Cruyff: "El responsable es Florentino Pérez"

Barcelona, As
Johan Cruyff, ex futbolista y ex entrenador del FC Barcelona, dedica su columna de los lunes en 'El Periódico' a responsabilizar a Florentino Pérez del último exceso verbal de Mourinho en la rueda de prensa posterior al encuentro de ida de las semifinales de la Liga de Campeones.

"No sé el porqué de tanto revuelo. De tanta sorpresa. De tanto llevarse las manos a la cabeza por la rueda de prensa pospartido de la Champions de Mourinho. He escuchado que está loco, que es un manipulador. He leído mil adjetivos y mayoritariamente ninguno bueno para definir lo que dijo y cómo lo dijo. Que fue un esperpento, que hizo el ridículo, que perdió toda su credibilidad. Y mientras todos han apuntado y disparado al portugués, yo pienso que si hay que apuntar a alguien de todo lo que ha pasado y de todo lo que tiene que pasar en la casa blanca es a otro", comienza la columna de Cruyff.

"Mourinho ha hecho su trabajo. A su manera. Como él entiende el fútbol. Pero él solo es el entrenador. Por encima suyo hay alguien que es quien lo decide todo. El presidente es quien manda. El presidente es quien marca la línea del club. El presidente es quien decide qué quiere y cómo quiere que sea su equipo. Y entonces ficha a un técnico. El presidente elige a su general. Al profesional que tiene que llevar a sus jugadores a competir. En el fondo, el técnico es la prolongación en el campo de muchos de los valores que el presidente quiere defender. Solo hay un problema: cuando el único valor es la victoria final, cuando entregas todo el poder a tu general con tal de acabar con el enemigo, cuando te olvidas de la historia, de los valores. Entonces cruzas una línea demasiado peligrosa", continúa.

"Florentino fichó a Mourinho para acabar con la supremacía del Barça a cualquier precio. Me da igual no pasar del centro del campo, renunciar al fútbol de ataque constante que años y años vivió el Bernabéu. Me da igual faltar el respeto a profesionales del fútbol, quejarme de todo. Me da igual todo. Todo vale con tal de ganar. Pero Florentino se olvidó que tiene jugadores fantásticos. Jugadores que podrían llegar a formar un gran equipo. Jugadores que podrían, algún día, destronar al Barça haciendo disfrutar a su afición", insiste.

Johan Cruyff pone el ejemplo de cómo el 'Dream Team' acabó con la supremacía del Madrid de la 'Quinta del Buitre', "para mí ha sido su mejor equipo en los últimos 40 años". "En Barcelona todos lloraban. Los árbitros tenían la culpa de todo. Madriditis, al fin y al cabo. Ellos eran mejores y ganaban. Lograron dos títulos más, pero nosotros fuimos creciendo. Soportando que ellos fueran mejores, pero creciendo. Hasta que un día, jugando tan bien como ellos, o incluso mejor, les ganamos... Ganamos cuatro ligas consecutivas, pero ellos seguían siendo muy buenos. Y pudieron ganar dos de aquellas ligas. A un equipo fantástico, por muy fantástico que sea, lo puedes llegar a vencer jugando bien. Pero si eliges el camino equivocado, te puedes quedar sin nada", concluye el holandés.

Cruyff dice además que la polémica del tercero de la tormenta de clásicos ha dejado en un segundo plano el título copero cosechado por el Real Madrid en Mestalla: "Hoy solo se habla de si la expulsión de Pepe en la Champions era justa o no". Y destaca el exceso de agresividad del Madrid en los clásicos: "Entre Copa y Champions, Arbeloa agredió a Villa, Marcelo a Pedro, y el pisotón de Pepe a Messi fue terrible. No estoy reclamando nada. Pasó, no lo vio el arbitro y punto. Estoy hablando del estilo... de comportamiento en el terreno de juego". "Conozco mucho a Butragueño y a Valdano, lo que son y han sido como futbolistas, lo que defendían y defienden. No creo que aprueben según qué comportamientos. Pero da lo mismo. El presidente ya eligió. Hoy dentro de Mourinho está Florentino. El portugués es solo el ejecutor", sentencia.

Por último, Cruyff critica a Sandro Rosell por no salir a defender al club del ataque de Mourinho y dejar esa tarea para su entrenador. "Suscribo lo que dijo Guardiola. Solo un error grave: él no era quien debía hablar. Su trabajo es preparar a su equipo para jugar bien y ganar, no salir a partirse la cara por el club aunque lo haga mejor que nadie. Este trabajo le corresponde al presidente o a quien este delegue. Esta es la segunda vez que a Pep le toca hacer algo que detesta. Que sea la ultima", finaliza.