La huella de 'Irene' en EEUU: 21 muertos y miles de millones en daños
EEUU, Agencias
'Irene' se aleja de Estados Unidos al tiempo que el país empieza a recuperar la normalidad. A su paso, el huracán que se ha convertido en tormenta tropical se ha cobrado la vida de al menos 21 personas y ha dejado daños materiales cuyo valor exacto tardará varios días en conocerse, aunque las primeras estimaciones apuntan a un mínimo de 7.000 millones de dólares.
'Irene' continúa ahora su camino hacia Canadá y los pronósticos indican que seguirá perdiendo fuerza hasta convertirse, en pocas horas, en un sistema post-tropical. Por el momento, ha dejado sin electricidad a unos 248.000 hogares en la provincia de Quebec, ubicada en el este de Canadá, aunque sólo dos provincias costeras permanecen en alerta.
La ciudad más afectada es Montreal, donde la Policía ha tenido que cortar los accesos al centro durante varias horas para evitar que las ventanas arrancadas de un edificio de viviendas por el viento hirieran a alguien. Además, el temporal ha derribado árboles y señales de tráfico.
El ministro de Medio Ambiente, René Héroux, ha anunciado que lo peor se espera para las próximas horas, por lo que ha recomendado a los canadienses que consigan provisiones para sobrevivir durante al menos tres días.
Continúa la alerta en EEUU
A pesar de haber dejado atrás EEUU, las autoridades han llamado a mantener la cautela porque sigue siendo "una tormenta peligrosa", según aseguraba en la noche del domingo el presidente estadounidense Barack Obama. El riesgo ahora reside en las crecidas de los ríos, que podrían provocar graves inundaciones.
Los trabajos de los equipos de asistencia aún se prolongarán semanas, agregó Obama, quien adelantó su regreso de las vacaciones estivales el viernes ante la alarma de la tormenta. Especialmente para hacer frente a las inundaciones, el principal riesgo expresado en las intervenciones públicas de las autoridades, quienes en su último recuento oficial situaron en 21 la cifra provisional de fallecidos en siete estados de la costa Este.
Las víctimas mortales corresponden a los estados de Connecticut, Carolina del Norte -donde 'Irene' tocó tierra el sábado-, Florida, Maryland, Nueva Jersey, Pensilvania, Nueva York y Virginia.
Mientras tanto, el país trata de superar el desastre provocado por 'Irene'. En Vermont, al norte, el portavoz del servicio de emergencias, Mark Bosma, calificó la situación en la noche del domingo de "horrible" e indicó que varias pequeñas localidades del estado "estaban totalmente cubiertas por agua", y afirmó que al menos una persona se encontraba desaparecida.
El gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, indicó que aunque el daño en las costas de su estado parece menor de lo esperado, en el interior las inundaciones debido a las crecidas de los ríos podrían alcanzar "registros históricos".
'Irene', que ha recorrido más de 1.700 kilómetros, ha dejado a su paso por la costa Este de EEUU a 4,5 millones de personas sin electricidad, y las compañías eléctricas ya han advertido que podrían pasar hasta dos semanas hasta que todos los usuarios hayan recuperado el servicio.
Vuelve la normalidad en Nueva York
Nueva York salía de su letargo a primera hora de la tarde, después de que la mañana dejara una estampa de calles casi vacías y servicios inactivos.
Casi un millón de personas se han quedado sin luz en la ciudad, aunque los daños han sido menores de los esperados. Tras un primer balance, los edificios se ven intactos y la mayoría de vehículos siguen aparcados en su sitio. Tampoco se han visto afectadas en principio las obras del World Trade Center, donde tendrá lugar la ceremonia de aniversario del 11-S.
La bolsa ha decidido reabrir este lunes y también entonces reanudarán sus operaciones los cinco aeropuertos que operan en la zona de Nueva York, que permanecen cerrados desde la noche del sábado, de acuerdo con la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey.
Los aeropuertos John F. Kennedy y Newark abrirán a las 10.00 GMT (12.00 hora española) para los aterrizajes y reanudarán los despegues a partir de las 16.OO GMT (18.00 hora española), mientras que el aeropuerto de La Guardia reiniciará todas sus operaciones a partir de las 11.00 GMT (13.00 hora española).
Las autoridades instaron a los pasajeros que proyecten viajar el lunes a que consulten directamente con las aerolíneas antes de acudir a los aeropuertos para confirmar los horarios de los vuelos y averiguar si han sufrido retrasos o cancelaciones.
Respecto a los otros dos aeropuertos regionales de la zona, la autoridad portuaria anunció que el de Stewart reanudará sus operaciones el lunes mientras que el de Teterboro ha sufrido inundaciones de diversa consideración por lo que continuará cerrado hasta que esos problemas queden totalmente resueltos.
También retomarán su funcionamiento a las 08.00 GMT los trenes PATH, que conectan la ciudad de Nueva York con el estado de Nueva Jersey a través del río Hudson.
No tendrán la misma suerte las personas que dependan de la red de trenes de cercanías, ya que las tres líneas del Metro North siguen cerradas mientras se reparan los daños por la caída de árboles y la crecida del río Bronx; el Long Island Rail Road restaurará el servicio sólo en seis de sus ramales.
La MTA confirmaba a última hora de la tarde del domingo que una parte del sistema de autobuses públicos comenzaba a funcionar, aunque advertía de que algunas líneas podrían experimentar retrasos con respecto a sus horarios de operación habituales. Asimismo, detalló que no cobraría a los viajeros que utilicen su servicio en lo que queda de jornada.
La entidad también ha indicado que la mayoría de puentes y túneles que opera en la ciudad ya funcionan con normalidad, entre ellos algunos de los más transitados, como el túnel de que une el Midtown de Manhattan con Queens, o el de Battery Park, entre el Bajo Manhattan y Brooklyn.
Balance de daños
Al tiempo que el país trata de recuperar la normalidad, aparecen los primeros balances de daños materiales. La Federación de Consumidores de EEUU ha sido una de las primeras en hacer público su análisis, que apunta a una cantidad de 7.000 millones de dólares. De acuerdo con sus cálculos, los daños causados por el viento podrían exceder los 5.000 millones de dólares, en tanto que las demandas por inundaciones podrían ser de unos 2.000 millones, debido a que pocas personas a lo largo de la costa este adquirieron un seguro en caso de inundaciones.
No obstante, algunos expertos se atreven a aventurar que la cifra podría ser muy superior. Entre ellos se encuentra Peter Morici, profesor de la universidad de Maryland, que asegura que la factura podría ascender a 45.000 millones de dólares, teniendo en cuenta el parón de las actividades económicas.
Grandes ciudades a lo largo de la costa este, que representan alrededor del 25% de la economía estadounidense, según el economista, suspendieron todas sus actividades, algunas ya desde el viernes. Entre estas ciudades figuran Washington, Balitmore, Philadelphia y Nueva York.
Por ejemplo, el sistema de tránsito de Washington informó de que el sábado tuvo un 67% menos de pasajeros que en un sábado normal; Filadelfia suspendió el sistema de tránsito el sábado y Boston hizo lo propio este domingo.