Informe dice que Ahmadinejad busca armas nucleares
Viena, Agencias
El presidente iraní desea desarrollar armas nucleares abiertamente pero el liderazgo clerical se opone, temeroso de la reacción internacional ante dicha medida, según una valoración de inteligencia compartida con The Associated Press.
Ese punto de vista, de un país tradicionalmente confiable en materia de espionaje en la región, no puede ser confirmado y contrasta con la valoración de otros países que consideran al presidente iraní Mahmud Ahmadinejad como un moderado confiable en materia nuclear en comparación con el líder supremo, el ayatola Alí Jamenei.
Los intentos de interpretar los objetivos de Irán tienen importancia porque a medida que aumenta su enriquecimiento de uranio, se acerca cada día más a la posibilidad de construir ojivas nucleares, pese a insistir que no le interesan dichas armas y sólo aspira a producir combustible para sus reactores.
Un funcionario estadounidense citó una valoración que examinó, según la cual Ahmadinejad quizá sea más "moderado", más inclinado a dialogar con la comunidad internacional sobre materia nuclear que Jamenei. Pidió quedar en el anonimato debido a la naturaleza privilegiada de la información.
Empero, un comentario franco formulado el mes pasado por Ahmadinejad ha planteado interrogantes. Tras repetir que Irán no busca las armas nucleares, respaldó abiertamente la posibilidad de fabricarlas, e indicó a la televisión estatal iraní que "si queremos fabricar una bomba, no le tenemos miedo a nadie".
La declaración desafiante se atiene al plan elaborado por la valoración de inteligencia compartida con la AP, según la cual Ahmadinejad desea avanzar públicamente en el desarrollo de un programa nuclear.
Ahmadinejad intenta "desprenderse de las limitaciones que se impuso Irán y continuar abiertamente en su intento de crear una bomba atómica", según la valoración compartida con la AP.
Empero, Jamenei, que tiene la última palabra en materia nuclear y otros temas, "desea avanzar por medio de canales diplomáticos, ante los temores de una respuesta contundente de Occidente", indicó el informe.
El presidente iraní desea desarrollar armas nucleares abiertamente pero el liderazgo clerical se opone, temeroso de la reacción internacional ante dicha medida, según una valoración de inteligencia compartida con The Associated Press.
Ese punto de vista, de un país tradicionalmente confiable en materia de espionaje en la región, no puede ser confirmado y contrasta con la valoración de otros países que consideran al presidente iraní Mahmud Ahmadinejad como un moderado confiable en materia nuclear en comparación con el líder supremo, el ayatola Alí Jamenei.
Los intentos de interpretar los objetivos de Irán tienen importancia porque a medida que aumenta su enriquecimiento de uranio, se acerca cada día más a la posibilidad de construir ojivas nucleares, pese a insistir que no le interesan dichas armas y sólo aspira a producir combustible para sus reactores.
Un funcionario estadounidense citó una valoración que examinó, según la cual Ahmadinejad quizá sea más "moderado", más inclinado a dialogar con la comunidad internacional sobre materia nuclear que Jamenei. Pidió quedar en el anonimato debido a la naturaleza privilegiada de la información.
Empero, un comentario franco formulado el mes pasado por Ahmadinejad ha planteado interrogantes. Tras repetir que Irán no busca las armas nucleares, respaldó abiertamente la posibilidad de fabricarlas, e indicó a la televisión estatal iraní que "si queremos fabricar una bomba, no le tenemos miedo a nadie".
La declaración desafiante se atiene al plan elaborado por la valoración de inteligencia compartida con la AP, según la cual Ahmadinejad desea avanzar públicamente en el desarrollo de un programa nuclear.
Ahmadinejad intenta "desprenderse de las limitaciones que se impuso Irán y continuar abiertamente en su intento de crear una bomba atómica", según la valoración compartida con la AP.
Empero, Jamenei, que tiene la última palabra en materia nuclear y otros temas, "desea avanzar por medio de canales diplomáticos, ante los temores de una respuesta contundente de Occidente", indicó el informe.