Valenzuela tilda de "antidemocrática" la ley que da poderes especiales a Chávez
Washington, Agencias
El secretario de Estado adjunto de EE.UU. para Latinoamérica, Arturo Valenzuela, tildó hoy de "antidemocrática" la Ley Habilitante que otorga al presidente venezolano, Hugo Chávez, poderes especiales y afirmó que esta viola la Carta Democrática Interamericana de la OEA.
En una conferencia en la Brookings Institution sobre la política de EE.UU. hacia Latinoamérica, Valenzuela volvió a lamentar lo que describió como "una tendencia" que está tomando arraigo en varios países de la región en virtud de la cual líderes promueven cambios constitucionales para mantenerse en el poder.
"Los acontecimientos en Venezuela generan serias preocupaciones en este contexto", dijo.
Preocupa, entre otros elementos, la ley que se aprobó el 17 de diciembre en el país andino antes de que se instalara la nueva Asamblea Nacional (AN) de Venezuela y que otorga poderes especiales por 18 meses a Chávez para que pueda promulgar decretos-ley en diversas materias sin estar sujeto al control del Parlamento.
"Esta medida antidemocrática viola los valores compartidos consagrados en la Carta Democrática Interamericana" de la Organización de Estados Americanos (OEA), recalcó, que cumple este año su décimo aniversario y que EE.UU. pretende fortalecer.
En cuanto a la crisis de embajadores entre ambos países, Valenzuela no arrojó más luz sobre la decisión que tomará el Gobierno con respecto al próximo representante de Estados Unidos en Venezuela, aunque reiteró el apoyo de la Administración a su candidato.
Larry Palmer, quien fue nombrado por EE.UU. como próximo embajador en Venezuela, fue rechazado por Caracas, algo que motivó a Washington a revocar finalmente y tras varios meses de discusiones diplomáticas, el visado al representante venezolano, Bernardo Álvarez.
"Desde el principio hemos dejado claro a Venezuela que queremos una relación fuerte con ellos", en la que ambos Gobiernos puedan dialogar de manera franca sobre intereses comunes pero también sobre desacuerdos, dijo Valenzuela.
Pero también ha dejado "muy claro que Palmer es el candidato a embajador en Caracas, pese al rechazo del Gobierno del presidente Chávez y que no tenía intención de cambiar su nombramiento.
"Lamentamos mucho que retiraran el beneplácito (a Palmer) porque pensamos que sería un excelente embajador", señaló.
La designación del diplomático venció al término del 111 periodo legislativo del Congreso de EE.UU. sin que el Senado le hubiera confirmado.
El secretario de Estado adjunto únicamente dijo que el Departamento de Estado ha dicho que va a "considerar un nombramiento" y evaluar qué hacer a la vista de esta situación, pero que de la decisión sobre cualquier designación, ya sea de Palmer o de otro candidato, corresponde a la Casa Blanca.
Chávez rechazó a Palmer como embajador en Caracas después que afirmara, al responder un cuestionario del Senado, que la moral de los militares venezolanos era baja y que era necesario investigar la presunta presencia de la guerrilla colombiana en Venezuela.
El secretario de Estado adjunto de EE.UU. para Latinoamérica, Arturo Valenzuela, tildó hoy de "antidemocrática" la Ley Habilitante que otorga al presidente venezolano, Hugo Chávez, poderes especiales y afirmó que esta viola la Carta Democrática Interamericana de la OEA.
En una conferencia en la Brookings Institution sobre la política de EE.UU. hacia Latinoamérica, Valenzuela volvió a lamentar lo que describió como "una tendencia" que está tomando arraigo en varios países de la región en virtud de la cual líderes promueven cambios constitucionales para mantenerse en el poder.
"Los acontecimientos en Venezuela generan serias preocupaciones en este contexto", dijo.
Preocupa, entre otros elementos, la ley que se aprobó el 17 de diciembre en el país andino antes de que se instalara la nueva Asamblea Nacional (AN) de Venezuela y que otorga poderes especiales por 18 meses a Chávez para que pueda promulgar decretos-ley en diversas materias sin estar sujeto al control del Parlamento.
"Esta medida antidemocrática viola los valores compartidos consagrados en la Carta Democrática Interamericana" de la Organización de Estados Americanos (OEA), recalcó, que cumple este año su décimo aniversario y que EE.UU. pretende fortalecer.
En cuanto a la crisis de embajadores entre ambos países, Valenzuela no arrojó más luz sobre la decisión que tomará el Gobierno con respecto al próximo representante de Estados Unidos en Venezuela, aunque reiteró el apoyo de la Administración a su candidato.
Larry Palmer, quien fue nombrado por EE.UU. como próximo embajador en Venezuela, fue rechazado por Caracas, algo que motivó a Washington a revocar finalmente y tras varios meses de discusiones diplomáticas, el visado al representante venezolano, Bernardo Álvarez.
"Desde el principio hemos dejado claro a Venezuela que queremos una relación fuerte con ellos", en la que ambos Gobiernos puedan dialogar de manera franca sobre intereses comunes pero también sobre desacuerdos, dijo Valenzuela.
Pero también ha dejado "muy claro que Palmer es el candidato a embajador en Caracas, pese al rechazo del Gobierno del presidente Chávez y que no tenía intención de cambiar su nombramiento.
"Lamentamos mucho que retiraran el beneplácito (a Palmer) porque pensamos que sería un excelente embajador", señaló.
La designación del diplomático venció al término del 111 periodo legislativo del Congreso de EE.UU. sin que el Senado le hubiera confirmado.
El secretario de Estado adjunto únicamente dijo que el Departamento de Estado ha dicho que va a "considerar un nombramiento" y evaluar qué hacer a la vista de esta situación, pero que de la decisión sobre cualquier designación, ya sea de Palmer o de otro candidato, corresponde a la Casa Blanca.
Chávez rechazó a Palmer como embajador en Caracas después que afirmara, al responder un cuestionario del Senado, que la moral de los militares venezolanos era baja y que era necesario investigar la presunta presencia de la guerrilla colombiana en Venezuela.