El G7 intervendrá en los mercados para respaldar a Japón
Bruselas, El País
Los ministros de Finanzas del G7 han decidido unir sus fuerzas para contener la subida del yen, que se mantiene imparable desde que hace una semana, cuando un terremoto de magnitud 8.9 en la escala de Richter asolara elnoreste de Japón y provocase graves daños en la central nuclear de Fukushima. Desde entonces, el Banco de Japón ha puesto a disposición de los bancos 34.000 millones de yenes (429.998 millones de euros) en varias inyecciones de liquidez entre el lunes y el jueves, que no han servido para disipar la incertidumbre en los mercados. Hoy mismo, la entidad ha decidido volver a intervenir con otros 3.000 millones de yenes (27.085 millones de euros) a corto plazo. El Gobernador del Banco de Japón (BOJ), Masaaki Shirakawa, ha manifestado que seguirán persiguiendo una fuerte flexibilización monetaria en acción coordinada con Japón, Estados Unidos, Reino Unidos, Canadá y el Banco Central Europeo.
Los representantes del G7 celebraron ayer una reunión de emergencia después de que el yen alcanzase hoy su máximo frente al dólar desde el fin de la II Guerra Mundial ante la creencia de que Japón tenga que usar una gran provisión de fondos para financiar la reconstrucción del país. Los ministros destacaron que "el exceso de volatibilidad y los movimientos desordenados en los tipos de cambio tienen repercusiones adversas para la estabilidad económica y financiera" pero, nada más producirse el anuncio de su respaldo a Japón por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el G7 ha logrado su primer golpe de efecto.
El dólar ha caído más de 80 yenes y el Nikkei ha logrado rebotar un 3%en su apertura, a las 01.30 (hora española). Al inicio de las cotizaciones, la Bolsa tokiota ha avanzado a 9.239,67 puntos, moderando así el batacazo acumulado desde el viernes del 14% al 9,4%.
Los ministros de Finanzas del G7 han decidido unir sus fuerzas para contener la subida del yen, que se mantiene imparable desde que hace una semana, cuando un terremoto de magnitud 8.9 en la escala de Richter asolara elnoreste de Japón y provocase graves daños en la central nuclear de Fukushima. Desde entonces, el Banco de Japón ha puesto a disposición de los bancos 34.000 millones de yenes (429.998 millones de euros) en varias inyecciones de liquidez entre el lunes y el jueves, que no han servido para disipar la incertidumbre en los mercados. Hoy mismo, la entidad ha decidido volver a intervenir con otros 3.000 millones de yenes (27.085 millones de euros) a corto plazo. El Gobernador del Banco de Japón (BOJ), Masaaki Shirakawa, ha manifestado que seguirán persiguiendo una fuerte flexibilización monetaria en acción coordinada con Japón, Estados Unidos, Reino Unidos, Canadá y el Banco Central Europeo.
Los representantes del G7 celebraron ayer una reunión de emergencia después de que el yen alcanzase hoy su máximo frente al dólar desde el fin de la II Guerra Mundial ante la creencia de que Japón tenga que usar una gran provisión de fondos para financiar la reconstrucción del país. Los ministros destacaron que "el exceso de volatibilidad y los movimientos desordenados en los tipos de cambio tienen repercusiones adversas para la estabilidad económica y financiera" pero, nada más producirse el anuncio de su respaldo a Japón por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el G7 ha logrado su primer golpe de efecto.
El dólar ha caído más de 80 yenes y el Nikkei ha logrado rebotar un 3%en su apertura, a las 01.30 (hora española). Al inicio de las cotizaciones, la Bolsa tokiota ha avanzado a 9.239,67 puntos, moderando así el batacazo acumulado desde el viernes del 14% al 9,4%.