Jesucristo no fue crucificado como se muestra en el arte
Londres, Agencias
Jesús fue crucificado de “otro” modo. En plena Semana Santa, la BBC ofreció un polémico reportaje sobre la pasión de Jesucristo, en el que descubre que no fue crucificado como hasta ahora todos lo habíamos visto en imágenes y cuadros.
Según el reportaje de investigación histórica titulado simplemente “La Pasión”, Jesucristo habría sido crucificado con los brazos en alto, y las piernas flexionadas.
Este cambio en la imagen clásica de la crucifixión surge después de unas investigaciones sobre el cadáver de un crucificado cerca de Jerusalén, que, de acuerdo con los expertos, data del año 6 después de Cristo.
Ahí se pudo comprobar cómo las heridas de los clavos estaban en los brazos, no en las manos, y cómo el cadáver mantenía esta posición fetal.
“Crucifixión eficaz”
Los investigadores concluyeron con esta forma de crucifixión, mucho más eficaz, ya que al estar las piernas flexionadas y los brazos en alto, el peso del cuerpo recaía sobre el abdomen, provocando la muerte por asfixia.
“A veces a los crucificados no se los clavaba al listón horizontal de la cruz. Se los ataba con sogas que impedían la circulación de la sangre y, por lo tanto, acababan debilitando al reo”, explica uno de los investigadores, Clay Bannon, co-autor del trabajo difundido por la BBC.
“A Jesucristo, probablemente, sí lo clavaron en la cruz pero nunca en la palma de las manos, pues se habría desplomado. Lo clavaron de los brazos que, por cierto, estaban rotos después de la brutal sesión de tortura”, matiza Bannon para aclarar las circunstancias técnicas de la crucifixión de Cristo.
Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar, y desde sectores eclesiásticos se acusó al programa de la televisión pública británica de distorsionar la Biblia y la imagen de Jesús crucificado.
Por supuesto, también hay quien ve con buenos ojos este descubrimiento, como el obispo de Arundel y Brighton, que aplaude esta versión “más auténtica y humana de Jesús, alejada de interpretaciones artísticas”. Según la propia dirección de contenidos de la BBC, el objetivo del reportaje de investigación era “incidir en la necesidad de acercar a la audiencia a una visión histórica mucho más ajustada a lo que realmente pasó en el Calvario. Es fundamental para nosotros siempre buscar la verdad”, dice en comunicado.
Jesús fue crucificado de “otro” modo. En plena Semana Santa, la BBC ofreció un polémico reportaje sobre la pasión de Jesucristo, en el que descubre que no fue crucificado como hasta ahora todos lo habíamos visto en imágenes y cuadros.
Según el reportaje de investigación histórica titulado simplemente “La Pasión”, Jesucristo habría sido crucificado con los brazos en alto, y las piernas flexionadas.
Este cambio en la imagen clásica de la crucifixión surge después de unas investigaciones sobre el cadáver de un crucificado cerca de Jerusalén, que, de acuerdo con los expertos, data del año 6 después de Cristo.
Ahí se pudo comprobar cómo las heridas de los clavos estaban en los brazos, no en las manos, y cómo el cadáver mantenía esta posición fetal.
“Crucifixión eficaz”
Los investigadores concluyeron con esta forma de crucifixión, mucho más eficaz, ya que al estar las piernas flexionadas y los brazos en alto, el peso del cuerpo recaía sobre el abdomen, provocando la muerte por asfixia.
“A veces a los crucificados no se los clavaba al listón horizontal de la cruz. Se los ataba con sogas que impedían la circulación de la sangre y, por lo tanto, acababan debilitando al reo”, explica uno de los investigadores, Clay Bannon, co-autor del trabajo difundido por la BBC.
“A Jesucristo, probablemente, sí lo clavaron en la cruz pero nunca en la palma de las manos, pues se habría desplomado. Lo clavaron de los brazos que, por cierto, estaban rotos después de la brutal sesión de tortura”, matiza Bannon para aclarar las circunstancias técnicas de la crucifixión de Cristo.
Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar, y desde sectores eclesiásticos se acusó al programa de la televisión pública británica de distorsionar la Biblia y la imagen de Jesús crucificado.
Por supuesto, también hay quien ve con buenos ojos este descubrimiento, como el obispo de Arundel y Brighton, que aplaude esta versión “más auténtica y humana de Jesús, alejada de interpretaciones artísticas”. Según la propia dirección de contenidos de la BBC, el objetivo del reportaje de investigación era “incidir en la necesidad de acercar a la audiencia a una visión histórica mucho más ajustada a lo que realmente pasó en el Calvario. Es fundamental para nosotros siempre buscar la verdad”, dice en comunicado.