Gobierno boliviano se prepara ante posible crisis económica
La Paz, Agencias
El Gobierno comienza a prepararse para enfrentar las consecuencias de una eventual crisis financiera mundial. El presidente Evo Morales convocó a sus colaboradores y a exautoridades a una reunión de análisis sobre esta problemática mundial que ya empieza a preocupar a su gobierno.
El Mandatario citó para este viernes, en la Gobernación de Chuquisaca, a una reunión, al vicepresidente Álvaro García Linera, a todo su gabinete, al presidente del Banco Central, además de exministros de Planeamiento, para debatir sobre las consecuencias que sufriría Bolivia por la crisis económica que atraviesan países europeos y Estados Unidos.
"La preocupación que tengo es que esta crisis del capitalismo cómo afectaría a nuestras reservas internacionales; esta crisis del capitalismo cómo puede afectar a la economía nacional, no sólo a las reservas sino a nuestra economía; hasta yo mismo me pregunto y me doy respuesta, parece que no es muy importante depender económicamente del mercado como de Estados Unidos y Europa".
"Si Estados Unidos y Europa entran en quiebra, nos van a dejar sin mercado y eso afecta a nuestra gente, tal vez esta crisis nos hace pensar cómo debatir profundamente no en el marco de la competitividad, sino en el marco de la complementariedad", expresó al proponer que el Mercado Común del Sur (Mercosur) desarrolle una nueva política de complementariedad.
En su criterio, la crisis económica en EEUU y Europa se explica porque todas sus políticas son de competitividad y el que no puede competir se queda ahí, "entonces ese término de competitividad siento que no es la solución en los países desarrollados".
Morales reiteró que invitó a la reunión también a expertos en el tema para saber cómo, dónde y cuándo puede afectar esta crisis del capitalismo al país. Además, convocó al Colegio de Economistas para que, de manera transparente, haga conocer su posición respecto a esta crisis.
El Presidente dijo que el año pasado los países capitalistas estaban sumidos en una crisis y este año vuelven a tener problemas económicos. "Sé que están resolviendo, siento que no van a resolver, porque algunos países industrializados llamados desarrollados y que son parte de un sistema capitalista, sus deudas son impagables".
El miércoles, el ministro de la Presidencia, Carlos Romero Bonifaz, explicó que la principal preocupación del Gobierno sobre la posible crisis financiera en Europa y Estados Unidos radica en el impacto que podría tener en el comercio mundial y a nivel de las reservas internacionales.
“Tenemos que ver cuáles podrían ser los escenarios futuros”, afirmó.
El miedo contagia a la región
El miedo a una recesión en EEUU y las medidas anunciadas por el Banco Central Europeo (BCE) para contener la crisis de la deuda, interpretadas como un signo de debilidad, arrastraron ayer a las bolsas latinoamericanas a sus peores caídas en un año.
Descalabro de las bolsas por temor a una crisis
Las bolsas europeas y americanas sufrieron ayer un nuevo descalabro con pérdidas de entre 3% y 6%, indiferentes a las decisiones del BCE para frenar la crisis de la deuda en la Eurozona e impactadas por malos indicadores en Estados Unidos.
El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, anunció la decisión de reanudar la compra de deuda pública de los países de la Eurozona en el mercado secundario, pero su intervención no tuvo un efecto tranquilizador entre los inversores, preocupados por la deuda de Italia y de España.
En Nueva York, el índice Dow Jones cerró con una caída de 4,31%, el mismo nivel de diciembre último, y el Nasdaq perdió 5,08%. Mientras, las principales plazas europeas cerraron con pérdidas superiores al 3%. "Asistimos a la erosión, y luego a la desaparición de la confianza de los inversores. Confianza en la economía, confianza en el mercado, confianza en los dirigentes políticos", indicó Hugh Johnson, de Hugh Johnson Advisors.
En pocos días, desde el cierre del 21 de julio, el índice Dow Jones perdió cerca de 1.300 puntos. Volvió a situarse en el nivel de cierre del 9 de diciembre tras su peor sesión en términos de porcentaje desde la primavera boreal del 2009. En América Latina, la Bolsa de Sao Paulo cayó 5,72%, su mayor retroceso desde noviembre del 2008.
El Gobierno comienza a prepararse para enfrentar las consecuencias de una eventual crisis financiera mundial. El presidente Evo Morales convocó a sus colaboradores y a exautoridades a una reunión de análisis sobre esta problemática mundial que ya empieza a preocupar a su gobierno.
El Mandatario citó para este viernes, en la Gobernación de Chuquisaca, a una reunión, al vicepresidente Álvaro García Linera, a todo su gabinete, al presidente del Banco Central, además de exministros de Planeamiento, para debatir sobre las consecuencias que sufriría Bolivia por la crisis económica que atraviesan países europeos y Estados Unidos.
"La preocupación que tengo es que esta crisis del capitalismo cómo afectaría a nuestras reservas internacionales; esta crisis del capitalismo cómo puede afectar a la economía nacional, no sólo a las reservas sino a nuestra economía; hasta yo mismo me pregunto y me doy respuesta, parece que no es muy importante depender económicamente del mercado como de Estados Unidos y Europa".
"Si Estados Unidos y Europa entran en quiebra, nos van a dejar sin mercado y eso afecta a nuestra gente, tal vez esta crisis nos hace pensar cómo debatir profundamente no en el marco de la competitividad, sino en el marco de la complementariedad", expresó al proponer que el Mercado Común del Sur (Mercosur) desarrolle una nueva política de complementariedad.
En su criterio, la crisis económica en EEUU y Europa se explica porque todas sus políticas son de competitividad y el que no puede competir se queda ahí, "entonces ese término de competitividad siento que no es la solución en los países desarrollados".
Morales reiteró que invitó a la reunión también a expertos en el tema para saber cómo, dónde y cuándo puede afectar esta crisis del capitalismo al país. Además, convocó al Colegio de Economistas para que, de manera transparente, haga conocer su posición respecto a esta crisis.
El Presidente dijo que el año pasado los países capitalistas estaban sumidos en una crisis y este año vuelven a tener problemas económicos. "Sé que están resolviendo, siento que no van a resolver, porque algunos países industrializados llamados desarrollados y que son parte de un sistema capitalista, sus deudas son impagables".
El miércoles, el ministro de la Presidencia, Carlos Romero Bonifaz, explicó que la principal preocupación del Gobierno sobre la posible crisis financiera en Europa y Estados Unidos radica en el impacto que podría tener en el comercio mundial y a nivel de las reservas internacionales.
“Tenemos que ver cuáles podrían ser los escenarios futuros”, afirmó.
El miedo contagia a la región
El miedo a una recesión en EEUU y las medidas anunciadas por el Banco Central Europeo (BCE) para contener la crisis de la deuda, interpretadas como un signo de debilidad, arrastraron ayer a las bolsas latinoamericanas a sus peores caídas en un año.
Descalabro de las bolsas por temor a una crisis
Las bolsas europeas y americanas sufrieron ayer un nuevo descalabro con pérdidas de entre 3% y 6%, indiferentes a las decisiones del BCE para frenar la crisis de la deuda en la Eurozona e impactadas por malos indicadores en Estados Unidos.
El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, anunció la decisión de reanudar la compra de deuda pública de los países de la Eurozona en el mercado secundario, pero su intervención no tuvo un efecto tranquilizador entre los inversores, preocupados por la deuda de Italia y de España.
En Nueva York, el índice Dow Jones cerró con una caída de 4,31%, el mismo nivel de diciembre último, y el Nasdaq perdió 5,08%. Mientras, las principales plazas europeas cerraron con pérdidas superiores al 3%. "Asistimos a la erosión, y luego a la desaparición de la confianza de los inversores. Confianza en la economía, confianza en el mercado, confianza en los dirigentes políticos", indicó Hugh Johnson, de Hugh Johnson Advisors.
En pocos días, desde el cierre del 21 de julio, el índice Dow Jones perdió cerca de 1.300 puntos. Volvió a situarse en el nivel de cierre del 9 de diciembre tras su peor sesión en términos de porcentaje desde la primavera boreal del 2009. En América Latina, la Bolsa de Sao Paulo cayó 5,72%, su mayor retroceso desde noviembre del 2008.