Libia: la oposición se hace fuerte en Bengasi
Redacción, BBC Mundo
Algunas fuentes aseguran que una guarnición militar se rindió a los opositores en la ciudad que se ha convertido en el centro de las protestas contra el gobierno de Muamar Gadafi, que lleva en el poder desde 1969.
Sin embargo, ante el apagón informativo decretado por las autoridades, es prácticamente imposible que cualquier versión pueda ser confirmada por fuentes independientes.
Testimonios recabados por la BBC hablan de una situación "desastrosa". Médicos de un hospital local denunciaron más de 200 muertos después de que las tropas dispararan contra la multitud.
El grupo de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch, con sede en Estados Unidos, calcula que al menos 173 personas han muerto desde que el martes comenzó la represión a las protestas.
El grupo explicó que la cifra incluye al menos 20 personas que murieron el sábado, cuando soldados utilizaron armas pesadas en Bengasi.
Human Rights Watch dijo que sus cifras son conservadoras. Sin embargo, no ha sido posible confirmarlas de forma independiente porque el gobierno libio mantiene un férreo control de los medios de información en el país.
Confusión informativa
El ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, advirtió al gobierno libio de que estas acciones serán condenadas internacionalmente.
En una raro gesto de reconocimiento del levantamiento en Bengasi, la televisión estatal libia hizo público que "una base de gente armada" lanzó un ataque contra la ciudad.
En medio de esas dificultades, han comenzado a aparecer reportes de protestas en Trípoli.
Sara Radwan, una vecina de la capital, le dijo a la BBC que la situación era "muy tensa y atemorizante".
"Trípoli es muy importante, aquí viven personas de todo el país. Todo el mundo observa y espera. Gadafi nos pone enfermos, esto es como una guerra", dijo.
Libia es uno de los numerosos países que en la región vive una ola de protestas a favor de reformas democráticas después de la caída del presidente de Túnez, Zine El Abidine Ben Ali en enero y la posterior de Hosni Mubarak en Egipto.
Según el corresponsal de la BBC para Oriente Medio Jon Leyne, el levantamiento actual es el desafío más serio al que se ha tenido que enfrentar Gadafi.
Algunas fuentes aseguran que una guarnición militar se rindió a los opositores en la ciudad que se ha convertido en el centro de las protestas contra el gobierno de Muamar Gadafi, que lleva en el poder desde 1969.
Sin embargo, ante el apagón informativo decretado por las autoridades, es prácticamente imposible que cualquier versión pueda ser confirmada por fuentes independientes.
Testimonios recabados por la BBC hablan de una situación "desastrosa". Médicos de un hospital local denunciaron más de 200 muertos después de que las tropas dispararan contra la multitud.
El grupo de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch, con sede en Estados Unidos, calcula que al menos 173 personas han muerto desde que el martes comenzó la represión a las protestas.
El grupo explicó que la cifra incluye al menos 20 personas que murieron el sábado, cuando soldados utilizaron armas pesadas en Bengasi.
Human Rights Watch dijo que sus cifras son conservadoras. Sin embargo, no ha sido posible confirmarlas de forma independiente porque el gobierno libio mantiene un férreo control de los medios de información en el país.
Confusión informativa
El ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, advirtió al gobierno libio de que estas acciones serán condenadas internacionalmente.
En una raro gesto de reconocimiento del levantamiento en Bengasi, la televisión estatal libia hizo público que "una base de gente armada" lanzó un ataque contra la ciudad.
En medio de esas dificultades, han comenzado a aparecer reportes de protestas en Trípoli.
Sara Radwan, una vecina de la capital, le dijo a la BBC que la situación era "muy tensa y atemorizante".
"Trípoli es muy importante, aquí viven personas de todo el país. Todo el mundo observa y espera. Gadafi nos pone enfermos, esto es como una guerra", dijo.
Libia es uno de los numerosos países que en la región vive una ola de protestas a favor de reformas democráticas después de la caída del presidente de Túnez, Zine El Abidine Ben Ali en enero y la posterior de Hosni Mubarak en Egipto.
Según el corresponsal de la BBC para Oriente Medio Jon Leyne, el levantamiento actual es el desafío más serio al que se ha tenido que enfrentar Gadafi.