Obama y sus consejeros siguieron con suspense la redada contra Bin Laden
Washington, Agencias
Los "minutos pasaron como días", después de que el presidente Barack Obama ordenara el ataque contra la residencia de Osama Bin Laden y de que siguiera, en tiempo real, la redada de las fuerzas especiales estadounidenses que abatieron al jefe de Al Qaeda.
El consejero para la lucha antiterrorista de la Casa Blanca, John Brennan, quien persiguió durante 15 años al cerebro de la organización Al Qaeda, dio detalles el lunes sobre la arriesgada operación de Estados Unidos en la ciudad de Abbottabad, en Pakistán.
"Yo creo que se trata probablemente de uno de los momentos de más ansiedad en la vida de la gente que estaba reunida aquí ayer", dijo Brennan en una animada conferencia de prensa, en la Casa Blanca. "Los minutos pasaban como días y el presidente estaba muy preocupado por la seguridad de nuestro personal", añadió. "Eso es lo que ocupaba sus pensamientos y nosotros queríamos estar seguros de ser capaces de atravesar por esto y cumplir la misión", explicó.
"Fue claramente un momento de mucha tensión, mucha gente sostuvo su respiración", relató Brennan. "El silencio se hacía más ensordecedor mientras (la operación) progresaba e íbamos teniendo novedades", agregó. "Cuando finalmente fuimos informados de que aquellos individuos fueron capaces de entrar y encontrar a un individuo que ellos creían era Bin Laden, hubo un tremendo alivio", narró.
Si la sofisticada operación que se llevó a cabo en helicóptero salía mal, los riesgos para Obama hubieran sido enormes y eso le hubiera costado un revés político del cual no hubiera podido recuperarse antes de las elecciones del año próximo, para las que es candidato.
Considerando ese alto riesgo, Obama pasó por un difícil momento, que únicamente entienden los presidentes que han tenido que tomar, solos, esta clase de decisiones. "El presidente tuvo que evaluar la fuerza de esa información y luego hacer lo que yo creo es una de las más atrevidas llamadas de cualquier presidente en la historia reciente", dijo Brennan, ex alto funcionario de la CIA.
El momento más crítico de la operación, según Brennan, ocurrió cuando uno de los helicópteros que transportaba a las fuerzas especiales estadounidenses presentó problemas técnicos, después de haber incursionado en el complejo habitacional. "Cuando súbitamente, ese helicóptero pareció incapaz de moverse, se tuvo que aplicar el Plan B. Y lo hicieron impecablemente", relató Brennan, evocando la llegada de otro helicóptero a la misión.
Brennan reveló además que Estados Unidos no informó a Pakistán sobre la operación hasta que sus helicópteros salieron del espacio aéreo paquistaní y se excluyó la posibilidad de que Islamabad enviara ataques para interceptar la misión.
Brennan incluso despertó sospechas sobre la idea de que Estados Unidos estaba preparado para reaccionar ante cualquier intento paquistaní de interceptar sus helicópteros, al decir que su país estaba "claramente" preocupado sobre la posibilidad de que Pakistán decidiera intervenir contra las naves. "Afortunadamente, las fuerzas paquistaníes no intervinieron y no hubo otros individuos muertos, además de aquellos que estaban en el complejo habitacional", precisó.
Cuando se confirmó la muerte de Bin Laden, hubo un "creciente sentimiento de confianza y un creciente sentimiento de realización", concluyó Brennan, antes de decir que la primera frase de de Obama al enterarse del éxito de la misión fue: "Lo atrapamos".
Los "minutos pasaron como días", después de que el presidente Barack Obama ordenara el ataque contra la residencia de Osama Bin Laden y de que siguiera, en tiempo real, la redada de las fuerzas especiales estadounidenses que abatieron al jefe de Al Qaeda.
El consejero para la lucha antiterrorista de la Casa Blanca, John Brennan, quien persiguió durante 15 años al cerebro de la organización Al Qaeda, dio detalles el lunes sobre la arriesgada operación de Estados Unidos en la ciudad de Abbottabad, en Pakistán.
"Yo creo que se trata probablemente de uno de los momentos de más ansiedad en la vida de la gente que estaba reunida aquí ayer", dijo Brennan en una animada conferencia de prensa, en la Casa Blanca. "Los minutos pasaban como días y el presidente estaba muy preocupado por la seguridad de nuestro personal", añadió. "Eso es lo que ocupaba sus pensamientos y nosotros queríamos estar seguros de ser capaces de atravesar por esto y cumplir la misión", explicó.
"Fue claramente un momento de mucha tensión, mucha gente sostuvo su respiración", relató Brennan. "El silencio se hacía más ensordecedor mientras (la operación) progresaba e íbamos teniendo novedades", agregó. "Cuando finalmente fuimos informados de que aquellos individuos fueron capaces de entrar y encontrar a un individuo que ellos creían era Bin Laden, hubo un tremendo alivio", narró.
Si la sofisticada operación que se llevó a cabo en helicóptero salía mal, los riesgos para Obama hubieran sido enormes y eso le hubiera costado un revés político del cual no hubiera podido recuperarse antes de las elecciones del año próximo, para las que es candidato.
Considerando ese alto riesgo, Obama pasó por un difícil momento, que únicamente entienden los presidentes que han tenido que tomar, solos, esta clase de decisiones. "El presidente tuvo que evaluar la fuerza de esa información y luego hacer lo que yo creo es una de las más atrevidas llamadas de cualquier presidente en la historia reciente", dijo Brennan, ex alto funcionario de la CIA.
El momento más crítico de la operación, según Brennan, ocurrió cuando uno de los helicópteros que transportaba a las fuerzas especiales estadounidenses presentó problemas técnicos, después de haber incursionado en el complejo habitacional. "Cuando súbitamente, ese helicóptero pareció incapaz de moverse, se tuvo que aplicar el Plan B. Y lo hicieron impecablemente", relató Brennan, evocando la llegada de otro helicóptero a la misión.
Brennan reveló además que Estados Unidos no informó a Pakistán sobre la operación hasta que sus helicópteros salieron del espacio aéreo paquistaní y se excluyó la posibilidad de que Islamabad enviara ataques para interceptar la misión.
Brennan incluso despertó sospechas sobre la idea de que Estados Unidos estaba preparado para reaccionar ante cualquier intento paquistaní de interceptar sus helicópteros, al decir que su país estaba "claramente" preocupado sobre la posibilidad de que Pakistán decidiera intervenir contra las naves. "Afortunadamente, las fuerzas paquistaníes no intervinieron y no hubo otros individuos muertos, además de aquellos que estaban en el complejo habitacional", precisó.
Cuando se confirmó la muerte de Bin Laden, hubo un "creciente sentimiento de confianza y un creciente sentimiento de realización", concluyó Brennan, antes de decir que la primera frase de de Obama al enterarse del éxito de la misión fue: "Lo atrapamos".