días previos en la zona oriental de las afueras de Zlitan.