Los rebeldes libios progresan en el camino a Trípoli
Bengasi, Agencias
Los insurgentes avanzaron este miércoles en su camino hacia Trípoli al tomar el control de tres localidades en el oeste de Libia, al tiempo que el régimen del coronel Muamar Gadafi denunció la muerte de 12 personas al sur de la capital en un ataque de la OTAN.
Estos acontecimientos se producen en la víspera de la visita a Trípoli del emisario del Kremlin, Mijail Marguelov, que se entrevistará el jueves con el jefe de gobierno y el responsable de la diplomacia, una semana después de haberse reunido con los responsables rebeldes en Bengasi (este).
Los rebeldes se apoderaron este miércoles de Zawit al Bagul, Al Lawanya Ghanymma, en la carretera de Yefren (oeste), localidad controlada por la rebelión y situada a unos 80 km de Trípoli, según un corresponsal de la AFP. La víspera habían tomado el control de Al Rayayna.
Desde hace tres días, los rebeldes progresan del este de Zenten hacia Yefren, dos localidades al sudoeste de Trípoli que distan menos de 30 km. Su objetivo es arrebatar a los partidarios de Gadafi los pueblos situados entre las dos.
El comandante de las operaciones de la Alianza Atlántica, general Charles Bouchard, estimó que la OTAN puede terminar su misión en Libia sin recurrir a tropas terrestres y aseguró que la situación militar en el oeste del país transcurre "muy positivamente".
Los éxitos de la rebelión no son sólo militares, sino también diplomáticos, con el reconocimiento por Canadá y Panamá de su órgano político, el Consejo Nacional de Transición (CNT), como "representante legítimo" del pueblo libio.
También Turquía se declaró dispuesta a hacer lo propio si se lo piden.
Por el momento 15 países reconocieron a la rebelión.
Pero cuatro meses después del comienzo de la revuelta en Libia, surge la duda de si la OTAN dispone de medios militares suficientes para cumplir su misión en el caso de que se prolongue mucho tiempo.
La portavoz de la Alianza Atlántica, Oana Lungescu, intentó disipar el martes las dudas diciendo que estaba "claro" que se tienen los medios necesarios para "mantener la presión" sobre Gadafi, en el poder desde hace 42 años.
En Estados Unidos, el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, advirtió a Barack Obama del riesgo de una eventual prolongación de las operaciones militares estadounidenses en Libia sin la autorización del Congreso.
La Casa Blanca presentó formalmente este miércoles ante el Congreso un informe que justifica el papel de Estados Unidos en el conflicto en Libia y destaca que el presidente Barack Obama no se excedió en sus poderes al autorizar las operaciones sin el visto bueno del Congreso.
En Canadá, uno de los países más implicados en las operaciones de la OTAN, los diputados aprobaron la prolongación durante tres meses de las operaciones militares de su país en el seno de la misión de la Alianza Atlántica en Libia.
La OTAN tomó las riendas el 31 de marzo de la intervención internacional en Libia, bajo mandato de la ONU, para proteger a la población civil, cuyo movimiento de protesta fue reprimido a sangre y fuego, aunque varios políticos occidentales reconocieron que el fin último era la dimisión de Gadafi.
Por otro lado, la televisión estatal libia informó que un ataque de la OTAN contra un autobús a la entrada de la ciudad de Kikla, al sur de la capital, "provocó el martirio de 12 pasajeros".
Según la ONU, el conflicto en Libia causó, desde el 15 de febrero, entre "10.000 y 15.000" muertos y casi un millón de desplazados.
Los insurgentes avanzaron este miércoles en su camino hacia Trípoli al tomar el control de tres localidades en el oeste de Libia, al tiempo que el régimen del coronel Muamar Gadafi denunció la muerte de 12 personas al sur de la capital en un ataque de la OTAN.
Estos acontecimientos se producen en la víspera de la visita a Trípoli del emisario del Kremlin, Mijail Marguelov, que se entrevistará el jueves con el jefe de gobierno y el responsable de la diplomacia, una semana después de haberse reunido con los responsables rebeldes en Bengasi (este).
Los rebeldes se apoderaron este miércoles de Zawit al Bagul, Al Lawanya Ghanymma, en la carretera de Yefren (oeste), localidad controlada por la rebelión y situada a unos 80 km de Trípoli, según un corresponsal de la AFP. La víspera habían tomado el control de Al Rayayna.
Desde hace tres días, los rebeldes progresan del este de Zenten hacia Yefren, dos localidades al sudoeste de Trípoli que distan menos de 30 km. Su objetivo es arrebatar a los partidarios de Gadafi los pueblos situados entre las dos.
El comandante de las operaciones de la Alianza Atlántica, general Charles Bouchard, estimó que la OTAN puede terminar su misión en Libia sin recurrir a tropas terrestres y aseguró que la situación militar en el oeste del país transcurre "muy positivamente".
Los éxitos de la rebelión no son sólo militares, sino también diplomáticos, con el reconocimiento por Canadá y Panamá de su órgano político, el Consejo Nacional de Transición (CNT), como "representante legítimo" del pueblo libio.
También Turquía se declaró dispuesta a hacer lo propio si se lo piden.
Por el momento 15 países reconocieron a la rebelión.
Pero cuatro meses después del comienzo de la revuelta en Libia, surge la duda de si la OTAN dispone de medios militares suficientes para cumplir su misión en el caso de que se prolongue mucho tiempo.
La portavoz de la Alianza Atlántica, Oana Lungescu, intentó disipar el martes las dudas diciendo que estaba "claro" que se tienen los medios necesarios para "mantener la presión" sobre Gadafi, en el poder desde hace 42 años.
En Estados Unidos, el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, advirtió a Barack Obama del riesgo de una eventual prolongación de las operaciones militares estadounidenses en Libia sin la autorización del Congreso.
La Casa Blanca presentó formalmente este miércoles ante el Congreso un informe que justifica el papel de Estados Unidos en el conflicto en Libia y destaca que el presidente Barack Obama no se excedió en sus poderes al autorizar las operaciones sin el visto bueno del Congreso.
En Canadá, uno de los países más implicados en las operaciones de la OTAN, los diputados aprobaron la prolongación durante tres meses de las operaciones militares de su país en el seno de la misión de la Alianza Atlántica en Libia.
La OTAN tomó las riendas el 31 de marzo de la intervención internacional en Libia, bajo mandato de la ONU, para proteger a la población civil, cuyo movimiento de protesta fue reprimido a sangre y fuego, aunque varios políticos occidentales reconocieron que el fin último era la dimisión de Gadafi.
Por otro lado, la televisión estatal libia informó que un ataque de la OTAN contra un autobús a la entrada de la ciudad de Kikla, al sur de la capital, "provocó el martirio de 12 pasajeros".
Según la ONU, el conflicto en Libia causó, desde el 15 de febrero, entre "10.000 y 15.000" muertos y casi un millón de desplazados.