Bolivia apostará por el diálogo con Chile para resolver diferendo del Silala
Cochabamba, Abi
El presidente Evo Morales afirmó el sábado que Bolivia apostará por el diálogo con Chile para resolver el diferendo por las aguas del Silala y del río Lauca.
En una conferencia de prensa dictada en la ciudad de Cochabamba, el Jefe de Estado ratificó que Bolivia "jamás va a romper el diálogo con Chile" a pesar de que decidió acudir a tribunales internacionales para resolver la centenaria demanda de una salida soberana al Pacífico, que perdió en 1879 en una guerra territorial con el país trasandino.
"El tema del Lauca y Silala vamos a apostar por el dialogo y felizmente en los últimos días se ha sabido que el gobierno de Chile todavía confía en el dialogo. Bolivia jamás va a romper el dialogo con Chile", remarcó.
Nacidas en territorio boliviano andino, las aguas manantiales del Silala abastecen sin contraprestación alguna hace 105 años varias ciudades del norte de Chile y también el emporio cuprífero de Chuquicamata, puntal de las exportaciones estatales chilenas y sostén del erario público de ese país.
Merced a un tratado de derecho privado, el curso de agua fue conducido al norte chileno por un sistema de acueductos artificial.
A diferencia de las aguas del Río Lauca, las del Silala han sido incorporadas en la bilateral Agenda de 13 Puntos, definida en 2006 y que La Paz y Santiago negociaron hasta 2010.
En 2009 Chile, que alega que el Silala es un curso internacional de agua, se avino a reconocer un pago de entre 3 y 5 millones de dólares año, por el 50% de esos recursos hídricos que fluyen a Chile desde 1906, cuando la entonces Prefectura de Potosí y una empresa de ferrocarriles anglo chilena, que utilizaba el agua para impulsar sus locomotoras a vapor, celebraron un acuerdo de derecho privado internacional.
En el caso del río Lauca, Chile desvió su curso en 1962 y Bolivia rompió relaciones diplomáticas ese mismo año.
"Es nuestra obligación mantener el dialogo con Chile pero lo que vemos es que hay una excelente reacción del pueblo chileno, hace 132 años que hemos perdido la salida al mar, no es por culpa del pueblo chileno sino por culpa de la oligarquía chilena y con las empresas transnacionales petroleras", argumentó el Presidente boliviano.
El presidente Evo Morales afirmó el sábado que Bolivia apostará por el diálogo con Chile para resolver el diferendo por las aguas del Silala y del río Lauca.
En una conferencia de prensa dictada en la ciudad de Cochabamba, el Jefe de Estado ratificó que Bolivia "jamás va a romper el diálogo con Chile" a pesar de que decidió acudir a tribunales internacionales para resolver la centenaria demanda de una salida soberana al Pacífico, que perdió en 1879 en una guerra territorial con el país trasandino.
"El tema del Lauca y Silala vamos a apostar por el dialogo y felizmente en los últimos días se ha sabido que el gobierno de Chile todavía confía en el dialogo. Bolivia jamás va a romper el dialogo con Chile", remarcó.
Nacidas en territorio boliviano andino, las aguas manantiales del Silala abastecen sin contraprestación alguna hace 105 años varias ciudades del norte de Chile y también el emporio cuprífero de Chuquicamata, puntal de las exportaciones estatales chilenas y sostén del erario público de ese país.
Merced a un tratado de derecho privado, el curso de agua fue conducido al norte chileno por un sistema de acueductos artificial.
A diferencia de las aguas del Río Lauca, las del Silala han sido incorporadas en la bilateral Agenda de 13 Puntos, definida en 2006 y que La Paz y Santiago negociaron hasta 2010.
En 2009 Chile, que alega que el Silala es un curso internacional de agua, se avino a reconocer un pago de entre 3 y 5 millones de dólares año, por el 50% de esos recursos hídricos que fluyen a Chile desde 1906, cuando la entonces Prefectura de Potosí y una empresa de ferrocarriles anglo chilena, que utilizaba el agua para impulsar sus locomotoras a vapor, celebraron un acuerdo de derecho privado internacional.
En el caso del río Lauca, Chile desvió su curso en 1962 y Bolivia rompió relaciones diplomáticas ese mismo año.
"Es nuestra obligación mantener el dialogo con Chile pero lo que vemos es que hay una excelente reacción del pueblo chileno, hace 132 años que hemos perdido la salida al mar, no es por culpa del pueblo chileno sino por culpa de la oligarquía chilena y con las empresas transnacionales petroleras", argumentó el Presidente boliviano.