Surgen nuevas interrogantes sobre ex asesor de Cameron
Londres, Agencias
El ex director de comunicaciones del primer ministro David Cameron no había recibido el máximo nivel de seguridad, por lo que no se le hizo la investigación más estricta de antecedentes, señaló el jueves una versión en la prensa.
Andy Coulson, ex director de News of the World, el semanario sensacionalista que desencadenó un sonado escándalo de espionaje telefónico, tendría que haber sido investigado antes de trabajar para Cameron después que éste asumió como primer ministro. Coulson renunció en enero cuando se plantearon más interrogantes sobre la publicación.
"La revelación provocará insinuaciones de que Cameron no tomó medidas adecuadas para investigar las denuncias de que Coulson estuvo involucrado en comportamiento ilegal en News of the World", dijo el informe del diario Guardian.
Una portavoz en el despacho de Cameron dijo que el nivel de investigación de antecedentes dependía de si alguien tenía acceso a material ultrasecreto, y se negó a especular por qué Coulson no recibió ese acceso.
"No comentamos sobre casos individuales", dijo, hablando a condición de anonimato de acuerdo con la política del gobierno.
A Cameron le preguntaron varias veces sobre la cuestión el miércoles en la Cámara de los Comunes.
"(Coulson) fue investigado. Tenía un nivel básico de averiguación de antecedentes", dijo el primer ministro. "No tenía acceso a los documentos más secretos del gobierno".
Cuando le insistieron con la pregunta, Cameron respondió: "Creo que un número de miembros honorables están buscando algún tipo de secreto detrás de una cortina que sencillamente no existe".
La Oficina del Gabinete dijo que todos los empleados en la oficina del primer ministro en el 10 de Downing Street tienen el segundo mayor nivel de autorización. Como tales, deben someterse a una revisión de antecedentes, incluso archivos personales, crédito y antecedentes penales.
De todos modos, era bien sabido en el 2007 cuando Cameron, entonces líder de la oposición, contrató por primera vez a Coulson, que éste acababa de renunciar como director del News of the World después de que dos empleados del diario fueron declarados culpables de espionaje telefónico.
El Partido Conservador contrató a una compañía para que investigara a Coulson en el 2007, dijo Cameron el miércoles, pero se negó a identificarla.
Por otra parte, el escándalo del espionaje telefónico brinda a Gran Bretaña la oportunidad de sanear las relaciones impropias entre políticos, periodistas y policías, afirmó el jueves el viceprimer ministro Nick Clegg.
Pero Clegg defendió a Cameron ante las preguntas de si había mantenido discusiones impropias con ejecutivos de News Corp., del magnate Rupert Murdoch, sobre el intento de éste de tomar pleno control de la cadena Sky Broadcasting de televisión en cable.
"Creo que ahora tenemos una oportunidad única de limpiar realmente las prácticas turbias y relaciones dudosas que se han arraigado en el seno del sistema británico entre la prensa, los políticos y la policía", afirmó Clegg.
El escándalo ha recibido una enorme atención desde el 4 de julio, cuando se reveló que alguien en News of the World había espiado el teléfono de la niña de 13 años Milly Dowler, a la postre asesinada, en momentos en que la policía todavía la buscaba.
El Parlamento no laboró el jueves en el primer día de su receso, pero la investigación parecía intensificarse.
La policía metropolitana informó el miércoles que asignaba otros 15 efectivos para ayudar a los 45 que ya están llevando a cabo la investigación.
El ex director de comunicaciones del primer ministro David Cameron no había recibido el máximo nivel de seguridad, por lo que no se le hizo la investigación más estricta de antecedentes, señaló el jueves una versión en la prensa.
Andy Coulson, ex director de News of the World, el semanario sensacionalista que desencadenó un sonado escándalo de espionaje telefónico, tendría que haber sido investigado antes de trabajar para Cameron después que éste asumió como primer ministro. Coulson renunció en enero cuando se plantearon más interrogantes sobre la publicación.
"La revelación provocará insinuaciones de que Cameron no tomó medidas adecuadas para investigar las denuncias de que Coulson estuvo involucrado en comportamiento ilegal en News of the World", dijo el informe del diario Guardian.
Una portavoz en el despacho de Cameron dijo que el nivel de investigación de antecedentes dependía de si alguien tenía acceso a material ultrasecreto, y se negó a especular por qué Coulson no recibió ese acceso.
"No comentamos sobre casos individuales", dijo, hablando a condición de anonimato de acuerdo con la política del gobierno.
A Cameron le preguntaron varias veces sobre la cuestión el miércoles en la Cámara de los Comunes.
"(Coulson) fue investigado. Tenía un nivel básico de averiguación de antecedentes", dijo el primer ministro. "No tenía acceso a los documentos más secretos del gobierno".
Cuando le insistieron con la pregunta, Cameron respondió: "Creo que un número de miembros honorables están buscando algún tipo de secreto detrás de una cortina que sencillamente no existe".
La Oficina del Gabinete dijo que todos los empleados en la oficina del primer ministro en el 10 de Downing Street tienen el segundo mayor nivel de autorización. Como tales, deben someterse a una revisión de antecedentes, incluso archivos personales, crédito y antecedentes penales.
De todos modos, era bien sabido en el 2007 cuando Cameron, entonces líder de la oposición, contrató por primera vez a Coulson, que éste acababa de renunciar como director del News of the World después de que dos empleados del diario fueron declarados culpables de espionaje telefónico.
El Partido Conservador contrató a una compañía para que investigara a Coulson en el 2007, dijo Cameron el miércoles, pero se negó a identificarla.
Por otra parte, el escándalo del espionaje telefónico brinda a Gran Bretaña la oportunidad de sanear las relaciones impropias entre políticos, periodistas y policías, afirmó el jueves el viceprimer ministro Nick Clegg.
Pero Clegg defendió a Cameron ante las preguntas de si había mantenido discusiones impropias con ejecutivos de News Corp., del magnate Rupert Murdoch, sobre el intento de éste de tomar pleno control de la cadena Sky Broadcasting de televisión en cable.
"Creo que ahora tenemos una oportunidad única de limpiar realmente las prácticas turbias y relaciones dudosas que se han arraigado en el seno del sistema británico entre la prensa, los políticos y la policía", afirmó Clegg.
El escándalo ha recibido una enorme atención desde el 4 de julio, cuando se reveló que alguien en News of the World había espiado el teléfono de la niña de 13 años Milly Dowler, a la postre asesinada, en momentos en que la policía todavía la buscaba.
El Parlamento no laboró el jueves en el primer día de su receso, pero la investigación parecía intensificarse.
La policía metropolitana informó el miércoles que asignaba otros 15 efectivos para ayudar a los 45 que ya están llevando a cabo la investigación.