OPEP decide no alterar su producción; suben precios del crudo
Viena, Agencias
De forma inesperada y entre divergencias de sus miembros, la OPEP anunció el miércoles que mantendrá su nivel de producción de petróleo, haciendo que se dispararan los precios del crudo, aunque indicó que queda la alternativa de volver a reunirse en tres meses más para buscar elevar sus cuotas extractoras.
"No hemos podido llegar a un consenso ... para aumentar nuestra producción", dijo a los periodistas el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Abdalá Al-Badri.
La decisión fue inesperada y reflejó tensiones inusuales en una organización que por lo general trabaja por consenso.
El ministro venezolano de Energía, Rafael Ramírez, admitió que en el seno de la OPEP hubo una discusión "muy cerrada", lo que llevó a un conjunto de países a coincidir en que "hay mucha incertidumbre".
La propuesta de elevar la producción entre 1,5 millones y 2 millones de barriles diarios fue rechazada por los miembros del cartel que acordaron mantener un monitoreo más estrecho del mercado y hacer una nueva consulta sobre el tema en la próxima reunión ordinaria de diciembre.
En una conversación telefónica con la televisora estatal venezolana, Ramírez dijo que hay "mucha presión de los países consumidores, mucha presión de la Agencia Internacional, pero la OPEP ha demostrado su apego a lo que son los principios de nuestra organización y su irrestricta defensa al precio del petróleo, en la cual Venezuela fue abanderada".
El ministro defendió el acuerdo de la OPEP, asegurando que ante los "niveles de incertidumbre" que hay en el mercado un incremento de producción "podría causar un colapso en nuestro precio", según reseñó la estatal Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Los analistas que han seguido desde hace más de 20 años las incidencias del cartel dijeron no recordar otra ocasión en que la OPEP admitiera divergencias entre sus miembros. Algunos consideraron el fracaso del encuentro el principio del fin de la entidad, que produce más de un tercio del crudo mundial.
"La OPEP está ... a punto de disgregarse", dijo el analista Marc Ostwald, de la firma Monument Securities. "Una perspectiva más amplia es que tras la II Guerra Mundial el orden se está fracturando de forma espectacular, ya sea la UE/Eurozona, el Banco Mundial/FMI, (o) la OPEP".
Otros analistas fueron menos pesimistas, pero concordaron el miércoles que el resultado debilitará la imagen de la OPEP como importarte regulador de los mercados del petróleo.
"Creo que existen ciertas tensiones", dijo Jason Schenker, presidente de Prestige Economics. "Pero todo el mundo tiene que hacer negocios y los países tienen opiniones diferentes sobre el futuro de la demanda".
La noticia sorprendió a los mercados y los precios se lanzaron a una carrera alcista. El crudo de referencia para entrega en julio subió 1,25 dólares a 100,34 dólares el barril en el mercado de materias primas de Nueva York, tras haber ido a la baja antes del anuncio de la OPEP.
Arabia Saudí y otras naciones productoras del Golfo Pérsico han sido presionadas para que eleven su producción y calmar con ello los nervios de los mercados, además de disipar los temores de que el crudo había alcanzado un precio excesivo para las naciones consumidoras que intentar apuntalar sus economías.
A la medida se opusieron varios países encabezados por Irán, el segundo productor del cartel.
De forma inesperada y entre divergencias de sus miembros, la OPEP anunció el miércoles que mantendrá su nivel de producción de petróleo, haciendo que se dispararan los precios del crudo, aunque indicó que queda la alternativa de volver a reunirse en tres meses más para buscar elevar sus cuotas extractoras.
"No hemos podido llegar a un consenso ... para aumentar nuestra producción", dijo a los periodistas el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Abdalá Al-Badri.
La decisión fue inesperada y reflejó tensiones inusuales en una organización que por lo general trabaja por consenso.
El ministro venezolano de Energía, Rafael Ramírez, admitió que en el seno de la OPEP hubo una discusión "muy cerrada", lo que llevó a un conjunto de países a coincidir en que "hay mucha incertidumbre".
La propuesta de elevar la producción entre 1,5 millones y 2 millones de barriles diarios fue rechazada por los miembros del cartel que acordaron mantener un monitoreo más estrecho del mercado y hacer una nueva consulta sobre el tema en la próxima reunión ordinaria de diciembre.
En una conversación telefónica con la televisora estatal venezolana, Ramírez dijo que hay "mucha presión de los países consumidores, mucha presión de la Agencia Internacional, pero la OPEP ha demostrado su apego a lo que son los principios de nuestra organización y su irrestricta defensa al precio del petróleo, en la cual Venezuela fue abanderada".
El ministro defendió el acuerdo de la OPEP, asegurando que ante los "niveles de incertidumbre" que hay en el mercado un incremento de producción "podría causar un colapso en nuestro precio", según reseñó la estatal Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Los analistas que han seguido desde hace más de 20 años las incidencias del cartel dijeron no recordar otra ocasión en que la OPEP admitiera divergencias entre sus miembros. Algunos consideraron el fracaso del encuentro el principio del fin de la entidad, que produce más de un tercio del crudo mundial.
"La OPEP está ... a punto de disgregarse", dijo el analista Marc Ostwald, de la firma Monument Securities. "Una perspectiva más amplia es que tras la II Guerra Mundial el orden se está fracturando de forma espectacular, ya sea la UE/Eurozona, el Banco Mundial/FMI, (o) la OPEP".
Otros analistas fueron menos pesimistas, pero concordaron el miércoles que el resultado debilitará la imagen de la OPEP como importarte regulador de los mercados del petróleo.
"Creo que existen ciertas tensiones", dijo Jason Schenker, presidente de Prestige Economics. "Pero todo el mundo tiene que hacer negocios y los países tienen opiniones diferentes sobre el futuro de la demanda".
La noticia sorprendió a los mercados y los precios se lanzaron a una carrera alcista. El crudo de referencia para entrega en julio subió 1,25 dólares a 100,34 dólares el barril en el mercado de materias primas de Nueva York, tras haber ido a la baja antes del anuncio de la OPEP.
Arabia Saudí y otras naciones productoras del Golfo Pérsico han sido presionadas para que eleven su producción y calmar con ello los nervios de los mercados, además de disipar los temores de que el crudo había alcanzado un precio excesivo para las naciones consumidoras que intentar apuntalar sus economías.
A la medida se opusieron varios países encabezados por Irán, el segundo productor del cartel.