La CIA utilizó aviones no tripulados para vigilar a Bin Laden
Islamabad, Agencias
La CIA operó aviones furtivos no tripulados en decenas de misiones secretas dentro de Pakistán para vigilar el complejo residencial de Osama Bin Laden antes de que lo mataran los comandos estadounidenses, informó el martes el diario Washington Post.
Citando actuales y ex dirigentes de Estados Unidos, el Post dijo que la CIA utilizó los altamente sofisticados aviones no tripulados para volar sin ser detectados a grandes altitudes y suministrar vídeos de alta resolución meses antes de que Bin Laden fuera abatido en el espectacular operativo del 2 de mayo conducido por fuerzas especiales norteamericanas.
La CIA también utilizó satélites, equipos de escucha a distancia y agentes basados en una casa de seguridad en la ciudad-cuartel de Abbottabad, donde se estima que Bin Laden vivió durante cinco años hasta que fue localizado, según el Post.
Esta vigilancia subrayaría la creciente desconfianza entre Estados Unidos y Pakistán, dos incómodos aliados en la lucha contra el terrorismo. El operativo tensó aún más los vínculos con Islamabad, que ha recibido unos 20.000 millones de dólares en ayuda norteamericana durante la última década.
La CIA operó aviones furtivos no tripulados en decenas de misiones secretas dentro de Pakistán para vigilar el complejo residencial de Osama Bin Laden antes de que lo mataran los comandos estadounidenses, informó el martes el diario Washington Post.
Citando actuales y ex dirigentes de Estados Unidos, el Post dijo que la CIA utilizó los altamente sofisticados aviones no tripulados para volar sin ser detectados a grandes altitudes y suministrar vídeos de alta resolución meses antes de que Bin Laden fuera abatido en el espectacular operativo del 2 de mayo conducido por fuerzas especiales norteamericanas.
La CIA también utilizó satélites, equipos de escucha a distancia y agentes basados en una casa de seguridad en la ciudad-cuartel de Abbottabad, donde se estima que Bin Laden vivió durante cinco años hasta que fue localizado, según el Post.
Esta vigilancia subrayaría la creciente desconfianza entre Estados Unidos y Pakistán, dos incómodos aliados en la lucha contra el terrorismo. El operativo tensó aún más los vínculos con Islamabad, que ha recibido unos 20.000 millones de dólares en ayuda norteamericana durante la última década.