Temor y alivio en Afganistán por partida de EEUU
Kabul, Agencias
El presidente Hamid Karzai recibió el jueves con beneplácito el anuncio del retiro de 33.000 soldados estadounidenses de Afganistán como una oportunidad de mostrar que el país puede defenderse solo, pero muchos compatriotas suyos temen que derive en más violencia.
Karzai, que advirtió que Estados Unidos y la OTAN arriesgaban convertirse en ocupantes después de casi diez años de guerra, calificó el plan de "buena medida" y afirmó que los jóvenes afganos custodiarán la nación contra el Talibán y otros insurgentes que acaban de iniciar una nueva ofensiva.
En las afueras de la capital, en el bastión del Talibán en el sur y en el norte cada vez más inestable, las autoridades de los gobiernos locales y los afganos temen que una salida rápida de los soldados estadounidenses y extranjeros pudiera dejar al país camino de una nueva guerra civil.
"Cuando se vayan, los afganos volverán a quedar atrapados en una guerra civil y no serán capaces de gobernar el país sin los estadounidenses", opinó Hakimula, un joven de 20 años residente en la ciudad de Kandahar, la cuna del Talibán.
El movimiento islámico de línea dura dijo el jueves que el retiro estadounidense será un paso hacia la terminación de "este baño de sangre inútil".
Desalojado del poder en el 2001 por haber dado refugio a al-Qaida, el Talibán se ha reagrupado en los últimos años. Ha encabezado una insurgencia que ha conmovido poblaciones urbanas y rurales con bombas, ataques suicidas y asaltos a bases de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y la sede central de las fuerzas afganas aliadas con Occidente.
"El Emirato Afgano Islámico de Afganistán quiere dejar en claro una vez más que la solución a la crisis afgana radica en el retiro total de todas las fuerzas extranjeras inmediatamente, y mientras esto no suceda, nuestra lucha armada aumentará día a día", amenazó el vocero talibán Zabihulá Mujahid en una inusual declaración en inglés.
El presidente estadounidense Barack Obama anunció el miércoles por la noche que retirará a 33.000 soldados estadounidenses para mediados del 2012, en las primeras fases de un retiro que concluirá en el 2014. Actualmente hay unos 100.000 efectivos de Estados Unidos en el país.
El presidente Hamid Karzai recibió el jueves con beneplácito el anuncio del retiro de 33.000 soldados estadounidenses de Afganistán como una oportunidad de mostrar que el país puede defenderse solo, pero muchos compatriotas suyos temen que derive en más violencia.
Karzai, que advirtió que Estados Unidos y la OTAN arriesgaban convertirse en ocupantes después de casi diez años de guerra, calificó el plan de "buena medida" y afirmó que los jóvenes afganos custodiarán la nación contra el Talibán y otros insurgentes que acaban de iniciar una nueva ofensiva.
En las afueras de la capital, en el bastión del Talibán en el sur y en el norte cada vez más inestable, las autoridades de los gobiernos locales y los afganos temen que una salida rápida de los soldados estadounidenses y extranjeros pudiera dejar al país camino de una nueva guerra civil.
"Cuando se vayan, los afganos volverán a quedar atrapados en una guerra civil y no serán capaces de gobernar el país sin los estadounidenses", opinó Hakimula, un joven de 20 años residente en la ciudad de Kandahar, la cuna del Talibán.
El movimiento islámico de línea dura dijo el jueves que el retiro estadounidense será un paso hacia la terminación de "este baño de sangre inútil".
Desalojado del poder en el 2001 por haber dado refugio a al-Qaida, el Talibán se ha reagrupado en los últimos años. Ha encabezado una insurgencia que ha conmovido poblaciones urbanas y rurales con bombas, ataques suicidas y asaltos a bases de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y la sede central de las fuerzas afganas aliadas con Occidente.
"El Emirato Afgano Islámico de Afganistán quiere dejar en claro una vez más que la solución a la crisis afgana radica en el retiro total de todas las fuerzas extranjeras inmediatamente, y mientras esto no suceda, nuestra lucha armada aumentará día a día", amenazó el vocero talibán Zabihulá Mujahid en una inusual declaración en inglés.
El presidente estadounidense Barack Obama anunció el miércoles por la noche que retirará a 33.000 soldados estadounidenses para mediados del 2012, en las primeras fases de un retiro que concluirá en el 2014. Actualmente hay unos 100.000 efectivos de Estados Unidos en el país.