Obama y Erdogan expresan su preocupación por uso de la violencia contra los sirios
Washington, Agencias
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, han expresado su "profunda preocupación por el inaceptable uso de la violencia del Gobierno sirio contra su propio pueblo", al tiempo que han reiterado la necesidad de que el mandatario libio, Muamar Gadafi, abandone el poder de forma "permanente".
En una conversación telefónica, ambos líderes han coincidido en que el régimen sirio "debe frenar el uso de la violencia" contra los manifestantes y "promulgar sin demora una significativa reforma que respete las aspiraciones democráticas de los ciudadanos sirios".
Estas declaraciones se producen en el marco de la escalada de violencia en los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes en las principales ciudades del país, que ya han causado la muerte a más de 300 personas desde que comenzaron las protestas contra el presidente, Bashar al Assad.
En referencia a Libia, los dos mandatarios han subrayado que Gadafi debe abandonar el poder y apartarse de forma "permanente" del país "para que haya una solución duradera que refleje la voluntad del pueblo libio", tras más de dos meses de conflicto interno.
Obama ha agradecido a Erdogan el apoyo de Turquía a los esfuerzos militares para establecer una zona de exclusión aérea sobre Libia, así como a las operaciones de embargo de armas a este país, en cumplimiento de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
En relación a una tercera cuestión, el estadounidense ha expresado al turco su confianza en que Israel "encontrará oportunidades para mejorar sus relaciones en interés de la estabilidad regional", en alusión al estancado proceso de paz con los palestinos.
En este contexto, ambos dirigentes se han comprometido a continuar con las consultas bilaterales sobre el desarrollo de los acontecimientos en Oriente Próximo, según recoge el comunicado divulgado por la Casa Blanca.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, han expresado su "profunda preocupación por el inaceptable uso de la violencia del Gobierno sirio contra su propio pueblo", al tiempo que han reiterado la necesidad de que el mandatario libio, Muamar Gadafi, abandone el poder de forma "permanente".
En una conversación telefónica, ambos líderes han coincidido en que el régimen sirio "debe frenar el uso de la violencia" contra los manifestantes y "promulgar sin demora una significativa reforma que respete las aspiraciones democráticas de los ciudadanos sirios".
Estas declaraciones se producen en el marco de la escalada de violencia en los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes en las principales ciudades del país, que ya han causado la muerte a más de 300 personas desde que comenzaron las protestas contra el presidente, Bashar al Assad.
En referencia a Libia, los dos mandatarios han subrayado que Gadafi debe abandonar el poder y apartarse de forma "permanente" del país "para que haya una solución duradera que refleje la voluntad del pueblo libio", tras más de dos meses de conflicto interno.
Obama ha agradecido a Erdogan el apoyo de Turquía a los esfuerzos militares para establecer una zona de exclusión aérea sobre Libia, así como a las operaciones de embargo de armas a este país, en cumplimiento de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
En relación a una tercera cuestión, el estadounidense ha expresado al turco su confianza en que Israel "encontrará oportunidades para mejorar sus relaciones en interés de la estabilidad regional", en alusión al estancado proceso de paz con los palestinos.
En este contexto, ambos dirigentes se han comprometido a continuar con las consultas bilaterales sobre el desarrollo de los acontecimientos en Oriente Próximo, según recoge el comunicado divulgado por la Casa Blanca.