Egipto: militares suspenden la Constitución y disuelven el Parlamento
Redacción, BBC Mundo
Las autoridades militares de Egipto decretaron la disolución del Parlamento y la suspensión de la vigencia de la Constitución. Además, anunciaron que saldrán del poder en un plazo de seis meses o después de las elecciones.
En una declaración emitida por la televisión estatal, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas respondió así al conato de resurgimiento de protestas registrado en horas de la mañana en la plaza Tahrir de El Cairo.
Los manifestantes a favor de la democracia se negaron a poner fin a la protesta, pese a los esfuerzos de los militares por desalojar la plaza, en un intento de que el país regresara la normalidad.
La Policía Militar había pedido que se desmontaran la carpas de la plaza después de que los manifestantes ya consiguieran que el presidente Hosni Mubarak dejara el poder. Quienes siguen protestando exigen un calendario de reformas democráticas.
El corresponsal de la BBC en El Cairo Wyre Davis señaló que la situación llegó a una especie de punto muerto, con militares y manifestantes unos frente a los otros.
Seguridad
Mientras, el primer ministro Ahmed Shafiq dijo que su principal prioridad es restaurar la seguridad en el país después de que estén a punto de cumplirse tres semanas de revueltas.
Shafiq dijo que los egipcios habían perdido el sentido de la seguridad durante las protestas.
"En paralelo, también queremos garantizar que la vida regrese a la normalidad y que se cubran las necesidades básicas como el pan y la asistencia sanitaria".
El jefe del gobierno comentó que aunque el país tiene suficientes reservas para superar la crisis económica, de continuar la inestabilidad, podrían presentarse "obstáculos".
Las autoridades militares de Egipto decretaron la disolución del Parlamento y la suspensión de la vigencia de la Constitución. Además, anunciaron que saldrán del poder en un plazo de seis meses o después de las elecciones.
En una declaración emitida por la televisión estatal, el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas respondió así al conato de resurgimiento de protestas registrado en horas de la mañana en la plaza Tahrir de El Cairo.
Los manifestantes a favor de la democracia se negaron a poner fin a la protesta, pese a los esfuerzos de los militares por desalojar la plaza, en un intento de que el país regresara la normalidad.
La Policía Militar había pedido que se desmontaran la carpas de la plaza después de que los manifestantes ya consiguieran que el presidente Hosni Mubarak dejara el poder. Quienes siguen protestando exigen un calendario de reformas democráticas.
El corresponsal de la BBC en El Cairo Wyre Davis señaló que la situación llegó a una especie de punto muerto, con militares y manifestantes unos frente a los otros.
Seguridad
Mientras, el primer ministro Ahmed Shafiq dijo que su principal prioridad es restaurar la seguridad en el país después de que estén a punto de cumplirse tres semanas de revueltas.
Shafiq dijo que los egipcios habían perdido el sentido de la seguridad durante las protestas.
"En paralelo, también queremos garantizar que la vida regrese a la normalidad y que se cubran las necesidades básicas como el pan y la asistencia sanitaria".
El jefe del gobierno comentó que aunque el país tiene suficientes reservas para superar la crisis económica, de continuar la inestabilidad, podrían presentarse "obstáculos".