Notable entrada del Tea Party en la carrera a la Casa Blanca
Washington, Agencias
La política estaodunidense Michele Bachmann hizo una entrada notable, bajo los colores de la derecha estadounidense del Tea Party, en la carrera a las elecciones presidenciales de 2012, en momentos en que los republicanos intentan movilizar a los electores contra el presidente del país, Barack Obama.
Bachmann, que es miembro del Congreso por Minnesota, se mostró, entre seis candidatos masculinos declarados o potenciales (Mitt Romney, Tim Pawlenty, Ron Paul, Herman Cain, Newt Gingrich, Rick Santorum) muy sonriente y segura.
Vestida con un estricto traje negro, la congresista de 55 años respondió con mucha confianza a las preguntas sobre la reforma de salud impulsada por el presidente Obama, la deuda estadounidense y hasta los operativos en Libia.
Thomas Mann, especialista en política estadounidense del grupo de reflexión Brooking en Washington, estimó que a Bachmann "parece haberle ido bien en el debate, dadas las bajas expectativas".
"Podemos ahora imaginarla ganando Iowa", pero "es más difícil imaginarla como presidenta", añadió.
En el debate, que tuvo como objetivo dar a conocer a los aspirantes republicanos a la presidencia, estos coincidieron en criticar a Obama y su manejo de la economía, que según encuestas será tema principal en la campaña a las elecciones de noviembre de 2012, junto a su reforma de la salud.
"Cuando sea presidenta de Estados Unidos, no descansaré hasta que el 'Obamacare' (la reforma de salud del presidente) sea anulado", declaró la Bachmann".
Bachmann se llevó los aplausos de la audiencia cuando afirmó que "Obama es un presidente de un mandato".
La gran ausente del debate fue la ex gobernadora de Alaska Sarah Palin, quizá la republicana más conocida a nivel nacional, quien pese a coquetear con una posible aspiración presidencial no ha anunciado formalmente sus intenciones, dejando así el camino libre a Bachmann.
A pesar de la buena prestación de la congresista conservadora, el ex gobernador de Massachussets, Mitt Romney, parte como favorito para la nominación republicana.
Las últimas encuestas lo confirman como el hombre a batir: un estudio de CNN/Opinion Research Corporation divulgado el lunes le otorga 24% de las preferencias.
La política estaodunidense Michele Bachmann hizo una entrada notable, bajo los colores de la derecha estadounidense del Tea Party, en la carrera a las elecciones presidenciales de 2012, en momentos en que los republicanos intentan movilizar a los electores contra el presidente del país, Barack Obama.
Bachmann, que es miembro del Congreso por Minnesota, se mostró, entre seis candidatos masculinos declarados o potenciales (Mitt Romney, Tim Pawlenty, Ron Paul, Herman Cain, Newt Gingrich, Rick Santorum) muy sonriente y segura.
Vestida con un estricto traje negro, la congresista de 55 años respondió con mucha confianza a las preguntas sobre la reforma de salud impulsada por el presidente Obama, la deuda estadounidense y hasta los operativos en Libia.
Thomas Mann, especialista en política estadounidense del grupo de reflexión Brooking en Washington, estimó que a Bachmann "parece haberle ido bien en el debate, dadas las bajas expectativas".
"Podemos ahora imaginarla ganando Iowa", pero "es más difícil imaginarla como presidenta", añadió.
En el debate, que tuvo como objetivo dar a conocer a los aspirantes republicanos a la presidencia, estos coincidieron en criticar a Obama y su manejo de la economía, que según encuestas será tema principal en la campaña a las elecciones de noviembre de 2012, junto a su reforma de la salud.
"Cuando sea presidenta de Estados Unidos, no descansaré hasta que el 'Obamacare' (la reforma de salud del presidente) sea anulado", declaró la Bachmann".
Bachmann se llevó los aplausos de la audiencia cuando afirmó que "Obama es un presidente de un mandato".
La gran ausente del debate fue la ex gobernadora de Alaska Sarah Palin, quizá la republicana más conocida a nivel nacional, quien pese a coquetear con una posible aspiración presidencial no ha anunciado formalmente sus intenciones, dejando así el camino libre a Bachmann.
A pesar de la buena prestación de la congresista conservadora, el ex gobernador de Massachussets, Mitt Romney, parte como favorito para la nominación republicana.
Las últimas encuestas lo confirman como el hombre a batir: un estudio de CNN/Opinion Research Corporation divulgado el lunes le otorga 24% de las preferencias.