Insurgencia libia anuncia avances en montañas occidentales
Trípoli, Agencias
Los insurgentes en las montañas occidentales de Libia dijeron el domingo que están avanzando y combaten a las fuerzas de Moamar Gadafi en una localidad estratégica al suroeste de la capital, lo cual aumenta la presión sobre el líder en un segundo frente.
El anuncio de la insurgencia de un avance hacia las afueras del poblado de Bair al-Ghanam, a 80 kilómetros (50 millas) de Trípoli, sigue a semanas de combates intensos en las montañas de Nafusa, donde los rebeldes han obligado de manera gradual a un repliegue de las fuerzas de Gadafi hacia la capital.
La insurgencia en Libia controla la región oriental —una tercera parte del país— y algunos sectores, incluidos poblados en las montañas de Nafusa, en la región oeste. En los últimos meses el grueso de la lucha se ha concentrado en las líneas del frente al este de Trípoli.
Sin embargo, una ofensiva rebelde desde las montañas de Nafusa podría obligar a Gadafi a aumentar el envío de efectivos hacia los accesos del suroeste y el occidente que conducen a la capital.
Un portavoz rebelde en Nafusa, Gomaa Ibrahim, dijo que los insurgentes y los soldados del gobierno luchaban desde las primeras horas del domingo en la periferia de Bair al-Ghanam.
Guma el-Gamaty, portavoz del consejo Nacional de Transición de los rebeldes, dijo que Bair al-Ghanam es importante debido a que se ubica a sólo 30 kilómetros (19 millas) al sur de la ciudad de Zawiya, un acceso occidental importante hacia la capital y donde hay una refinería muy importante.
Los insurgentes tomaron en marzo el control de Zawiya antes de que las fuerzas del gobierno los aplastaran y recuperaran la ciudad. La lucha se había reanudado a principios de mes en la localidad, durante lo cual quedó interrumpido brevemente el acceso a una carretera costera vital que cruza por Zawiya.
La ruta enlaza a Trípoli con la frontera tunecina y es una de las principales vías de abastecimiento para Gadafi.
En Trípoli, el gobierno mantenía su postura desafiante. El portavoz Mussa Ibrahim dijo que Gadafi tiene "el ánimo muy en alto" y continúa con el control del país. Insistió en que el líder permanecerá en Libia, pero se abstuvo de confirmar si sigue en la capital.
"Gadafi se encuentra aquí, permanece aquí. Dirige al país. No se irá. No renunciará", afirmó el vocero, en un desafío a los rebeldes y a la coalición encabezada por la OTAN, la cual da apoyo aéreo a la insurgencia.
"Si quieren continuar la lucha estamos dispuestos. Pelearemos calle por calle, casa por casa", apuntó.
Mientras Ibrahim emitía sus declaraciones, mujeres soldados efectuaban disparos al aire con sus fusiles al tiempo que reclutas civiles hacían ruido durante un acto en favor del gobierno en el centro de Trípoli.
Ibrahim dijo a la prensa que el gobierno ha distribuido a la fecha 1,2 millones de armas para la autodefensa de sus partidarios en el oeste del país.
Los insurgentes en las montañas occidentales de Libia dijeron el domingo que están avanzando y combaten a las fuerzas de Moamar Gadafi en una localidad estratégica al suroeste de la capital, lo cual aumenta la presión sobre el líder en un segundo frente.
El anuncio de la insurgencia de un avance hacia las afueras del poblado de Bair al-Ghanam, a 80 kilómetros (50 millas) de Trípoli, sigue a semanas de combates intensos en las montañas de Nafusa, donde los rebeldes han obligado de manera gradual a un repliegue de las fuerzas de Gadafi hacia la capital.
La insurgencia en Libia controla la región oriental —una tercera parte del país— y algunos sectores, incluidos poblados en las montañas de Nafusa, en la región oeste. En los últimos meses el grueso de la lucha se ha concentrado en las líneas del frente al este de Trípoli.
Sin embargo, una ofensiva rebelde desde las montañas de Nafusa podría obligar a Gadafi a aumentar el envío de efectivos hacia los accesos del suroeste y el occidente que conducen a la capital.
Un portavoz rebelde en Nafusa, Gomaa Ibrahim, dijo que los insurgentes y los soldados del gobierno luchaban desde las primeras horas del domingo en la periferia de Bair al-Ghanam.
Guma el-Gamaty, portavoz del consejo Nacional de Transición de los rebeldes, dijo que Bair al-Ghanam es importante debido a que se ubica a sólo 30 kilómetros (19 millas) al sur de la ciudad de Zawiya, un acceso occidental importante hacia la capital y donde hay una refinería muy importante.
Los insurgentes tomaron en marzo el control de Zawiya antes de que las fuerzas del gobierno los aplastaran y recuperaran la ciudad. La lucha se había reanudado a principios de mes en la localidad, durante lo cual quedó interrumpido brevemente el acceso a una carretera costera vital que cruza por Zawiya.
La ruta enlaza a Trípoli con la frontera tunecina y es una de las principales vías de abastecimiento para Gadafi.
En Trípoli, el gobierno mantenía su postura desafiante. El portavoz Mussa Ibrahim dijo que Gadafi tiene "el ánimo muy en alto" y continúa con el control del país. Insistió en que el líder permanecerá en Libia, pero se abstuvo de confirmar si sigue en la capital.
"Gadafi se encuentra aquí, permanece aquí. Dirige al país. No se irá. No renunciará", afirmó el vocero, en un desafío a los rebeldes y a la coalición encabezada por la OTAN, la cual da apoyo aéreo a la insurgencia.
"Si quieren continuar la lucha estamos dispuestos. Pelearemos calle por calle, casa por casa", apuntó.
Mientras Ibrahim emitía sus declaraciones, mujeres soldados efectuaban disparos al aire con sus fusiles al tiempo que reclutas civiles hacían ruido durante un acto en favor del gobierno en el centro de Trípoli.
Ibrahim dijo a la prensa que el gobierno ha distribuido a la fecha 1,2 millones de armas para la autodefensa de sus partidarios en el oeste del país.