El partido de Putin propone elevar a 21 años la edad mínima para beber y fumar

Moscú, Agencias
El partido Rusia Unida y la organización Frente Popular, creada por el primer ministro, Vladimir Putin, han propuesto elevar de 18 a 21 años la edad mínima para beber y fumar en Rusia.

Un portavoz del partido gobernante, Timur Prokopenko, ha llamado al "debate público" sobre esta cuestión e incluso ha instado a que las discusiones se extiendan también por las redes sociales. "Expertos y organizaciones públicas también deberían sumarse", ha añadido, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias RIA Novosti.

Si la iniciativa de Rusia Unida y el Frente Popular logra un aparente consenso social, la medida será incluida en el programa electoral de la formación de cara a las elecciones parlamentarias de diciembre.

De momento, la propuesta ya ha recibido valoraciones dispares. A favor se han manifestado, entre otros, el presidente de la Comisión de Política Económica y Empresa de la Duma, Yevgeni Fedorov, que considera "absolutamente relevante" modificar la edad mínima como forma de reducir el elevado consumo de alcohol entre la población, especialmente entre los jóvenes.

Sin embargo, otros como Oleg Zikov, miembro de la Cámara Pública nacional y presidente de una asociación de ayuda a alcohólicos y drogadictos, ha criticado que se permita a los menores de 18 años servir en el Ejército y que se les trate "como niños en términos de alcohol". Ha dicho que el problema no se resolverá si no es con una batería de medidas más complejas.

ALCOHOLISMO

El presidente ruso, Dimitri Medvedev, ordenó en 2009 al Gobierno que tomase medidas para limitar la ingesta de alcohol en el país, que tiene una tasa de consumo que supera en más del doble el índice considerado ya como grave por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Algunos estudios sostienen que el alcohol está detrás de una de cada dos muertes de hombres en edad de trabajar.

Rusia ha endurecido los controles sobre la venta de alcohol y tabaco a menores durante los últimos años, lo que, por ejemplo, ha extendido entre los dependientes la práctica de pedir la identificación a los jóvenes susceptibles de ser menores de edad.

Además, las autoridades rusas decidieron incluir en junio la cerveza en la lista oficial de bebidas alcohólicas y retirarle la catalogación de alimento, con el objetivo de limitar su distribución. Se equipara de esta forma a las bebidas con más de un 10 por ciento de alcohol.

La cerveza se había convertido en una alternativa al vodka hasta el punto en que sus ventas han subido en la última década un 40 por ciento y las de vodka han caído un 30 por ciento.

Entradas populares